Un nuevo día había llegado a Konohagakure no Sato y Kurama estaba caminando hacia el campo de entrenamiento 8 para reunirse con Hinata, Ino y su Sensei Kurenai. Fueron las 9 AM cuando él llegó al lugar donde se juntarían y como todavía quedaba mucho tiempo para que los demás llegaran, él se estiró bajo un árbol y se quedó dormido. A la media hora, Hinata e Ino llegaron al lugar y sonrieron cuando vieron al chico dormir bajo el árbol.
"¿Deberíamos despertarlo?" - preguntó Hinata.
"No..." - negó Ino - "Puede que todavía se esté acostumbrando a moverse, recuerda que solo ayer él salió del hospital"
Pasaron otros 10 minutos para que una persona apareciera en el campo de entrenamiento 7, ella era hermosa mujer de cabello negro hasta los hombros, unos ojos rojos con un anillo alrededor de la pupila, los labios los tenía pintado con un rojo similar a sus ojos. Estaba usando una blusa de mallas de armadura roja que no podía ocultar sus curvas, sobre esta tenia un material parecido a vendas con patrones de espinas de rosas y sus manos y muslos estaban vendados. 9 de 10 hombres dirán que ella es hermosa y el ultimo dirá que es mas de menores de edad o que es amigo de Orochimaru.
Kurama sintió la presencia de Kurenai a penas llego al campo de entrenamiento así que abrió los ojos. Cuando lo hizo, tuvo que admitir que ella era realmente hermosa. Él la había visto el día de ayer pero seguía encantado por la delicadeza de sus facciones.
Las dos Genin se molestaron cuando notaron la expresión del chico pero rápidamente se calmaron.
Kurenai lo encontró divertido pero rápidamente sacudió su cabeza - "Es bueno vernos de nuevo, Kurama-kun"
"El sentimiento es mutuo, Kurenai Sensei" - asintió el pelirrojo.
"Ustedes ya se conocen pero es una tradición que los grupos se presenten para que haya una mejor unidad" - dijo Kurenai mientras miraba a sus Genin - "Así que empezaré yo, mi nombre es Kurenai Yuhi, me gusta tomar algunas copas sake bajo la luz de la luna, lo que me disgusta son los traidores, los que no cumplen sus promesas y los pervertidos..."
"Mi nombre es Hinata Hyuga..." - dijo la niña de ojos perlados - "Me gustan las flores, entrenar, mis amigos y..."
Aquí la ojos perla pauso, miro a Kurama y se sonrojó poniendo sus manos en la cara - "...y... K-Ku-Ku...¡KURAMA-KUN!"
Terminó de hablar y se desmayó con la cara roja mientras humo salia de su cabeza, lo gracioso es que no pudo ni decir que es lo que le disgustaba. La rubia vio a su amiga, sacudió su cabeza y dijo - "Mi nombre es Ino Yamanaka, me gustan las flores, la moda y más que nada Kuro-kun~"
Esto lo dijo mientras le guiñaba un ojo a Kurama pero este solo le dio una sonrisa. Él sabía que las chicas sentían algo por él pero no sabía como responderles al menos hasta hace unos días.
"Lo que no me gusta son los pervertidos, los que no se toman su carrera ninja enserio y los engreídos" - Ino estaba un poco molesta de que el chico que le gustaba no se sonrojara pero no podía hacer nada, solo pensar que tendría que ser un poco más activa.
Kurenai vio la aptitud de las dos chicas y asintió - "Ellas tienen potencial y por la información que Hiruzen-sama me dio, ellas fueron torturadas...entrenadas por Kushina-sensei..."
"Muy bien, sigues tu Foxy" - Dijo la sensei mientras miraba a Kurama.
"Ok, Mi nombre es Kurama Uzumaki, me gusta el ramen, entrenar y..." - dijo el pelirrojo pero estaba indeciso en si dar la información o no.
"Si estás pensando en si informar sobre tu estado como afectado de el CRA, entonces no tienes que preocuparte" - dijo Kurenai con seriedad - "Hiruzen-sama ya informó a todos las Cabezas de Clan y Jonin Sensei sobre el tema"
"Etto... ¿Kurenai Sensei... qué es el CRA?" - preguntó Hinata quien recién había despertado.
