Capítulo 60: 60) Máquina vs Kung Fu
Dentro de las barracas, un grupo de 7 estaba comiendo, las cinco furiosas y los dos humanos; bueno, había alguien que no estaba comiendo, a pesar de la insistencia de sus amigos.
Viper: Vamos, Mantis, tienes que comer algo.
Mantis: No puedo. Mi estómago se siente como si hubiera estado bebiendo de la copa del desamor y la tristeza -dijo completamente abatida, ignorando a todos, incluida Po, que acababa de entrar.
Po: ¿Probaste echarle sal? -sugirió completamente ajena a la situación.
Crane: No es eso. La novia de Mantis la dejó y ahora ella no quiere comer -explicó.
Mantis: Era la oruga más hermosa que jamás hayas visto, y un día, puff, se convierte en mariposa. Ahora es como si ni siquiera la conociera -suspiró melancólica.
Tigresa: Los enredos románticos alteran el chi, por eso los evito.
Monkey: Sí, esa es la razón -comentó algo sarcástica- Por lo menos tendrás a Riuz si todo lo demás falla -siguió, haciendo que Tigresa se congelara en el lugar, luego pareció pensarlo y finalmente negarlo con fuerza.
Riuz: Todo va a estar bien, Mantis -la consoló dándole palmaditas con sus dedos en la espalda- Quizás esto sea una señal, puede que sea momento de un cambio... quizás sea momento de probar cosas nuevas... como los chicos... ¿Por qué luego del entrenamiento no te llevo al pueblo a divertirte para que te olvides de esa tonta MUJER que te rompió el corazón?
Viper: ¡Riuz! -Se quejó.
Riuz: ¡¿Qué?! Solo trato de ayudar a una amiga en un momento difícil -se excusó como si no estuviera haciendo nada malo.
Mantis: Tú solo quieres aprovecharte de mi frágil y caótico estado emocional para conquistarme -dijo aún apática, casi como si no le importara.
Riuz: Y de ser así... ¿estaríamos funcionando? -preguntó tontamente, ganándose miradas insultantes pero también un poco divertidas. Algunas de las chicas aquí no sabían si todo esto era algo serio o solo para tratar de animar a Mantis; respecto a estas cosas, con Riuz nunca se sabía bien.
Po: ¿Sabes lo que te animará? El plato perfecto para calmar tu pequeñito corazoncito rotito.
Mantis: ¿Por qué estás hablando así?
Po: Porque es adorable... solo espera y verás -dijo mientras corría hacia una esquina y tomaba cosas de los estantes más altos con acrobacias innecesarias- Necesito unos cuantos dumplings, una gran porción de miel, un poco de salsa de ciruela extra pegajosa y, por último... un poco de mi ingrediente supersecreto.
Crane: ¿No es eso con lo que reparamos las paredes?
Po: ... ¿Y qué? Ahora reparará su corazón roto. Solo tenemos que revolverlo un poco y... listo. Los famosos Dumplings superpegajosos de Po... -pronunció con orgullo, pero en ese momento se escuchó la voz de su maestra que había entrado sin que la notara.
Shifu: Es hora de entrenar -anunció a sus discípulos y luego se volteó.
Mantis: Gracias por intentarlo, Po.
Todos se levantaron y salieron para seguir a su maestra al salón de entrenamiento, aunque Po tenía una expresión amarga porque aún no había podido comer nada. Por eso mismo, rápidamente usó sus palillos para tomar uno de los dumplings y llevarlo a la boca, pero en ese momento...
Shifu: ¡PANDA! -gritó desde fuera llamándola al ver que no iba con ellos.
El dumpling terminó pegado en su nariz debido a la sorpresa, y tuvo problemas para retirarlo, pero lo consiguió. Antes de que volvieran a gritarle, tomó camino al salón de entrenamiento, pero luego de solo unos pasos, volvió por el tazón de dumplings y se los llevó con ella.
Ya en el salón de entrenamiento, Shifu dio órdenes de comenzar. Primero ingresaron los dos humanos, luego las cinco tomaron sus posiciones e iniciaron, cada uno en la sección que correspondía. Fue una práctica sencilla, un entrenamiento rutinario, pero no por eso hubo menos esfuerzo.
Luego de terminar, volvieron a sus posiciones iniciales, pero Mantis siguió decayendo en ánimo. Para finalizar, estaría la guerrera dragón, pero un fuerte sonido de alguien masticando los desconcentró a todos.
