"Lucharé hasta el último aliento,"se prometió a sí misma mientras se dirigía hacia la superficie, seguida de su guardia de élite. Sabía que esta batalla no era solo por su ciudad, sino por la supervivencia de su raza.
En el buque de guerra, las alarmas comenzaron a sonar de nuevo. Los sistemas de detección habían identificado múltiples fuentes de poder elevándose desde las profundidades. Los oficiales informaron rápidamente al capitán.
"Señor, hemos detectado varias fuentes de nivel 4, y una de nivel 5. Presumiblemente, es el líder de la ciudad."
El capitán frunció el ceño. Sabía lo que significaba enfrentarse a una entidad de ese nivel. Aunque confiaba en el poder de su tripulación y los aventureros, cualquier error podría ser desastroso.
"Prepárense," ordenó con calma. Envíen a nuestras fuerzas de nivel 4 y 5 para interceptarlos. Deben ser detenidos antes de que alcancen el buque."
El choque entre ambos bandos era inminente, y ambos sabían que esta confrontación sería decisiva. Las fuerzas más poderosas de ambos lados se preparaban para desatar su máximo poder en una batalla que determinaría el destino de la ciudad submarina.
El agua del océano vibraba mientras la líder de las sirenas y su guardia de élite ascendían rápidamente hacia la superficie. Sabía que su situación era desesperada. El invasor, con su tecnología avanzada y poderosas criaturas, estaba claramente en ventaja. Sin embargo, ella no podía permitirse caer sin dar batalla. Tenía un solo objetivo en mente: ganar el mayor tiempo posible para que los niños y ancianos de su ciudad pudieran escapar a las profundidades seguras del océano.
"No podremos detenerlos por mucho tiempo," pensaba mientras su mirada se endurecía al recordar las múltiples derrotas que sus guerreros habían sufrido. Los torpedos mágicos y los hechizos lanzados desde el buque de guerra ya habían diezmado las defensas, y la barrera mágica estaba colapsando. Haremos que paguen por cada metro que avancen.
Su guardia, guerreros de nivel 4 la seguian de serca, cada uno sabía lo que estaba en juego. La ciudad dependía de ellos para ganar el tiempo necesario. Nadie hablaba, pero todos compartían la misma determinación. Sus pensamientos estaban alineados con los de su líder: luchar hasta el último aliento.
Al acercarse a la superficie, la líder de las sirenas sintió la presencia del enemigo. Desde su posición, pudo ver la enorme sombra del buque de guerra y las naves voladoras, flotando como predadores sobre el océano. Una figura con una aura poderosa descendía desde el buque principal.
El corazón de la líder de las sirenas dio un vuelco. Sabía que esa figura era su principal adversario. Un guerrero de nivel 5 en etapa media o quizás en la última estimó por su aura. Este es el verdadero peligro,"pensó, ajustando su lanza mágica entre las manos.
Mientras ascendía, sus pensamientos volvían a la ciudad que había jurado proteger. Pensó en los niños, que estaban escapado, en las familias que confiaban en ella para detener esta invasión. "No puedo fallarles," se decía. "Si caemos, al menos debemos asegurar su supervivencia."
Arriba, el guerrero de nivel 5 la observaba mientras descendía a la superficie del agua. Desde su posición en la nave, podía sentir la intensidad del aura de la sirena. Sabía que esta sería una batalla complicada, pero confiaba en sus habilidades y en el equipo que lideraba.
Este guerrero es , un veterano de múltiples batallas en planos mundos y reinos , no sentía compasión por aquellos a quienes derrotaba. Para él, la guerra era un proceso inevitable, una manifestación de la ley del más fuerte. "La fortaleza lo es todo. Si ellos no pueden defender lo que tienen, entonces no lo merecen."
Con un gesto rápido, hizo una señal a sus subordinados, un equipo de aventureros de nivel 4 que ya lo seguía hacia el agua. Su misión era clara: destruir la resistencia en la ciudad submarina y acabar con la líder de las sirenas.
Al llegar al agua, la líder de las sirenas lanzó su primer ataque. Un potente hechizo de agua comprimida, cargado con energía mágica, salió disparado hacia el guerrero. Era un ataque rápido, diseñado para probar las defensas de su enemigo. El guerrero apenas levantó su espada para bloquearlo, y el agua explotó en una nube de vapor cuando hizo contacto con la energía de su arma.
"Eso es todo lo que tienes," dijo el guerrero con desdén, su voz grave resonando por encima del sonido de las olas.
Sin embargo, la líder no se dejó intimidar. Sabía que su enemigo esperaba que se rindiera rápido, pero ella estaba decidida a luchar hasta el final. Con un rápido movimiento, convocó una tormenta de magia acuática a su alrededor, creando remolinos y corrientes que amenazaban con arrastrar a los aventureros hacia las profundidades.
Su guardia de élite la seguía de cerca, lanzando sus propios ataques mágicos y físicos contra los aventureros que acompañaban al guerrero. Las lanzas encantadas atravesaban las aguas con precisión mortal, mientras los hechizos acuáticos estallaban en impactantes explosiones que sacudían el océano.
El guerrero, mientras tanto, no parecía afectado por la tormenta que se desarrollaba a su alrededor. Sus ojos, fríos y calculadores, seguían enfocados en la líder de las sirenas. "Es fuerte," pensaba, reconociendo la habilidad mágica de su oponente. "Pero no lo suficiente."
Con un poderoso barrido de su espada, desató una ráfaga de energía que cortó el agua a su alrededor, disipando los remolinos y bloqueando los hechizos que se acercaban. Las ondas de choque de su ataque sacudieron el océano, forzando a la líder de las sirenas a retroceder unos metros.
"No te subestimes,"dijo la líder, su voz firme a pesar de la presión. "Esta no será una victoria fácil para ti.
Pero en su interior, sabía que no podía derrotarlo. Su única esperanza era ganar tiempo, resistir lo suficiente para que los evacuados pudieran escapar. Mientras luchaba, mantenía su conexión mágica con la ciudad, monitoreando el progreso de la evacuación. Los niños y los ancianos se movían lentamente, pero el tiempo se agotaba.