—Lily miró por la ventana del helicóptero y sintió cómo se le cortaba la respiración... La vista era impresionante, tanto increíblemente hermosa como peligrosamente intimidante al mismo tiempo. Tragó saliva, sus dedos agarrando los reposabrazos con fuerza mientras el helicóptero se sacudía de repente, más violentamente que antes. La voz tranquila del capitán crepitó en su oído a través del auricular —No te preocupes, Miss Lily. Te dejaremos en breve. Este es nuestro último viaje de ida y vuelta por la temporada. El viento es bastante fuerte aquí arriba, por eso esta pequeña bestia se está sacudiendo tanto…