La vista de Po comiendo no era la más adecuada para esta situación, en especial porque sus modales para comer dejaban... eran horribles. Shifu la reprendió por comer en el salón cuando está prohibido, pero Po no parecía muy de acuerdo. Shifu los dejó irse luego de suspirar, pero detuvo a Po para darle una 'misión especial'.
Teniendo tiempo libre, Riuz fue con Moony a su habitación, donde se le mostraron los resultados de sus prácticas con los venenos. Sin que nadie los viera, fueron al dominio de Riuz y junto a Scorpion contemplaron cómo la pequeña Moony había progresado, logrando crear varios tónicos y venenos sencillos pero muy variados y útiles. Riuz felicitó a su hermana y preguntó sobre cada uno de estos líquidos y polvos con curiosidad, mientras que ella respondía feliz a su padre.
...
Luego de una extraordinaria situación, llena de accidentes y una búsqueda de soluciones repentina y poco segura, ahora Po caminaba con sigilo cargando una enorme caja de madera tratando de no ser vista.
Al mismo tiempo, Riuz también salió de las barracas cargando una bolsa reforzada y hermética en sus manos con mucho cuidado, tratando de ser igualmente sigiloso.
Tanto la panda como el humano terminaron viéndose, poniéndolos nerviosos, caminando de forma antinatural hacia el otro hasta ponerse de frente, Po soltando la caja y Riuz escondiendo la bolsa en un costado.
Riuz: Hola, Po...
Po: Riuz.
Riuz: ¿Qué es esa caja? -preguntó con curiosidad.
Po: Eh... Esponjas, para limpiar el salón de entrenamiento. ¿Qué hay con esa bolsa?
Riuz: Eh... maquillaje... para maquillarme -respondió, haciendo que la panda estuviera aún más curiosa.
Po: ...
Riuz: ...
Po: ...
Riuz: La cagaste con el salón de entrenamientos, ¿Verdad?
Po: ¡¿Qué?! ¡No! ¿Por qué dices eso? jeje -Rió nerviosamente.
Riuz: Porque llevas una caja con esponjas... bastante pesada al parecer. ¿Lo arruinaste y estás tratando de solucionarlo por tus propios medios de una forma muy poco ortodoxa y peligrosa?
Po: ¡Nooooo!? -Respondió insegura, pero luego se puso a la defensiva- Y tú, ¿por qué llevas maquillaje? Seguramente estás planeando hacer algo malo que... que... tú sabes.
Riuz: Noooo... solo... eh... voy a tratar de hacer feliz a Mantis... ¿ok? -También se puso tenso-... Sabes qué, yo no te vi y no le digo nada a Shifu y tú no me viste y no le dices nada a nadie.
Hubo un momento de silencio entre ambos, y, sin responderse, cada uno tomó lo que llevaba y continuaron sus caminos, tratando de que nadie más los viera.
Po terminó llevando la caja al salón de entrenamiento que había destruido, mientras que Riuz llevó su "maquillaje" en busca de su objetivo, aunque como no sabía dónde buscar, siguió vagando por el Palacio de Jade.
Al poco tiempo, Po salió corriendo del salón de entrenamiento y entró al Palacio. Luego, salió corriendo con una gran esfera de jade con dragones tallados pasando por detrás de Mono, quien estaba haciendo pull-ups con una barra de bambú, pero desgraciadamente tropezó sobre uno de los equipos de entrenamiento, pero por suerte, su gran trasero tapaba la esfera de jade.
Monkey: ¿Qué estás haciendo?
PO: Uh..., ¿qué estás haciendo tú? -respondió agresiva para librarse de la situación- Quiero decir, deja de mirarme el trasero, soy sensible al respecto.
Voz a lo lejos: ¡Tendrás que obligarme!
La voz de Riuz se escuchó desde detrás de los muros del patio, claramente cargada de excitación por ver las enormes nalgas de la panda que parecían querer liberarse de su humilde vestimenta repetidamente remendada.
Tanto Monkey como Po miraron en dirección a la voz, pero no vieron más que el borrón de una figura que había vuelto a esconderse. Monkey volvió su mirada hacia Po, pero esta también había desaparecido, por lo que solo se encogió de hombros y siguió con su entrenamiento.
Logrando llevar la esfera al salón de entrenamiento, salió para bloquear la puerta para evitar que nadie entrara, pero para su desgracia, vio que Mantis se acercaba.
Po: ¡Mantis! Eh, ¿qué estás haciendo?
Mantis: Ahogando mis penas en un buen entrenamiento -Suspiró.
