Ji Ning se sentó con la mano derecha extendida. Un ki elemental nebuloso envolvía el trozo de hielo glaciar antiguo en el cofre de madera. La fría energía del hielo glaciar era absorbida por Ning de manera constante, hasta llegar a su región Zifu. Dentro de la región, el hielo maligno al entrar en contacto con la energía fría, comenzó a absorberla con entusiasmo.
—Maestro —dijo Qingqing dubitativa.
Ning volvió la cabeza para mirarla.
—Maestro, después de usar tu trozo de hielo glaciar antiguo, puedo darte más —dijo Qingqing mientras miraba a Ji Ning—. Te daré otro trozo de seis pies.
Ning al instante se echó a reír. Podía decir que Pequeña Qing era un poco miserable. Mientras la miraba, apareció de pronto la figura de otra mujer en su mente. «Mi hermana mayor, Hoja de Otoño», pensó Ning. «Han pasado más de tres años desde que dejé Montaña Golondrina. Tres años desde la última vez que la vi. Me pregunto cómo estará».