—¿Qué está pasando? —Este pequeño mocoso es solo un Rey Marcial de Nivel 4. No importa cuán talentoso sea, no puede representar una amenaza para mí. ¿Cómo puede hacer que me sienta amenazado? ¿Podría ser que tiene algún tipo de tesoro consigo?
La mente del maestro del Palacio del Trueno giró rápidamente, y sus ojos se volvieron vigilantes.
—Este pequeño mocoso debe ser asesinado hoy. Su talento es demasiado asombroso. Si esto continúa, me temo que seré yo quien muera la próxima vez que nos encontremos.
Los ojos del maestro del Palacio del Trueno se volvieron fríos, y estaba a punto de hacer su movimiento.
¡Rugido!
¡Rugido!
En ese momento, dos rugidos que sacudían la tierra sonaron, y la tierra tembló violentamente.
Una presión como la de un océano de repente se apretó hacia abajo.
—¿Qué está pasando? —La expresión del maestro del Palacio del Trueno cambió drásticamente.
—Esto no es bueno. —El corazón de Lu Ming tembló.
¡BOOM!