** Eli **
—Ella giraba su lengua lentamente alrededor de él, y el sabor de él era incluso más intenso de lo que recordaba. Fresco como especias cálidas, mezclado con un toque de dulzura almizclada. Igual que su beso.
Los músculos de sus muslos se tensaron, su respiración se volvió entrecortada. La parte racional de ella se preguntaba si debería parar antes de que este acto realmente se convirtiera en algo peligroso, pero la otra parte de ella, que palpitaba y dolía y ardía al sentirlo en su boca, desechó esa opción sin pensarlo dos veces. Quería desenmarañarlo. Quería oír ese gemido incontrolable, ver esos ojos apretados en éxtasis. Y quería saborear la parte de él que nunca antes había saboreado.
Así que lo tomó tan profundo como pudo, hasta el fondo de su garganta.
…
Eli dejó su teléfono en el escritorio y se pasó una mano por la cara. —Joder. ¿Quién en su sano juicio pensaría que es una buena idea leer el último capítulo de Harper mientras aún está en el trabajo?