Po: Oh, esa es una idea terrible. Ya sabes, lo que deberías hacer es hablar de ello... como en cualquier otro lugar y no aquí. -Tomó a su compañera y se alejó del salón de entrenamiento.
Mantis: Extraño mucho a mi novia -Le contó a Po- Todo lo que miro me recuerda a ella, como esa roca o esa mariposa -Se lamentó señalando las cosas que veía.
Po: En realidad esa es ella -reveló al prestar atención a la apariencia familiar de la insecto que pasaba por allí.
Mariposa: Sólo vine por mis cosas -Dijo indiferente a la pobre Mantis.
Mantis: ¿Cuándo terminará? ¡Este dolor! -Lloró con angustia.
Po ignoró el crujir del corazón de la insecto al ver a Tigresa dirigiéndose al salón de entrenamiento, así como también ignoró a la borrosa figura que se movía rápidamente hacia la mariposa, arrojándole un puñado de un polvo verde y luego encerrándola en una pequeña urna para luego desaparecer. La panda acabó saltando sobre Tigresa para detenerla, terminando encima de ella.
Tigresa: ¡Quítate de encima! ¿Qué estás haciendo? -Se quejó, tener a Po sentada en la espalda no es nada agradable.
Po: Esto es mejor que entrenar en alguna máquina. Siente cómo trabaja -Intentó desviar la atención.
Tigresa: Voy a entrar. -Librándose del terrible peso de su espalda, no se dejó detener por Po y se dirigió hacia el salón de entrenamiento.
Po: ¿En serio? -Sin más opciones, sacó una carta oculta- Pensé que estarías buscando a Riuz.
Tigresa: ¿Por qué demonios lo estaría buscando? -Se puso agresiva de repente.
Po: Porque la otra vez escuché a escondidas que le mencionó a Moony que esperaba poder robar tu ropa interior cuando no estés.
Tigresa: Ja, no tiene el valor -Resopló, pero una intención asesina era visible en sus ojos.
Po: Pues no hace mucho vi cómo salía de los cuartos cargando una bolsa de una forma muy sospechosa.
Tigresa: ... -Se quedó parada de brazos cruzados mirando a Po un rato, para luego de unos segundos salió corriendo a cuatro patas soltando un rugido aterrado. No importaba si lo creía o no, pero la idea ya estaba allí y si era verdad, un nuevo cadáver adornaría el palacio.
Po: *suspiro de alivio*
...
En otro lado, mejor dicho, en otro mundo pequeño.
Riuz: ¿Está bien?
Mariposa: Bahh ghhhh uuuuhhhh -Sonidos poco entendibles salían de la mariposa recostada sobre la mesa de piedra.
Scorpion: Aunque Moony todavía es una principiante en la elaboración de venenos, probé su producto y no debería haber problemas. La dificultad para hablar es solo debido a las secuelas de la parálisis muscular, estará bien con el tiempo. Ya debería estar lo suficientemente sobria, aunque no pueda moverse o hablar con libertad, aún es consciente de su alrededor, en su mayoría...
Riuz: Eso es bueno, los experimentos no servirían si no está consciente.
Moony: ¿En serio vas a usarla? Si te descubren no tendrás problemas, puedes seguir intentando con mis hermanas -preguntó preocupada de que los sueños de su padre no logren cumplirse gracias a esta acción.
Riuz: ella se lo merece, por jugar con el corazón de la pequeña mantis, y por tenerla antes que yo. Además, aunque las pruebas con las minilunas pueden quitarnos algunos riesgos, no funcionan del todo bien... ellas ya son completamente leales y me adoran, necesitamos probarlo en alguien neutral o mejor, en este caso, que me odie. Debemos descubrir cuáles son los límites de este espacio.
Scorpion: Podríamos haber tomado algunas personas de pequeños pueblos si así fuera, esta sola mariposa no necesariamente será suficiente. -Comentó mientras realizaba anotaciones en un pergamino, tomando nota de los detalles del sujeto de experimentación.
Riuz: Tampoco quiero volverme un completo villano. No secuestraré personas inocentes si no es necesario. Comencemos con ella y en el futuro quizás traiga algunas más... China no está exenta de malas mujeres. Te la encargo, escorpión, prueba todas las formas que se te ocurran... pero no la rompas, tiene que funcionar, de otra forma no podré desquitarme con ella tanto como quiera.
Scorpion: Haré lo mejor que pueda. El que no funcione si se ve influenciada por un factor externo nos limita mucho, pero tengo algunas ideas... quiero probar que tan duras son las reglas de este mundo.
