Este documento contenía una descripción detallada de la habilidad de cultivo llamada Control del Alma, aunque incompleta. Al leerlo, Ian descubrió que la habilidad tenía un riesgo extremadamente alto: un 80% de probabilidad de muerte al intentar cultivarla, debido a la incapacidad del cerebro para soportar la sobrecarga de información.
La habilidad permitía que, al matar a un ser vivo, existiera un 10% de probabilidad de esclavizar su alma, obligándola a obedecer las órdenes del usuario. Sin embargo, si un alma esclava recibía un ataque mortal, se volvería transparente y requeriría de un punto de poder mágico para curarse.
La cantidad de almas que Ian podría controlar al mismo tiempo dependía directamente de su poder mágico. Por cada punto de poder mágico, podía mantener dos almas bajo su control. No obstante, debido a la naturaleza incompleta del experimento, estas almas no podrían mejorar su poder; siempre se mantendrían al nivel en el que estaban al momento de su muerte.
Además, Ian descubrió que si encontraba un alma sin cuerpo, tendría un 20% de probabilidad de capturarla, siempre que no fuera significativamente más fuerte que él. En caso de que el alma fuera más poderosa, podría resistirse y causarle daño.
Una característica adicional de la habilidad era la capacidad de romper el contrato con un alma esclava. Si Ian ya no deseaba mantener bajo su control a una de estas almas, podría deshacer el vínculo, causando que el alma desapareciera por completo.
Ian sabía que esta habilidad, aunque poderosa, era extremadamente peligrosa. A pesar de los riesgos inherentes, la posibilidad de controlar almas y la flexibilidad de liberar aquellas que ya no necesitara lo tentaban a aprenderla.
Ian, intrigado por la habilidad Control del Alma, sabía que aprenderla de manera segura sería un reto. No estaba dispuesto a correr el riesgo de muerte que implicaba cultivarla en su forma incompleta, pero la tentación de obtener un poder tan singular lo llevó a buscar alternativas.
Decidido a encontrar una solución, Ian abrió el sistema y comenzó a explorar la tienda en busca de alguna opción que le permitiera aprender la habilidad sin arriesgar su vida. Después de unos minutos de búsqueda, encontró dos opciones:
1. Aprender la Habilidad Incompleta de Forma Segura: El sistema ofrecía una opción para aprender la habilidad en su estado incompleto, pero asegurando que Ian no moriría en el proceso. Sin embargo, esta opción tenía un costo elevado de 70,000 puntos energéticos. Aunque el precio era considerable, garantizaba que Ian podría dominar la habilidad sin los riesgos mortales asociados.
2. Habilidad Completa y Mejorada: La tienda también ofrecía una versión completa y mejorada de la habilidad Control del Alma, la cual eliminaba las limitaciones de la versión incompleta. Esta versión permitía que las almas esclavas mejoraran y evolucionaran, convirtiéndose en una nueva especie de seres bajo el control de Ian. Sin embargo, el precio de esta versión mejorada era exorbitante: 50 mil millones de puntos energéticos. Para Ian, esta cifra era inimaginable en su situación actual.
Ian meditó sobre las opciones. La primera alternativa era accesible, pero aún requería una gran cantidad de puntos. La segunda opción, aunque ideal, estaba completamente fuera de su alcance por el momento. Sabía que, si quería sobrevivir en este mundo y convertirse en un verdadero guerrero, tendría que empezar por algún lado, y el control de almas podría ser una herramienta poderosa en su arsenal.
Con la decisión tomada, Ian sabía que tendría que trabajar arduamente para reunir los puntos necesarios si quería aprender la habilidad de forma segura. Sus próximos pasos serían cruciales para determinar si lograría dominar esta peligrosa pero tentadora habilidad.
Ian se encontraba en un dilema. Había descubierto la existencia de una habilidad poderosa, pero el riesgo de cultivarla en su estado incompleto era demasiado alto. Además, había aprendido lo suficiente sobre el Imperio Zork y el entorno en el que se encontraba como para saber que el peligro no venía solo de las criaturas del bosque o los robots oxidados, sino también de los seres inteligentes que podrían estar buscándolo.
Antes de marcharse, Ian decidió investigar más sobre el Imperio Zork y su conexión con el lugar en el que se encontraba. Usando la tecnología deteriorada, logró acceder a archivos que le revelaron información sorprendente. Descubrió que el Imperio Zork controlaba toda una galaxia y estaba compuesto por seres similares a los humanos. Sin embargo, no eran los únicos habitantes; había millones de otras razas, incluyendo demonios, vampiros, enanos, dragones, gigantes, elfos, y muchas más. Esta diversidad lo dejó atónito, pero lo que más lo sorprendió fue la revelación de que todos estos mundos estaban conectados al lugar en el que él estaba, conocido como el Infierno Multiversal.
