Capítulo 3: CAPITULO 03 "RECORDANDO"

Cuando salí del baño Lucia estaba sentada en una silla junto a la puerta, se había cambiado a su uniforme de sirvienta

- Su alteza, porque no me llamo para ayudar, dijo haciendo un puchero que se veía hermosa

- Lo siento, yo podía solo, dije evitando su mirada, ya te puedes retirar voy a dormirme ya

Pude ver que Lucia queria decir algo mas, pero al siguiente instante la puerta del dormitorio se abrio y entro Sara

- Ya escuchaste la orden de su alteza Lucia, dijo Sara con una mirada seria

- Esta bien, dijo abatida, que descanse su alteza, y salio de la habitacion

- ¿Disfruto su baño?, pregunto Sara

- ¿Eh?, sí, contesta un poco nervioso

- Ya es un poco tarde, descanse su alteza, buenas noches

-Buenas noches Sara

Recordando todo lo que paso en el baño y toda la información que recibió de Sara comencé a fatigarme, deje de pensar en eso y me envolví en la colcha quedando profundamente dormido

***

Como de costumbre la alarma de mi celular sonó a las 5 de la mañana, me levante y camine hacia el baño a lavarme mi cara, regrese a mi habitación me cambie a, mi ropa de trabajo, un pantalón de mezclilla, una camisa de vestir y un chaleco, como era temporada de verano se sentía mucho calor por las mañanas, así que no había necesidad de un suéter espantoso

Como recién me había mudado de casa debido a mi trabajo desayunaba solo, preparaba mi almuerzo, tomaba mis cosas y salía de la casa, encendía mi auto y le mandaba un mensaje a mi madre avisando de que salía rumbo al trabajo, la cual cariñosamente respondía diciéndome que le pusiera ganas en el trabajo y que me fuera bien, ¿Qué en que trabajaba?, yo me había graduado de ingeniero civil, cuando recibí mi título recibió una oferta de trabajo de un ingeniero que me había dado clases y al ver mi desempeño me contrato en su constructora, actualmente llevaba dos años desde que había comenzado a trabajar con él

Yo era el encargado de una carretera que se estaba construyendo, la cual iba a ser una carretera importante

Como siempre llega a la obra, supervisa el avance, y como era fin de semana solo llegaba a pagarle su salario a los trabajadores y al medio día todos regresaban a sus casas, yo por mi parte me quedaba a observar el atardecer en un tramo de la carretera la cual serbia como mirador, ese día recibí un mensaje de un amigo el cual me invitaba a tomar un trago con otros viejos amigos de la universidad con los que se había reencontrado, yo acepto y comencé a conducir hacia la ciudad

Como ya estaba oscureciendo encendí las luces y seguí mi camino, cuando mire por el retrovisor que el chofer del tráiler que venia detrás de mi se quedo dormido y comenzó a acelerar, yo trate de esquivar el tráiler pero no pude ya que en el carril contrario venia otro camión, al momento siguiente sentí como el tráiler me choco y salí de la carretera cayendo en un barraco

***

- Ahh¡¡¡, grite, despertando del sueño, sudando, ¿así que morí y renací?...

Sacándome de mis pensamientos la puerta se abrió de golpe y vi a una Sara asustada

- Su alteza, ¿se encuentra bien?, pregunto angustiada

- Sí, estoy bien, solo fue una pesadilla, conteste

***

- Ahh¡¡¡, grite, despertando del sueño, sudando, ¿así que morí y renací?...

Sacándome de mis pensamientos la puerta se abrió de golpe y vi a una Sara asustada

- Su alteza, ¿ se encuentra bien?, pregunto angustiada

- Sí, estoy bien, solo fue una pesadilla, conteste mientras recargaba mi espalda en la cabecera de la cama

- ¿Quiere que le traiga el desayuno?, pregunto Sara

- Si por favor

- Siga en la cama en un momento vendrá alguien a ayudarle a cambiarse

- Si, gracias

- Por cierto, la princesa Flora pregunto si puede desayunar con usted, ¿Qué le respondo?

