El Señor de la Fortaleza Fan Nuo estaba sentado en el último piso de un rascacielos. De pronto sonó el timbre.
—Adelante —dijo Señor de la Fortaleza Fan Nuo.
¡Hua!
La puerta se abrió automáticamente y entró un hombre con cuatro pezuñas, dos manos y numerosas antenas en el rostro.
—Jefe, este es el balance financiero del año —dijo el hombre entregándole respetuosamente unos documentos.
Personas de otras razas delinearon los documentos. Señor de la Fortaleza Fan Nuo miró los documentos sin prestar demasiada atención. Era una corporación que había establecido disfrazándose de una forma de vida ordinaria en este planeta. A pesar de que sonaba ridículo que un señor del universo de primer nivel haga algo así, él disfrutaba estar cerca de los seres ordinarios del universo. A veces, podía entender mejor las leyes al sentir la competición entre los ordinarios.
—Déjenme —ordenó Señor de la Fortaleza Fan Nuo—. Tendremos una reunión después.