Theodore sacudió la cabeza y se rió al ver su apariencia ansiosa.
—Cuando quisiste dejar el 'inframundo' aquel año, la persona a la que no podías soltar era a tu esposo Timothy, ¿verdad?
Aunque ella nunca habló de su vida amorosa con él en aquel tiempo, ocasionalmente se sentaba en la azotea y miraba fijamente en la misma dirección durante mucho tiempo.
La dirección en la que miraba no era otra que la de la Ciudad Capital.
Era difícil para una persona ocultar su anhelo por algo o alguien, por más que lo intentara. Una persona como Theodore sería aún más capaz de notarlo.
Samantha se quedó atónita por un momento y asintió. —Sí.
No era una mentira, porque ella había amado a Timothy en aquel entonces.
Theodore la miró atentamente y su mirada se volvió algo más aguda. —¿Y ahora?
—¿Qué? —Samantha no pudo reaccionar a tiempo cuando él le preguntó eso de repente.
Theodore repitió su pregunta. —¿Y ahora? ¿Todavía estás enamorada de tu esposo Timothy?