—Déjame ver una foto de ella de sus días de juventud —pidió el doctor Byung.
Jin-woon entregó inmediatamente una foto de una joven Sylvie. Al verla, el doctor exclamó al ver su antiguo aspecto.
—¡Oh, Dios mío, tan hermosa! El jefe definitivamente te recompensará con creces por encontrar una candidata de tan alto nivel...
Jin-woon sonrió: —Todavía tenemos que confiar en tus brillantes métodos para devolver a esta dama a sus días de gloria. Cuando llegue el momento, mientras nuestro jefe esté contento, nuestras recompensas serán sustanciales.
El doctor Byung asintió: —Sí, no está mal. No te preocupes, esta vez supervisaré personalmente todo el proceso. No dejaré que le pase nada a esta señora.
El doctor Byung finalmente se fijó en Jordan. Le preguntó a Jin-woon: —¿Quién es este hombre?
Jin-woon respondió: —Es el yerno de esta señora.