Capítulo 123: 108
"¡Esposo!"
Celestine sintió el coraje recorriendo cada parte de su espíritu.
"Dilo de nuevo, yo soy tuyo, y tú eres mía."
Todavía sin dar oportunidad, Alexander replicó a Celestine, ella sentía que sus sentimientos estaban en un remolino que azotaba todo lo que estaba oscuro en su Alma, o las preocupaciones en su cabeza.
"¡~Esposo~!"
Celestine no se dió cuenta, pero empezó a respirar más fuerte, como si estuviera acabando un maratón de muchos kilómetros.
"Dilo de nuevo, libera todo sobre mí."
"Alex-sama..." Ella se preguntó si podía ser tan egoísta, pero la mirada de Alexander le dijo claramente que sí podía, "Alex-sama... eres... mi Esposo."
*Auge*
Celestine mencionó y sus ojos brillaron de verde con Magia llenándose en ellos... justo como cuando tenía sus visiones... pero en este momento estaba manifestando su poder solamente.
"Soy tu Esposo, y tu eres mi Esposa."
"¡HAI!" Ella estaba tan alegre que ni siquiera se dió cuenta de las oleadas se Magia que estaba liberando, o de la barrera de contención que Alexander tenía rodeando la cama.
"Ahora... no creo que pueda aguantar más, Celestine, yo soy un hombre, y tu eres mi mujer..."
"Alex-sama..." Celestine dijo y sus ojos perdieron el brillo divino aunque su expresión era la misma, no dejó que Alexander terminara, "Por favor, déjame atenderte primero... yo, lo anhelo, anhelo servirte con cada parte de mi Alma, de mi carne, y de mi espíritu."
"..." Alexander miró a Celestine, y aunque sorprendido, asintió.
Celestine sonrió radiante, como un Sol naciente, y entonces Alexander fue el que se acostó en la cama.
Celestine se sentó desnuda, completamente, y se puso de lado de Alexander.
Justo antes de Celestine hacer algo, ambos de ellos se sorprendieron, parpadearon y se miraron a sus ojos...
Alexander sintió un lazo de Magia que quería hacerse parte de sí, miró y vió que se trataba de un cordel rojo invisible a la vista, pero no a sus ojos, que salía de el pecho de Celestine.
"Celestine esto... ¿lo puedes sentir?"
Celestine miró también su propio pecho, como si al igual que Alexander pudiera ver el cordel invisible que se originaba de allí, tenía un corto tramo, estaba en silencio, y sin moverse justo a centímetros del pecho de Alexander, como un siervo o esclavo que espera la confirmación de su Amo, "Alex-sama... se trata de mí... es mi propia Magia y es mi propio deseo~ Por favor, Alex-sama... acepta esta humilde unión, para estar juntos por la eternidad~"
La cara de Celestine estaba sonrojada cuando hablaba, y Alexander incluso pudo ver vapor saliendo de sus orejas alargadas naturales de los Elfos.
Él sonrió un poco al ver esto.
"Es natural, algo así, por eso no es necesario ningún tipo de necesidad de contar confirmación."
Alexander dijo y tocó un poco ese cordel, que de hecho, como si fuera al algo físico, lo pudo tocar, a pesar de que era intangible.
"¡~Hyann~~!"
Celestine arqueó su cuerpo y un rayo descendió por su columna con un placer indescriptible, Alexander lo notó y no hizo más que reír un poco, luego, guió al pequeño y delgado cordel hacia su propio corazón, entonces el cordel entró por su pecho, y Alexander...
Sintió una conexión real con Celestine.
Sintió los sentimientos de Celestine hacia él en este momento...
Alma Única.
Alma Única.
Alma Única.
Alma Única.
Alma Única.
Alma Única.
No creía que podía contener o aguantar algo así, y se sorprendió hasta la médula con el enamoramiento tan fuerte de Celestine hacia él mismo, era simplemente, demasiado fuerte...
Demasiado potente, demasiado abrumador...
Tanto, que Alexander incluso estaba un poco preocupado de que alguien con este tipo de sentimientos pudiera terminar de alguna forma similar a una Yandere, en el caso de las mujeres que lo sentían por sus personas especiales...
...
Y por supuesto, Alexander estaba ignorando activamente que este sentimiento había sido algo normal para todas y cada una de sus mujeres al principio de su relación...
Tampoco sabía que comparado a lo que se sentía en el principio, para las demás en lo posterior, como por ejemplo, Olga...
Era como comparar la luz que puede hacer una luciérnaga, a la luz que puede hacer un Sol...
Como sea, el Gran Héroe Alexander, no sabía algo así...
...
Alexander estaba semi inclinado en la cama, respirando fuerte, Celestine también estaba así de la misma manera, pero sus grandes y enormes pechos se movían con una oscilación, que Alexander sentía que debía mirar por su propio orgullo de hombre y amante de Milfs.
"Celestine, ¿estás bien?"
Celestine respiró y respondió con una sonrisa demasiado extasiada, "Hai, Alex-sama, hemos realizado un contrato de Amo y Esclavo, ahora podré estar junto a ti por toda la eternidad~"
Alexander se sentó un la cama y suspiró, "Celestine, algo así no era necesario para estar una eternidad conmigo, con o sin contrato, lo estarías."
"Lo sé, Alex-sama~ Ahora más que nunca puedo ver tu Gloria, tu Amor, tu Luz y tu Brillo~ ¡Es como un grueso pilar de poder crudo que se extiende hasta el cielo, ni siquiera los Dioses tendrían poderes así si existieran! También, el contrato se realizó debido a mí, fue mi propia Divinidad lo que me hizo hacerlo, era algo tan natural, y algo que yo quería tanto, que se materializó de esta forma, por eso... ¡~Por favor cuídame de ahora en adelante, Esposo... Amo~!"
Alexander sonrió indefenso, y asintió.
"~Ejejeje~"
Celestine se abalanzó sobre Alexander en un fuerte abrazo, y rió como una pequeña gatita satisfecha que se regodeaba en los pies se su Dueño, su expresión en este momento era el grado máximo de felicidad.
Celestine entonces, después de un tiempo abrió sus ojos, y se quedó mirando la cara de Alexander, y este último sólo miró a Celestine.
Se besaron y Celestine parecía querer quemar a Alexander con su cuerpo, cosa que... de una extraña manera, estaba haciendo a Alexander sentirse cálido, o sea... era poco y muy agradable, pero lo estaba quemando de verdad...
*Pu~ha*
Alexander terminó el beso con Celestine, y ella se separó de Alexander mientras lamía y sorbía su saliva, después abrió sus ojos de una forma erótica, donde pudo notar el hilo de saliva fino entre ellos...
Alexander vió que Celestine tomó esto de el extremo de él, y poco a poco se lo llevó todo a su boca, luego, miró a Alexander y este, viendo el aspecto, los deseos, y el ambiente sucúbico que tenía Celestine al mirarlo así mismo, sintió...
Bueno, sintió que sería violado de nuevo.
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