Capítulo 444: Sendero del Cocinero

Rain había imaginado que algunas de las sirenas de la Gente del Mar poseían un talento intrigante: la habilidad de inducir un estado de lavado de cerebro en sus objetivos a través del encanto seductor de sus voces. Sin embargo, esta habilidad presentaba ciertos desafíos cuando se utilizaba en combate. 

El efecto de sus voces tenía un alcance relativamente corto, lo que obligaba a que las sirenas se aventuraran peligrosamente cerca de sus sujetos intencionados. Esta proximidad las ponía en riesgo.

Mientras empleaban sus voces cautivadoras, las sirenas eran incapaces de realizar cualquier otra acción relacionada con el combate. Esto significaba que no podían atacar, defender o proporcionar apoyo alternativo a sus aliados. Este enfoque unidireccional las hacía vulnerables durante el proceso; tampoco podían moverse.