"Sinceramente no estoy cómoda hablando sobre esto, así que mejor dejo la explicación a Kurama-kun" - respondió la Kunoichi de ojos rojos - "Lamento no poder darte la respuesta que buscas"
"La Acta de Restauración de Clanes o CRA para abreviar, es una Acta que solo es posible si un Clan está al borde de la extinción" - dijo el pelirrojo - "Permite al sobreviviente el tener más de una pareja para poder tener más descendencia"
Las dos Genin se sonrojaron al escuchar sobre la descendencia aunque tenían que admitir que la parte donde el pelirrojo ahora podía tener más de una pareja era algo que las aliviaba. Ellas eran mejores amigas y habían entrenado juntas por años, así que no querían hacer sufrir a la otra, era por eso que había decidido unir fuerzas y ver si Kurama podía aceptarlas a las dos pero ahora que el pelirrojo estaba en un programa como el CRA, ya no era necesario el preocuparse de que si las aceptaba o no.
"Como dato extra, el clan Uchiha no es aplicable a esta ley porque hay 3 hombres activos" - agregó Kurenai.
"Pero volviendo al tema, el CRA no es conocido porque digamos que no es la mejor ley que digamos" - suspiró el pelirrojo - "La ley tiene un GRAVE problema... y ese viene siendo las mujeres..."
"¿Qué es lo que les sucede?"- preguntó Ino.
"Un destino peor que la muerte..." - dijo Kurenai con asco. Ella no quería hablar pero era mejor que una mujer se los contara, así tendría un mayor impacto - "Son usadas como maquinas de crianza. Su única finalidad es dar a luz y cuando lo hacen, sus hijos son arrebatados y ellas son devueltas al proceso de embarazo"
"!" - las jóvenes quedaron pálidas ante las palabras de su sensei.
"La única salvación que tienen las mujeres que entran a ese programa..." - dijo Kurenai mientras quedaba en silencio unos momentos - "Es la muerte..."
". . ." - Hinata e Ino no sabían que decir.
"Kaasan me dijo que había tenido malas experiencias con el CRA" - dijo Kurama mientras soltaba un suspiro - "Después de todo, ella era la última mujer Uzumaki y los del consejo civil, deseaban poseerla para aumentar su poder político..."
"Es por eso que no sabía si aceptar la opción que me había dado Hiruzen Jiji" - dijo Kurama mientras miraba a las chicas - "Es por eso que decidí preguntarle a Kaasan para que me diera su opinión y luego de hablarlo por unos cuantos minutos, decidimos que era la mejor opción... así tampoco podrían exigirle nada ya que yo como Uzumaki estoy dentro del programa"
"¿Qué te hizo tomar la decisión de entrar en el CRA?" - preguntó Kurenai con el ceño fruncido.
"Primero el poder proteger a Kaasan" - respondió Kurama pero su voz rápidamente cambió a una de vergüenza - "Y segundo... mi indecisión..."
"¿A qué te refieres?" - preguntó Kurenai con una clara molestia en su tono.
"Yo no sabía que hacer" - suspiró el pelirrojo - "No voy a entrar en detalles porque siento que no es necesario pero digamos que mi situación era un tanto... peculiar..."
"Había unas personas que son demasiado importantes para mi pero no podía elegir solo una de ellas" - el chico solo podía mirar al suelo con una expresión apenada - "Si escogía a una, las demás sufrirían por mi decisión, es por eso que no sabía que hacer..."
Kurenai solo negó con la cabeza mientras le daba una mirada neutra al chico. A las mujeres no les gustaban los hombres indecisos pero al menos el tenía que darle crédito al chico, él estaba siendo honesto.
"Ellas... las chicas que no quieres desilusionar... ¿aceptaron la idea de entrar al CRA contigo?" - preguntó Kurenai con seriedad.
"Si..." - asintió el chico - "Les pregunté su opinión antes de darle mi respuesta a Ero Jiji"
Kurenai asintió ante las palabras del chico, al menos había respetado la decisión de los demás.