Este infierno no era solo un lugar de castigo o prueba, sino un campo de batalla en el que múltiples facciones luchaban constantemente por los recursos. Los nativos del infierno querían obtener recursos de fuera, mientras que los seres de otros universos deseaban colonizar este lugar para explotar sus riquezas. Sin embargo, ninguna de las facciones estaba unida; al contrario, se enfrentaban entre sí en una lucha sin cuartel por la supremacía.
Ian, comprendiendo la gravedad de la situación, sabía que no podía quedarse mucho tiempo más en ese lugar. El riesgo de ser descubierto por los nativos o por alguna facción del Imperio Zork era demasiado alto, especialmente sin el poder necesario para defenderse. Decidió que debía irse y regresar cuando tuviera los puntos suficientes para aprender la habilidad de Control del Alma de manera segura.
Pero antes de partir, quería entender más sobre este Imperio y su posición en la galaxia. Accediendo a la información que había encontrado, supo que el Imperio Zork estaba en constante conflicto, tanto con otras razas como entre sus propios miembros. Era una guerra total por los recursos, y la teoría del bosque oscuro prevalecía: todos los seres vivientes eran considerados una amenaza potencial, y la única forma de asegurar la supervivencia era eliminar a los demás antes de ser eliminados.
Con toda esta información en mente, Ian se preparó para dejar la base experimental, sabiendo que este lugar guardaba muchos secretos peligrosos. Tendría que regresar algún día, pero solo cuando estuviera seguro de que podía manejar el poder que se escondía en sus profundidades y enfrentar los desafíos que el Imperio Zork y otros seres le pudieran presentar.
Ian, tras haber acumulado toda la información que pudo y haberse enfrentado a los desafíos de la torre y sus defensores, sabía que su próxima etapa debía ser meticulosamente planificada. La información que descubrió sobre el Imperio Zork y el Infierno Multiversal lo había dejado con un sentimiento de urgencia y la necesidad de prepararse adecuadamente para el futuro.
Regreso a la Cueva
Volvió a la cueva que había convertido en su refugio. Sabía que debía salir del bosque para evitar ser detectado por las criaturas del área o los posibles guardianes del Imperio Zork que pudieran estar buscando intrusos. Su primer objetivo era consolidar los puntos que había ganado y prepararse para futuras incursiones. A lo largo de su estancia en la cueva, se dedicó a organizar sus recursos y a preparar su próximo movimiento.
Planificación para el Futuro
1. Ahorro de Puntos: Ian decidió que, para avanzar en sus habilidades y prepararse para enfrentar futuros desafíos, debía ahorrar puntos energéticos. Su prioridad era reunir los 70,000 puntos necesarios para aprender la habilidad de Control del Alma de manera segura, sin el riesgo de morir debido a la inestabilidad del conocimiento incompleto. Sabía que esto requeriría tiempo y esfuerzo, pero estaba decidido a alcanzarlo.
2. Entrenamiento: Mientras esperaba acumular los puntos necesarios, Ian se enfocó en el entrenamiento. Aprovechó el tiempo en la cueva para practicar con su manual de Fuerza Básica, aumentando su fuerza gradualmente. Esta habilidad era fundamental para enfrentar enemigos más poderosos en el futuro, y cada punto de mejora era crucial para su supervivencia.
3. Exploración del Bosque: Planeó volver al bosque para continuar su exploración y recolección de recursos. Esta vez, estaba más preparado para enfrentarse a los peligros que pudiera encontrar. Ian sabía que cada caza y cada recurso recolectado eran esenciales para acumular puntos y fortalecer sus habilidades.
4. Investigación sobre el Imperio Zork: Aunque no podía obtener más información detallada en ese momento, Ian decidió que necesitaría aprender más sobre el Imperio Zork, sus estructuras de poder y sus posibles aliados o enemigos. Esto le permitiría tomar decisiones más informadas en futuras incursiones y prepararse mejor para las posibles amenazas.
Con estos planes establecidos y una estrategia clara en mente, Ian se enfocó en sus objetivos inmediatos, listo para enfrentar los desafíos que le esperaban en su camino hacia el dominio y la supervivencia en el Infierno Multiversal y más allá.