Nicole se enfrentó a Jordán con tenacidad y ferocidad.
Ahora era el último día del torneo académico y se estaban enfrentando en la final.
Sin embargo, Nicole no la tuvo fácil.
Jordán era un espadachín centrado en la velocidad pura, y también era alguien experimentado que usaba su experiencia y técnica para enfrentarse a sus oponentes.
Al no haber podido ascender de rango durante bastante tiempo mejoró su técnica y su arte de espada, convirtiéndolo en un oponente que era muy problemático.
Su espada trataba de cortar el reforzamiento de Nicole, y ella se defendía dando fuertes puñetazos tratando de acercarse a Jordán.
Como un Rango B, Jordán no tenía aura de espada, pero utilizó la distancia a su favor.
Su espada podía golpear a Nicole antes de que sus puños lo alcanzaran y sin dejar que se acercara mantenía la distancia retirándose.
Pragmático y con calma, ambos se enfrentaron y lentamente se demostró la desventaja de Nicole.
No fue imprudencia o nervios, tampoco fue resistencia, sino que se trató de técnica.
En un combate en donde sus fuerzas estaban igualadas las técnicas se podían convertir en la razón que definieran la batalla.
Y aquí se demostró esa ventaja.
Nicole tenía cierta experiencia y una gran habilidad para luchar con estilos muy variados tanto ágiles como rápidos, pero Jordán que había alcanzado su límite se había convertido en un maestro de su técnica.
Su espada era veloz y sus movimientos claros, mientras que sus juegos de pies le permitieron moverse por el campo de batalla con tranquilidad.
Dando pasos finos y cortos que le permitían esquivar los golpes de Nicole.
Cada ataque que realizaba era de tal forma que debilitaba el reforzamiento de Nicole y lentamente la estaba acorralando a pesar de que era él quien parecía estar perdiendo ante la ferocidad de la luchadora.
Nicole trató de cambiar el ritmo de la batalla y para su lamento no pudo lograrlo.
No importa si usaba el medio a su alrededor, en este combate individual donde no podía usar su traje de combate y todo era equipo promedio dado por la academia, la hizo difícil cambiar su situación.
Sin embargo, ella no se rindió y siguió hasta el final.
Hasta que Jordán pudo atravesar el reforzamiento de Nicole y empezó a crear heridas en el cuerpo de un luchador.
La espada era afilada y en manos de Jordán era un arma letal, pero de otra forma el cuerpo de un luchador era un arma y a la vez un escudo.
Con una resistencia muy alta y reforzado con su energía mágica, ellos eran 'tanques' con una poderosa armadura.
Jordán empezó a producir grietas en esa armadura que lentamente se fueron acumulando hasta que al final la barrera se activó cuando realizó un golpe más letal.
Cuando eso sucedió Nicole cayó al suelo agotado y respirando pesadamente.
"Por fin tenemos un vencedor. ¡Jordán Wood campeón del torneo de Rango B!" Exclamó Frank que estaba actuando como anfitrión.
La mayoría de la atención durante los combates se centró en los del primer año.
Nicole se había llevado toda la atención, pero también lo hizo Alexey que ocupó el cuarto puesto.
El mismo Frank había quedado tercero, pero también Cristian con su quinto puesto fue llamativo.
Tres estudiantes de primer año se llevaron toda la atención demostrando su actuación excelente y el talento de los estudiantes de primer año.
A la vez que mostraron lo eficaz que fue el cambio de programa de este año.
Adelantando las prácticas llevó a que los estudiantes aprendieran aún más rápido, hasta el punto de que ahora demostraron la capacidad de superar a los estudiantes de años superiores.
No había que negar que Nicole, Alexey y Cristian tenían talento.
También Marc era igual si no hubiera terminado tan herido la última vez, seguramente estaría entre los primeros diez.
"Un magnífico combate. Me sentí muy presionado." Dijo Jordán guardando su espada.
Nicole dio una tenue sonrisa mientras esperaba a los curadores.
"Solo hice lo que pude…" Murmuró con una voz débil y exhausta.
Si Jordán se sintió presionado, ella se sintió exasperada ante la defensa y las habilidades de Jordán.
Presionarlo para conseguir un hueco en su defensa o un defecto fue muy difícil y cuando lo logró, Jordán se recuperó de inmediato.
Nicole logró mantener la calma y racionalidad, ya que a ella no le gustaba volverse loca, no obstante, era posible que cualquier otro luchador se hubiera sentido frustrado y hubiera atacado con todo, queriendo conseguir alguna ventaja.
