"Trinidad
Corrí. Corrí y corrí con todas mis fuerzas. Esa risa, esa voz, todo me estaba afectando. No pude evitarlo. Había algo en ello que me estaba asustando. A lo mejor estaba en lo cierto, a lo mejor no, pero sea lo que sea, estaba llegando al punto donde no podía soportarlo más.
Cada paso que daba, cada vez que mi pie encontraba el suelo de esta habitación oscura, podía ver cómo la luz crecía más grande a la distancia.
—Oh, gracias a la Diosa. Al menos estoy avanzando. Al menos puedo decir que me estoy acercando. Esto no parece ser uno de esos efectos de casa de diversiones, o casa de terror. Eso es algo bueno.
¿Por qué seguía hablando conmigo misma? ¿Era para ahogar el sonido de la voz dentro de mi cabeza? No sabía si esa era la razón real o no, pero a mí me parecía una buena idea. Así que, iba a seguir hablando. Iba a hacer lo que fuera necesario para que no me volviera oficialmente loca.