Ana asintió. —Él es el Señor del territorio más grande del reino, una zona crucial que conecta con Hatha, Thevailes y partes de la frontera de Abetha. Todas las relaciones comerciales con Hatha y Thevailes se mantienen a través del Marqués Mortimer. Además, tiene su propio poder militar fuerte que ha creado bajo la apariencia de proteger las fronteras con los tres reinos. Se dice que por esto, el Rey Ailwin tampoco le disgusta.
—Si algo le disgusta, siempre hay miedo de que se ponga del lado de Thevailes y Hatha —comentó Oriana—. Junto con su propio poder y los otros dos reinos, puede crear grandes problemas para Griven. En resumen, es una bomba de tiempo, una gran amenaza potencial y el Rey Ailwin debe tratar con él con cuidado.
—Sí, Su Alteza.
—¿No debería eliminarse esta amenaza por completo desde la raíz? —reflexionó Oriana, pensando en Arlan—. Él tenía poderes sobrenaturales y podía hacer lo que quisiera, así que ¿por qué tolerar tales problemas?