Aunque perdió no estaba molesta.
Si antes sorprendía a sus enemigos por su tenacidad y actitud, ahora se enfrentó a un oponente cuya mayor defensa era su técnica y sus movimientos.
Incluso como una luchadora la capacidad para seguir adelante enfrentándose a cada enemigo no era lo único, necesitaba seguir entrenando y mejorando sus habilidades.
¿En cuánto a ser la subcampeona?
A ella no le importaba demasiado, cuando había aprendido bastante.
******
En una sala privada de la academia los estudiantes del último año se encontraban presentes, incluyendo a Edward quien era el encargado del torneo.
"Edward hay que tratar los diferentes asuntos relacionados con el rango de Alice." Dijo Niels dando una expresión seria.
Edward dudó al escuchar esas palabras.
"Su fuerza es aterradora. En primer lugar, si antes estaba la duda de que ella era un Rango S, ahora hay una prueba." Señaló Gregorio apuntando a Oliver que estaba sentado con una expresión difícil.
Para el público ese último golpe de Alice en contra de Oliver pareció aterrador y muy fuerte, tal vez algunos tendrían dudas y esas dudas podían ser respondidas sin revelar nada.
Sin embargo, ellos como aquellos que se enfrentaron a Alice sabían lo aterradora que era y con ese último golpe se dieron cuenta de que esa glotona era más fuerte de lo que decía.
No estaban enojados de que Alice ocultara su fuerza, ya que ella les ganó con una fuerza de Rango A y solo cuando Oliver recibió el último golpe fue que descubrieron la verdad.
Edward suspiró.
Ya lo sabía.
En primer lugar, había trabajado para ambas hermanas durante un tiempo y conocía la fuerza de ambas o al menos había visto una parte.
Ellas no debían estar aquí como simples estudiantes.
Esto era una farsa, ambas eran mercenarias veteranas que a una edad muy joven ya estaban realizando tareas peligrosas.
Sin embargo, Edward guardó silencio y miró a los presentes.
Gregorio, Oliver, Rachael y Niels.
Estos eran los favoritos para el torneo internacional y que lucharían por un puesto contra uno de los de primer año.
Ahora como Oliver ascendió de rango, Clémentine y Alice no se enfrentarían a los estudiantes más fuertes.
Aunque en cierto sentido ya era inútil, ya que ambas eran las semifinalistas del torneo académico y, por ende, quienes ocupaban un puesto para el torneo internacional.
"¿Qué piensan?" Preguntó Edward a Rachael y Oliver.
No era como si él fuera la persona que dirigía todo el torneo, puesto que los presentes de esta sala lo ayudaban para encargarse con los pormenores.
"Participar en el torneo internacional es una gran oportunidad. Ya sea para volverse conocido como un héroe o para ser contratado por un país o entrar a una sociedad o grupo." Dijo Rachael y cuando todos asintieron, agregó. "Pero si llevamos a un supuesto estudiante de rango A que resultó ser un Rango S. Podría traernos problemas o descalificarnos."
Edward asintió.
Cualquier trabajo necesitaba reconocimiento y era esa razón por la cual él mismo participaba.
Deseaba entrar en el gremio de héroes el año siguiente y a pesar de que tenía una buena relación y había trabajado con ellos, tener reconocimiento público ayudaría a su imagen.
Ahora como dirigente de este grupo, si hacia la vista gorda y llevaba a un estudiante de Rango S entre los Rangos A.
Una vez que lo descubrieran podrían ser mal vistos o hasta incluso tener problemas y ser descalificados.
"¿A quién le importa? Nadie sabía de Alice hasta que le pedí que luchara con toda su fuerza." Remarcó Oliver y dando una sonrisa, anunció. "Hay que llevarla. Será una carta oculta. Bueno, hasta a mí me gustaría ir si no fuera porque ya me han descubierto."
Un rango S como carta ocultaba sonaba muy tentador.
"No sabemos si las autoridades del torneo internacional harán pruebas para ver nuestra fuerza o nos dejarán pasar de cualquier forma. Sin embargo, no hay duda de que ella es una carta oculta." Comentó Niels sonriendo igual de animada que Oliver.
Ambos votaban por una decisión audaz para ocultar la fuerza de Alice y usarla a su favor en el torneo internacional.
"Creo que nos estamos olvidando un punto importante. ¿Por qué ella no revela su fuerza por completo? Si se registrara en el gremio de mercenarios seguramente muchos buscarían contratarla. Con esa fuerza hasta es capaz de crear su propio gremio de aventureros." Dijo Gregorio apuntando al pensamiento de Alice.