Riuz: Bien, Moony, ve si necesita ayuda y luego vuelve. Me adelantaré y veré cómo están las chicas, además quizás tenga una oportunidad con mantis en su estado actual.
...
En el Palacio de Jade, una gran maquinaria formada por los elementos del salón de entrenamiento estaba enfrentándose a los maestros del palacio... menos Po que fue alejada por sus errores.
Aunque en un principio los maestros iban ganando, la maquinaria empezaba a tomar ventaja. En ese momento Riuz apareció por la puerta, poniendo instantáneamente una expresión de confusión ante lo que veía.
Shifu: ¿Dónde estabas? -Le reprendió
Riuz: Salí... por algunas cosas... -Respondió, ya tomando posición junto a sus compañeras para hacerle frente a la máquina de guerra.
Tigresa: Más te vale que no hayas estado en mi habitación...
Riuz: No... -Negó confundido- ¿Qué pasó?
Mantis: Po... -gimió tratando de salir de debajo de una bola de pinchos que la había aplastado.
Riuz: Ohhh... -asintió comprensiblemente- Sabía que no eran esponjas.
Riuz se unió al combate, aunque eso no cambió mucho. Dentro de todos los presentes, Riuz tenía el índice de daño más bajo; sus fortalezas estaban en la versatilidad de sus poderes, los cuales hasta el momento actual no estaban adecuados para hacer frente a seres no biológicos.
Riuz: ¿Quién es la linda jabalí? -preguntó viendo a la hembra de la cabina de la máquina mientras esquivaba una red, la cual golpeó a una de sus compañeras.
Taotie: Ves, hija, hasta los alumnos de Shifu reconocen mi superioridad, aunque lo demuestra de una forma extraña.
Bian Hua: Aburrido... -Respondió la apática adolescente.
Riuz: Me refería a ella.
Shifu: ¡Humano! -Regañó a su alumno.
Taotai: Bueno, un cumplido es un cumplido, pero aun así todos morirán para que pueda demostrar que el Kung fu ha muerto y la era de las máquinas ha comenzado.
La lucha prosiguió y Riuz también terminó perjudicado, atado con una cadena metálica contra la pared, pero mientras otros luchaban, trató de usar su habilidad de cambio de forma para liberarse. Shifu tuvo que unirse a la batalla, pero quizás por su inexperiencia en la lucha con creaciones mecánicas como esta, ella también comenzó a perder.
Por suerte para los presentes, Po llegó con una idea para enmendar este asunto, usar lo mismo que usó para destruir el salón de entrenamiento para destruir esa máquina.
Demostró una vez más por qué era la guerrera dragón, esquivando los ataques mientras intentaba acercarse, en especial una cuchilla rodante que pasó entre sus piernas, amenazándola con profundizar su raja. Esa imagen hizo que el humano encadenado contra la pared tuviera una increíble erección, pero por suerte, nadie lo estaba mirando.
Riuz: Quiero ser esa cuchilla -murmuró
Mientras el humano se liberaba e iba a ayudar a sus compañeras, Po logró su cometido usando sus dumplings ultrapegajosos para dañar el sistema interno de la maquinaria.
Taotie no pensó que su creación podría terminar así, pues los problemas en sus engranajes causaron que toda la estructura se desarmara quedando junto a su hija en medio de trozos de madera y hierro.
Po: Ustedes quieren venir y probar suerte mano a mano, sin esconderse detrás de sus máquinas -Habiendo ganado, sonrió con confianza.
Taotie:... En realidad no. -Aunque hizo una pausa como si en realidad fuera a pelear, no lo hizo porque sabía que sin sus inventos no había forma de ganar a cualquiera aquí, por lo que sujetó a su hija y usó su espada de bambú con cuchillas para irse volando- Algún día regresaremos al palacio, y entonces verás el asombroso poder de mis inventos y...
Cuchillas voladoras: *Chak* *chak* *chak*
Taotie: ¿Qué? ¿Engrasaste estas cuchillas como te pedí? -Le preguntó a su hija.
Bian Hua: Las cuchillas son estúpidas.
Taotie y Bian Hua: ¡AHHHHHH...! -Gritaron mientras caían al lejano suelo y luego posiblemente rodarían por la alta montaña.
Po: ¡Se están escapando! -Comenzó a correr hacia ellos.
Riuz: Yo voy por la chica. -Dijo con emoción siguiendo a Po.
Shifu: Alto -Exclamó- Déjenlos ir; les enviaremos la factura.