"No soy quien para meterme en tu vida, menos cuando ellas aceptaron por voluntad propia" - suspiró la kunoichi de ojos rojos - "Pero como mujer, solo te pido que no las lastimes"
"No planeo hacerlo" - sonrió el pelirrojo - "Ellas son demasiado importantes para mi"
Kurenai solo le dio una sonrisa - "Mejor continúa con tu presentación"
"Ok" - asintió el chico - "Supongo que ahora viene lo que no me gusta... y esos serían los pervertidos, los débiles que no hacen nada para remediarlo y los hambrientos de poder"
"Supongo que eso sería todo" - asintió Kurenai mientras miraba a su escuadrón - "Hiruzen-sama me pidió que le informara sobre mi primera impresión con ustedes entre otras cosas, así que por ahora me retiro, pero antes... los felicito por volverse Genin"
"¡Hai!" - gritaron los tres Genin.
"Pueden retirarse" - dicho eso, Kurenai desapareció en un Shunshin.
"Chicas... ¿qué tal si hablamos un poco?" - preguntó el pelirrojo mientras las dos asentían y lo seguían.
Los tres Genin caminaron hacia la aldea mientras conversaban sobre lo que había pasado. Kurama les explicó algunos detalles extra sobre el CRA y quien era una de las chicas.
Ninguna de las dos kunoichi se sorprendió cuando escucharon que era Anko y fue en ese momento donde las dos se prometieron que no perderían la batalla por el corazón del chico.
Luego de eso, Kurama las llevó a sus casas y decidió volver al campo de entrenamiento para poder quemar un poco de energía, después de todo había estado días sin poder mover un músculo y necesitaba algo de movimiento.
* * * * * * * *
Kurama volvió a su hogar cuando el sol se estaba ocultando. Kushina no estaba sorprendida por esto, así que solo le dio una pequeña sonrisa y le dijo que se fuera a bañar.
Kurama lo hizo sin pensarlo dos veces pero cuando estaba a punto de tocar el pomo de la puerta, le empezó a dar un fuerte dolor de cabeza - "Ugh..."
Lentamente fragmentos de memoria invadieron su mente junto a imágenes que no comprendía.
"Nami... no Kuni..." - murmuró el chico mientras el dolor se intensificaba. Él sentía como si esto fuera algo importante pero mientras más intentaba recordarlo peor era la jaqueca.
"¿Kuro-chan?" - preguntó Kushina al ver que el joven se había detenido - "¿Estás bien?"
"No es nada..." - respondió el joven pelirrojo - "Solo un pequeño dolor de cabeza..."
"Mejor toma tu baño... tal vez así se te quite un poco" - dijo Kushina con una sonrisa.
"Lo haré" - sonrió Kurama mientras entraba al baño.
Luego de darse una ducha, Kurama fue al comedor para poder cenar con Kushina. Los dos estuvieron hablando sobre lo que había sucedido en el día y como había venido Mikoto a ver si él estaba en casa.
Kurama se sintió un poco mal al saber que había ignorado a la Uchiha pero luego de unas palabra de Kushina y que le avisara de que volvería mañana, él se calmó.
"Voy a ver las estrellas, Kushi-chan" - sonrió el pelirrojo mientras miraba a la bella Uzumaki.
"Solo recuerda entrar antes de que te quedes dormido" - dijo la matriarca Uzumaki.
"No creo que sea tan idiota" - bufó Kurama pero en verdad si se quedó dormido en la intemperie.
* * * * *
"Nunca más duermo en el techo..." - dijo Kurama mientras los huesos de su cuello sonaban.
"No es como si las tejas, fueran diseñadas para dormir" - dijo Kushina mientras soltaba una pequeña risa.
"Lo se..." - dijo Kurama mientras soltaba un suspiro - "Como sea, mejor me preparo..."
Cuando fueron las 9:30 AM, se dirigió al campo de entrenamiento 8 para encontrarse con su sensei y compañeras de equipo. Ahí espero 5 minutos para que empezaran a llegar.
La primera que llego fue Hinata, luego Ino y finalmente Kurenai. Las dos Genin estaban calmadas y parecían desbordar un aura de seriedad absoluta.
