```
El aire estaba cargado de anticipación mientras Demetri se quedaba al final del pasillo, con el corazón acelerado. Por primera vez en su vida, se sentía nervioso, aunque no tenía idea de por qué. Sus ojos iban una y otra vez hacia las puertas cerradas, preguntándose cuánto tardaría hasta poder verla caminando hacia él. Solo entonces su corazón se calmaría.
Detrás de Demetri, sus padrinos de boda—Ian, Erasmi, Seb, Lucien y Gabe—se agrupaban, inmersos en una animada discusión. Su tema de elección: planes de contingencia para su potencial fuga o, más humorísticamente, lo que harían si Nora decidiera escaparse. Demetri luchaba por contener las ganas de rodar los ojos ante sus payasadas. Como si Nora, considerara alguna vez tal cosa.