Ambos se detuvieron, aunque Riuz tenía una mirada insatisfecha en su rostro. Po se quedó hablando con Shifu mientras que Riuz se dirigió a ayudar a sus compañeras, pero antes de eso fue detenido una vez más.
Shifu: Humano.
Riuz: Sí, maestra.
Shifu: La esfera de jade. -Solicitó extendiendo su mano.
Riuz: ¿Esfera de jade? -Preguntó con confusión.
Shifu: Humano... -Insistió otra vez con una mirada profunda.
Riuz: Bien... -Se quejó otra vez con insatisfacción mientras sacaba de algún lugar la esfera gigante de jade y se la daba a su maestro antes de irse pateando el suelo.
...
Por la noche en la cocina, Moony estaba sirviendo la comida a tres de las cinco y a su hermano. En ese momento se escucharon lentos pero pesados pasos que se dirigían allí, para luego ver a Po entrar arrastrando su cuerpo hasta la silla y dejando caer su cabeza sobre la mesa con la lengua fuera.
Crane: ¿Trabajo difícil? -Se rió de la guerrera dragón.
Po: Sí... no solo tuve que limpiar sino que tuve que ayudar a Shifu a reparar el salón de entrenamiento. --Contó mientras tomaba el plato de sopa que le trajo Moony y se lo bebía de un sorbo.
Mono: Eso te enseñará a no traer enemigos mortales dentro del palacio.
Viper: Sí, al menos podrías avisar cuando vayas a colar a criminales al palacio -Se rió.
Po miró la burla de sus compañeras y en parte se le contagió esa actitud alegre, pero prestando más atención notó que había algunos detalles en la sala. No se veía ni a Tigresa ni a Mantis; no estaban aquí. Y Riuz también tenía su cara contra la mesa como ella, pero en vez de por agotamiento, parecía más deprimido, además de un ojo morado.
Po: ¿Y Tigresa y Mantis?
Crane: Mantis salió con su nueva novia.
Viper: Y Tigresa dijo que estaría poniendo más seguridad a algunas de sus cosas personales.
Po: ¿Y Riuz...? Preguntó mirando al humano que parecía a punto de llorar y sin la más mínima gana de hablar.
Viper: Pues...
Riuz: Tigresa me golpeó porque tenía la extraña idea de que había robado su ropa interior... lo cual no se me había ocurrido hasta que ella misma lo mencionó... y fui yo quien llevó a Mantis a pasear por el pueblo y a ese bar para que pasemos un rato juntos, el bar donde terminó conociendo a esa maldita polilla que se me adelantó. Hoy es un día de mierda, solo una de todas las cosas que hice hoy salieron bien... Hizo un puchero mientras amenazaba con llorar.
Hubo risas en la cocina durante la noche mientras se trataba de consolar a Riuz, al mismo tiempo que se reían de su desgracia.
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Sé que poner más excusas no sirve, es más, cada vez que lo hago me siento como la peor basura que existe. Solo diré que este último tramo del año parece mucho más difícil que varios años anteriores juntos.
Resumen breve: 1 familiar herido, 2 familiares muertos, 1 en prisión... (PD1: No son miembros del núcleo principal de mi familia, pero tampoco tan lejanos como para no afectar nuestra vida cotidiana) (PD2: Hay algunas otras cosas que han ocurrido, pero mencionarlas requeriría más explicaciones de las que no quiero dar).
Me mudaré a otra ciudad y empezaré una nueva vida a finales de este año, y parece que hay una especie de fuerza cósmica poniendo a prueba a mi familia, porque no es normal que ocurran cosas de esta magnitud cada semana... literalmente, cada semana sucede algo.
Lamento no haber continuado esto en estos meses. Seguí con la otra historia porque ya tenía algunos capítulos medio hechos y sabía bien lo que tenía que escribir. Además, como son capítulos más cortos, requieren menos tiempo, mientras que estos son más largos y aún no están completamente planeados. Hay algunas cosas específicas establecidas, pero el resto debo pensarlas.
Pido disculpas una vez más, no quiero prometer algo que no vaya a cumplir. Intentaré seguir con esto ahora que he superado este capítulo que me costó mucho terminar debido a los problemas que ocurrían cada semana. Pero si no puedo, solo puedo decir que los capítulos saldrán cuando pueda. En teoría, esta prueba cósmica durará hasta finales de diciembre, cuando me mude. Supongo que el año próximo será mejor y podré volver a tener más regularidad en esto.
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