Kurenai asintió al ver a las chicas con una sonrisa en su rostro mientras pensaba en el potencial que las Genin tenían.
"¡Bueno chicos!" - dijo Kurenai mientras miraba a sus pupilos - "Ahora iremos donde Hiruzen-sama para empezar con nuestras misiones y recuerden que estamos una semana atrás de los otro equipos así que tenemos que esforzarnos el doble"
"¡Hai!" - dijeron los integrantes del equipo 8 y rápidamente se dirigieron a la torre Hokage.
Cuando llegaron, le avisaron a la secretaria para que pudiera informarle a Hiruzen que ya habían llegado y luego de esperar unos minutos, escucharon una voz dentro de la oficina diciendo que pasaran.
"Supongo que vienen por su primera misión ¿No?" - dijo el Sandaime con una sonrisa.
"¡Hai, Hiruzen-sama!" - asintió la kunoichi de ojos rojos.
"Hmm~ veamos..." - dijo Hiruzen mientras les entregaba la misión de rango D al equipo 8 - "La primera misión siempre hacen los nuevos escuadrones Genin es capturar a Tora. Se podría decir que capturar al gato demonio y ver el tiempo, es como una iniciación"
"¡Oye Ero Jiji!¿No tienes algo más emocionante?" - Dijo Kurama mientras veía al Hokage.
A Hiruzen empezó a darle un tic en el ojo cuando escuchó como el pelirrojo le decía - "¿Sabes Kurama-kun? Soy el Hokage y como tal deberías tenerme respeto"
"Ero Jiji.." - Kurama lo vio con desdén - "Te conozco bastante bien..."
"Incluso se hasta donde guardas tu colección personal..." - dijo Kurama mientras le giraba los ojos - "Agradece que aun no le digo a Biwako baba sobre donde están porque si no ya te las habría quemado"
Hiruzen al escuchar a Kurama, usó un Shunshin y se transportó a un rincón mientras hacía un circulo con su dedo y murmuraba - "Malditos pelirrojos que no respetan la autoridad..."
Los presentes, al igual que el Anbu Neko que estaba en las sombras, miraron al Sandaime pensando - "¿Y él es el hombre más fuerte de la aldea?"
"¡Ahem! Hiruzen-sama... ¿Podría darnos la misión?" - Dijo Kurenai con una gota de sudor corriendo por su nuca.
El Hokage desapareció y nuevamente estaba en su escritorio - "Aquí tienen, recuerden tienen que volver para dar el tiempo de captura de Tora..."
"Por cierto, el récord actual es el del Equipo Minato con 30 minutos y 50 segundos..." - dijo Hiruzen con una sonrisa - "Buena suerte"
Luego de salir de la oficina, los 3 Genin se separaron a buscar rastros de gato demonio o como los habitantes de Konoha lo conocían, el Ichibi no Bakaneko.
Kurama encontraba esto gracioso porque eran los apodos mezclados de sus dos hermanos.
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Pasaron 10 minutos de búsqueda, cuando por fin pudieron encontrar al dichoso gato. El único problema era que el pequeño y escurridizo felino los esquivaba como si nada o al menos hasta que Kurama se cansara de todo y lo atrapara con facilidad con su Mokuton.
Tardaron 25 minutos 10 segundos.
Cuando entregaron los resultados, los 3 Genin se despidieron de Kurenai y caminaron con destino a la casa del pelirrojo. Kushina los estaba esperando para que le dijeran como terminó su iniciación, ella se sorprendió cuando escucho que ellos tenían el nuevo récord.
"Cuando era joven, nos tomó 45 minutos en capturar a Tora" - Dijo la Uzumaki mientras miraba a los chicos - "Aún sigo preguntándome que le dieron de comer para que viviera tanto..."
Las palabras de Kushina, dejó una pregunta en la mente de los tres jóvenes - "¡¿Qué edad tiene Tora?!"
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Lamento si los capítulos siguientes no tienen sentido en algunas partes, eso es porque estoy revisando y reescribiendo los capítulos porque estoy traduciendo esta historia. Nuevamente les pido perdón por el inconveniente a todas las personas que leen esta historia.