La expresión de Edward tembló.
No era que estuviera ocultándose… Si no que no requería tanta fuerza para vencer a los estudiantes.
En cuanto a registrarse en el gremio… ¿Qué ganaría si se registraba?
El reconocimiento y los beneficios del gremio de mercenarios eran agradables, pero no para Alice o Aurora que podían conseguir los mismos beneficios por otro lugar.
En cuanto a crear un gremio, ellas ya tenían a su propio grupo de mercenarios.
Edward sabía que muy pocas cosas le interesaban a Alice, así que podía entender sus razones para no registrarse y la mayor causa de todas, probablemente era pereza.
Era muy posible que si alguien le ofrecieran unas bolsas de papitas para que se registrara, lo haría de inmediato.
"Es mejor dejar que el Director Vincent se encargue. Es posible que con ese último golpe los profesores se den cuenta de su fuerza." Dijo Rachael tomando el camino más simple y fácil.
No había duda de que era la decisión más prudente y había un problema.
"El Director Vincent dejó que las autoridades del torneo internacional se hicieran cargo de ese asunto." Respondió Edward con una expresión extraña.
Hubo un silencio por un momento.
Por lo general se incentivaba a que aquellos individuos fuertes actualizaran sus rangos, y si bien ya no era como antes en donde algunos héroes usaban máscaras, no había duda de que algunas personas ocultaban su fuerza por varias razones.
Algunos lo hicieron porque no querían que sus enemigos lo conocieran, otros porque no le gustaba ser reconocido y había algunos que hasta le desagradaba los organismos oficiales de registro.
El Director Vincent no le dio tanta importancia por la simple razón de que Alice y Aurora no representaban un peligro.
"Eso resuelve todo. Contratémosla… Es decir, pidámosle que se una. No creo que en el torneo internacional se realicen pruebas para identificar su rango o ascenderla." Dijo Oliver y dando una sonrisa astuta, añadió. "Además, no hay ninguna regla sobre la fuerza. Han pedido cinco Rangos A oficiales. No es nuestro problema si uno tiene una fuerza superior a lo que dice oficialmente."
Edward lo miró de modo extraño debido a que esa respuesta era bastante problemática y a la vez astuta.
Solo estaban usando una laguna en las reglas para obtener más posibilidades de ganar el torneo internacional.
"Somos héroes tenemos que respetar las reglas." Dijo Gregorio agitando su cabeza rechazo.
"Es cierto, pero ser héroe no significa nada ante la victoria. No sé tú, pero si debo ganar haciendo trampas para salvar a otras personas, no me importaría." Refutó Niels con un tono lleno de desprecio.
Estaba comparando el torneo internacional con un asunto de suma importancia en la que los valores de 'héroe' no ayudarían en nada.
Hubo algunos fruncir de ceños, pero…
"Creo que Alice debe decidir. Fue ella quien se adentró en el combate de Rango A y ella debe tener sus razones para hacerlo." Dijo Oliver y dando una sonrisa, preguntó. "Y si desea participar en el torneo internacional como Rango A, ¿creen que pueden detenerla?"
Todos recordaron como ellos le robaron su bolsa de papitas cuando entró a la academia y debían admitir que en ese momento Alice no les importó ninguno de los estudiantes e hizo lo que deseo.
Ahora era igual.
Al director no le importaba como se organizarán y ellos no podían negarle la participación, por el hecho de que los puestos estaban para ser ganados.
Eso significaba que si querían evitar que ella fuera al torneo tenía que ganarle.
Incluso como Rango S, el mismo Edward dudaba de su victoria si se enfrentaba a esa jovencita.
También pensaba como Oliver y Niels, aunque había una razón para ello.
"Dejemos que Alice decida qué hacer. En cuanto a lo que estoy seguro es que no somos los únicos que pensaremos de esta forma. Hay otras academias que tienen estudiantes poderosos y que seguramente los intentaran ocultar como Rango A." Dijo Edward en un tono serio.
La academia de héroes era famosa, pero en el mundo también se encontraban otras academias famosas con estudiantes habilidosos.
Que ellos pensaran superar esta laguna significaba que otros también tendrían la misma idea.
Ellos tenían una resistencia a la idea de usar lagunas porque eran héroes, era su deber seguir las reglas y mantener los ideales heroicos puros, no obstante, Edward sabía que la realidad era cruel como para mantener ese modo de pensar.
