Capítulo 60: Futuro, Pasado, Hogar (I)
El viaje de regreso se hizo corto. Batista y su compañero nos contaron que en el camino hasta acá entraron a varios pueblos para confirmar sus estados. Nos sorprendió el hecho que en todas ellas existía al menos un Spiritist que actuaba como el protector de la ciudad. No era su líder ni mucho menos un dictador, sino como una especie de superhéroe que estaba ahí para ayudar a su gente en momentos de necesidad. Es genial que a pesar de haber experimentado un caso extremo como lo que pasó con Victor, puedo contemplar que aun existe el bien en esta realidad. Todavía podemos observar como los seres humanos nos ayudamos los unos a los otros cuando más se necesita.
Alex durmió todo el viaje y solo se despertó al dejarlo en su casa, quedando con la promesa de volvernos a encontrar en otra ocasión. Parece que su labor de guardaespaldas lo dejó exhausto y por fin consiguió relajarse ahora que estaba yo para cubrirlo, creo entender lo estresante que es estar pendiente de cuidar a otro. De todas formas no nos topamos con ninguna criatura en el trayecto.
Finalmente llegamos a la frontera de nuestra ciudad. Cuando pasamos por los guardias que controlaban la identidad de cada pasajero que entraba, uno de ellos me quedó mirando fijamente.
[¿Sucede algo?] pregunté.
[Tú, ¿por casualidad no eres Asriel?]
[Emmm si]
[Realmente eres como dicen las descripciones, ¡nuestro héroe local que liberó la capital! Lo sentimos mucho por la demora, adelante por favor. El señor alcalde lo está esperando]
[¿El alcalde? ¿Cómo supo que volvería?]
[Por radio] añadió Batista. [Tu victoria contra el dictador nos llegó hace unos días de la misma manera que el mensaje encriptado]
[¿En serio?]
[Así es, tu leyenda como héroe solo está por aumentar. Ah, también nos dijeron que probablemente vendrías de regreso acompañado por una niña que acogiste]
[¿¡Qué!?]
[No... soy una... niña...] dijo casi en un susurro, aun incapaz de alzar su voz frente a extraños.
Así que las noticias se esparcieron tan rápido, hasta el hecho de que viene María conmigo...
¡Leah! ¿¡No que todo quedaría entre nosotros!? ¡Más te vale no haber divulgado detalles de nuestros poderes o me las pagarás cuanto te vuelva a ver!
Al entrar por la calle principal las personas nos apuntaban y sonreían aplaudiendo, algunos hasta se me acercaron para pedirme un apretón de manos a través de la ventana del vehículo. ¿Pero qué está sucediendo? ¿Cómo es que repentinamente me convertí en una celebridad?
No pasó mucho tiempo hasta que llegáramos directamente a la oficina del alcalde, la cual estaba resguardada con policías y militares. Estos abrieron las puertas y entramos. Luego de recorrer un largo pasillo nos llevaron a una habitación donde solo había una hombre de pie.
[Estoy muy feliz de volverte a ver Asriel]
[Igualmente señor. Antes de que pregunte me gustaría hacerle una consulta... ¿qué es toda esa conmoción ahí afuera?]
[Hemos estado al tanto de tu desenlace gracias a los mensajes de radio. Decidimos compartir la información a los ciudadanos para aumentar la moral, como resultado todos en la ciudad están orgullosos de tus hazañas, yo me incluyo obviamente. Espero que puedas contarme todo lo que hayas averiguado, así como quién es esa linda señorita detrás de ti]
[...]
Como era de esperar su timidez se hizo presente.
[Ella es María, y es mi preciada compañera. Es un poco tímida, espero lo comprenda]
[Por supuesto, que imprudente de mi parte. María, ¿no? Que lindo nombre, ¿quieres comer algo?]
El alcalde se dio la vuelta y sacó una caja con varios dulces de todo tipo. ¿Es que acaso está preparado para este tipo de situaciones, o serán para él?
Ella asomó su cabeza, caminó lentamente hacia él tomando uno.
[... gracias]
Y esa fue lo único que dijo mientras comenzó a comer regresando a mi espalda. Que tierna se ve.
[Me alegro que te guste. En fin, tenemos planeada una reunión con mucha gente importante para tratar varios tópicos. Asriel, espero que puedas acompañarnos, tus conocimientos y experiencias nos serán de mucha ayuda]
[Seguro, con la condición de que ella esté conmigo a mi lado]
[Obviamente, no hay problemas. Entonces comenzaré las preparaciones, pueden dar una visita por el lugar si así lo prefieren. Les avisaré cuando estén listos]
[Claro, vamos María]
[Ok~]
Ambos salimos y comenzamos a pasear por el edificio, contemplando las diferentes pinturas y estatuas.
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