- Mmm… dile que si

- Bien, me retiro su alteza

Unos minutos después alguien llamó a la puerta

*Toc toc, - adelante

De la puerta salió una sirvienta muy hermosa, su cabello color negro le llegaba a la mitad de su espalda, ojos rojos un poco afilados, de unos 18 años, una piel blanca, su personalidad era más seria que la de las otras dos, sus pechos eran más pequeños que los de Sara, dándole un encanto juvenil al contrario de Sara y Lucía que eran más sensuales, su moño era de color rojo al igual que el de Sara

- Su alteza, soy Vanessa su segunda sirvienta personal, he venido a ayudarle vestirse

- Bien, gracias Vanessa

Después de que salí de la cama fui al baño a lavarme la cara y a enjuagar mi boca, después regrese a la habitación, sobre la cama estaba una muda de ropa un pantalón de vestir color azul marino, zapatos color café, una camisa color blanco y un chaleco de vestir color azul marino que combinaba con el pantalón, después de vestirme con ayuda de Vanessa me acerque a un espejo de cuerpo completo que estaba en la habitación

- Vaya!, gracias Vanessa, me gusta el la vestimenta

- Me alegro que le guste, dijo Vanessa con una cara de orgullo

Viendo mi apariencia en el espejo debo de agradecerle a mis padres por los grandiosos genes que me heredaron, según mis cálculos mido aproximadamente 1.50,un cabello color blanco con unos mechones color verde agua, ojos verdes, piel blanca, un rostro con rasgos finos, jajaja si que soy hermoso dije riéndome en mis adentros, sacándome de mis pensamientos se abrió la puerta de repente

- Onii-sama¡¡¡

La niña que entro corriendo tenia una hermosa apariencia, su cabello era blanco como la nieve, ojos color verde igual que los míos, un bello rostro, una mirada bastante alegre, de estatura aproximada de 1.30, llevaba un vestido color melón que le permitía moverse libremente, como estaba en pleno desarrollo sus pechos eran un poco más grandes que el tamaño de mis manos

Cuando me vio, corrió hacia mi dándome un abrazo por la espalda, como iva corriendo pude escuchar como trono mi espalda

- Uhhh¡¡¡

- Princesa Flora, por favor controle su fuerza, su alteza aun sigue un poco débil, dijo Vanessa

- Oh¡, si, disculpe Onii-sama, dijo dándome una reverencia muy elegante

- Esta bien, Flora, dije dándole una cálida sonrisa

Al mismo tiempo entro Sara con otras dos sirvientas, el color de su moño era blanco, las cuales ayudaron a Sara a poner la mesa para desayunar, mientras que Vanessa ayudó a sentarse a Flora

Después de terminar de acomodar los platillos, las sirvientas de moño blanco salieron de la habitación mientras que Sara se quedó detrás de mi y Vanessa detrás de Flora

La mesa estaba colocada cerca del balcón, las puertas estaban abiertas por lo que entraba el aire fresco haciendo más agradable el desayuno

Por lo que me pude dar cuenta los alimentos no se diferenciaban mucho de los que conocía en el otro mundo, la sorpresa que me llevé es que aquí habían gallinas, y por lo tanto había huevos, la preparación de los huevos no fue de gran diferencia, eran revueltos con algunos condimentos, acompañados de frijoles… ¿también hay frijoles?, la bebida fue café y jugo de manzana recién exprimido, y de postre fue un pequeño plato de frutas, de las cuales pude reconocer eran sandía, mango, melón y manzana todas cortadas en cubos perfectos

Después de terminar el desayuno hice una breve platica con Flora

- Onii-sama, perdón, dijo con una cara apenada, por mi culpa tuviste que subir al árbol y te caíste

- No te preocupes Flora, no fue tu culpa, fue un descuido de mi parte por perder el equilibrio, no pasa nada, dije tratando de consolarla

- Gracias Onii-sama, respondió con una gran sonrisa

Después de una platica ociosa alguien llamó a la puerta

*toc toc, Sara fue la que se dirigió hacia la puerta, la persona que entró fue un señor de alrededor de unos 60 años, su cabello era color blanco por sus canas al igual que su bigote, media alrededor de 1.90, tenía una postura recta que emanaba un aura de respeto, sus ojos eran color negro y llevaba puesto un traje negro

- Oh, mayordomo

- Buenos días sus altezas, príncipe Edward me presentó, soy el mayordomo principal que acompaña al rey, mi nombre es Caine

- Buenos días, señor Caine

- Su majestad el rey lo ha convocado a su oficina y princesa Flora, sucesora de etiqueta ha llegado, la espera en su estudio, dijo Caine

- Vanessa acompaña a la princesa a sus clases, ordeno

- Si mayordomo, respondió Vanessa

- Príncipe, permitame guiarlo

- Por favor, señor Caine

- Oh, puede llamarme solo Caine

- Bien Caine, llévame

Mientras salíamos llegaron las sirvientas de moño blanco que habían llegado con Sara al principio, y se dispusieron a levantar la mesa del desayuno

- Onii-sama, ¿En la tarde podemos comer juntos?

- Si Flora

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