Tal vez este asunto no sea muy importante, pero esos valores no eran muy útiles ante la crueldad de unos lunáticos.
Todos sus compañeros asintieron al dejar que Alice decidiera.
No era mentira cuando Oliver dijo que no podían detenerla, incluso si intentaban delatarla, Alice se podría burlar en sus caras y permanecer oculta, como lo estuvo haciendo durante la mitad de la academia.
Edward comprendía mejor que nadie que ellas eran hábiles para ocultarse y que su maestro de rango SS tuviera dificultades para ver cuál era la fuerza de ambas hermanas era la prueba.
Si un rango SS con sentidos agudos tenía dificultades no había que imaginar un artefacto o escáner.
"Bien, vamos a ver la final."
Solo faltaba un último combate y todos estaban deseosos de verlo.
******
En medio de la batalla, una tensión fue aumentando lentamente mientras Clémentine y Alice se observaban a la distancia.
"¡Que comience la batalla!"
Clémentine apenas escuchó la señal de comenzar, se movió.
Usando su telequinesis para romper las paredes arrancó trozos gigantescos de concreto y luego sin dudarlo lo lanzó a Alice, sin darle la oportunidad que abriera la bolsa de papitas.
*BOOM*
Una nube de polvo se extendió cuando las rocas golpearon la posición de Alice y aunque la nube de polvo ocultó lo que sucedió, Clémentine continuó.
Controlando su energía psiónica para formar un poderoso cañón psiónico, ella lo disparó al centro de la nube de polvo.
*BOOM*
A pesar de que utilizar la energía psiónica directamente era la forma más simple que un psiónico tenía para atacar, eso no significaba que no fuera poderoso.
Lo era y mucho, ya que la explosión fue perturbadora.
No había visto a Alice demostrar toda su fuerza, ya que a pesar de que estuvo en la misión Arca y Asalto, esa jovencita siempre usaba la fuerza necesaria para derrotar a su oponente.
El combate con el Smilodon Fatalis fue dentro de una poderosa barrera de Liam y fue igual cuando se enfrentaron al Terror Somalí.
Sin embargo, sabía que Alice era muy fuerte y más cuando era seria.
Que sus brazos negros atravesaran el blindaje de un tanque cuando Aurora recibió el disparo en Kenia, era solo una pequeña prueba de esa idea.
Fue por tal razón que a pesar de que no hubo movimientos Clémentine se siguió moviendo.
Generando decenas de dagas con su energía psiónica, esas dagas que parecían no tener forma corpórea y eran ligeramente traslúcidas, fueron disparadas hacia la ubicación de Alice.
El golpeteo de las dagas fue escuchado por Clémentine y esta vez vio como una decena de tentáculos se agitaban deteniendo todos esos ataques.
La nube de polvo desapareció lentamente y Alice se reveló frunciendo el ceño mientras cerraba su bolsa de papitas para que no le entrara tierra ni polvo.
Clémentine controló su expresión, ocultando que una parte de ella estaba ligeramente asustada de que Alice se enojara por las papitas y fue más aterrador, cuando ella recordó el día que esa glotona las entrenó.
No podía negar que ese día, la hizo sentir como insectos siendo aplastados por una terrible criatura.
Aun así, ese día ya había pasado.
"¡DETENTE!" Ordenó Clémentine extendiendo una onda mental para afectar a Alice.
Esa fue la carta secreta con la cual le ganó a Rachael y era un poderoso ataque mental que paralizaba a su enemigo.
Con ese ataque sobrevivió en la misión de Asalto y ahora lo estaba usando contra una persona que respetaba.
Alice frunció el ceño y antes de que la onda mental la alcanzara, se cubrió con sus brazos negros, siendo rodeada por un capullo negro.
Era un ataque mental así que teóricamente atravesaría ese capullo, y a pesar de ello, Clémentine no tenía confianza.
Ya sea si pasaba o no, Alice estaría protegida en ese capullo por esos segundos tan vitales.
Y Clémentine no los desperdicio.
Usando su fuerza mental para destrozar la pared y la tierra levantando grandes masas del suelo, su nariz empezó a sangrar.
Se estaba sobre exigiendo y aunque el dolor de cabeza era abrumador, resultaba necesario.
Levantando sus manos las grandes masas de piedra se empezaron a levantarse en el aire, formando esferas.
"Ugh…"
La sangre en su nariz se hizo más intensa, ya que ese ataque era muy exigente, y ella apretando los dientes, continuo.
