Cuando Bai Shanshan fue llevada a su asiento por Chu Cimo, se sintió sorprendida y conmovida.
Le gustaba Chu Cimo.
Había empezado a gustarle desde la secundaria porque era deslumbrante.
Chu Cimo era absolutamente sobresaliente en apariencia, más guapo que las estrellas. Siendo un muchacho en pleno estirón, era algo delgado, y ella le prestaba mucha atención.
También notó que Chu Cimo siempre parecía un poco nervioso cuando tomaba el ascensor.
Aunque parecía indiferente, Bai Shanshan descubrió más tarde que esto era claustrofobia.
Recordó una vez, hubo un evento nocturno en la escuela, y Chu Cimo se quedó dormido mientras lo veía. Después de que terminó el evento, todos se fueron uno por uno.
Pero Chu Cimo nunca apareció.
En ese momento, sospechó que Chu Cimo había quedado encerrado en el auditorio ya que lo vio quedarse dormido.
Pensando en su claustrofobia...