En un territorio muy lejos del Mar Oscuro, una enorme piedra preciosa en forma de rombo estaba ubicada sobre una Estrella del Caos y emanaba fuertes ondas de poder.
—Necesito acercarme. Todavía puedo acercarme un poco más.
Más de cien cultivadores de nivel Mundial se habían reunido encima de esa Estrella del Caos. Sus miradas brillaban mientras miraban la enorme joya con forma de rombo que había sido firmemente plantada en el suelo a lo lejos. Las ondas que emanaban de la joya se transmitían directamente a sus mentes.
—Hay una fortuna kármica frente a mí. Tengo que agarrarla.
—Puedo seguir acercándome.