—¿Qué coño está tratando de hacer? ¿Qué estoy escuchando? —gritó el maestro de la torre mágica tan pronto como entró en mi tienda. Su cabello castaño estaba tan desordenado como siempre y sus ojos plateados brillaban con pura ira—. Primero, no sabemos dónde está Demetrio y ahora escucho rumores de que la Reina ha convocado literalmente a un maldito dragón que respira tierra y que ha cortado a una mujer en varios pedazos.
—El dragón exhala humo negro y la mujer era una asesina —corregí—. Azul es capaz de hacer ambas cosas y el rumor no es incorrecto. De hecho, ella acaba de anunciar su poder. Oí que los caballeros bajo el duque han jurado lealtad al mando de la Reina. Ella quiere liderar en la guerra.
—Ella está embarazada y tiene un brazo fracturado gracias a alguien en particular —murmuró, mirándome.