No era por arrogancia u orgullo, solo deseaba demostrarle a Alice y Aurora que la estaba viendo, lo fuerte que era.
Lo fuerte que se convirtió gracias a ellas.
Tal vez para algunos era exagerado, pero Clémentine sabía que ir a áfrica fue la mejor decisión que había tomado a causa de que sentó la base para lo que ella deseaba y lo que buscaba.
Le demostró que había más de lo que los medios decían, de lo que sucedía en las grandes ciudades y le reveló que para ser un 'héroe' no necesitaba popularidad o tener miles de fans en una ciudad.
El prestigio no era necesario, un héroe se encontraría en muchos lugares diferentes ayudando a su manera, en silencio.
La llamaban 'genio' y la 'estudiante perfecta', pero no lo era.
Para Clémentine fueron Aurora y Alice quienes la llevaron a convertirse en lo que era ahora.
Fue por eso que quería demostrarle de lo que era capaz y de lo que sería capaz en el futuro.
Levantando decenas de rocas por el escenario destruyendo la mayor parte de la arena, Clémentine bajó sus brazos directamente hacia Alice.
Una enorme fuerza de gravedad empujó todas esas rocas mientras que con su telequinesis la enviaba directamente a la posición de ese capullo negro.
Estaba presionando con todas sus fuerzas para aumentar aún más la potencia de ese ataque y a mitad de que las rocas cayeran, la sonrisa de Clémentine creció.
Decenas de brazos como tentáculos empezaron a extenderse por todas partes atrapando a las grandes rocas unas por uno, como guanteletes atrapaban a una pelota y luego…
"Mierda…" Murmuró Clémentine cuando vio las rocas salir disparando hacia ella.
A la primera la dividió usando su telequinesis para separarla, a la segunda la desvió hacia otro lugar y a la tercera la cortó para alejarla.
Luego hizo lo mismo con la siguiente y la siguiente, así sucesivamente hasta que no tuvo tiempo para desviarla y recibió el golpe con su barrera.
"GUhh…"
Atrás de cada gran roca había una fuerza aterradora que la hizo gemir de dolor mientras era empujada hacia atrás, y Clémentine extendió aún más su barrera para recibir los subsiguientes golpes.
*BOOM*
Ella gimoteó y retrocedió.
*BOOM*
Cayó al suelo de rodilla y tosió sangre.
*BOOM*
Clémentine mantuvo su barrera psiónica para protegerse no importa cuántas rocas cayeran sobre ella.
Por dentro se lamentaba de haber enviado tantas rocas y mayor que lamento, estaba sorprendida de que Alice lograra atrapar todas las rocas sin que destruir ninguna por el impacto.
Sin embargo, en medio de esos pensamientos recordó que cuando tocó esos brazos negros se sentían blandos y esponjoso, dando cuenta de que el control de Alice era más profundo.
Esos pensamientos venían a su mente, ya que ella estaba arrodillada en el suelo con su cabeza adolorida y en un estado completamente perdido.
Desde que se convirtió en un Rango A, nunca había gastado tanta energía psiónica y tampoco había alcanzado su límite como en este momento.
A pesar de que este estado era doloroso, ella sabía que había empujado su límite un poco más.
Limpiándose la sangre de su nariz Clémentine levantó su cabeza adolorida por ese simple movimiento y se encontró con Alice caminando hacia ella por el escenario destruido.
"Fue impresionante. Tengo que admitirlo." Dijo Alice y dando una sonrisa, anunció. "Casi pierdo mi bolsa de papitas."
Para otras personas esas palabras sonarían como desprecio, pero Clémentine entendía la importancia de que Alice le daba a sus papitas y no pudo evitar reírse.
"Algún día lo lograré…" Murmuró Clémentine sin poder evitar reírse en el medio.
Alice dio una gran sonrisa entretenida y dando su mano para ayudarla a levantarse, comentó. "Puedes intentarlo."
Los labios de Clémentine temblaron, pero solo dejo salir una sonrisa mientras se levantaba con la ayuda de Alice.
Cithrel y otros curadores se acercaron velozmente para ayudarla, aunque no fue necesario, ya que ella no recibió tanto daño y el mayor dolor era interno, al gastar tanta energía psiónica.
Así que solo estaba cansada y aunque le dolía la cabeza, sonrió ante el festejo de la victoria de Alice.
"¡Con esta gran final hemos terminado el combate! ¡Y ya hemos publicado los puestos de todos los estudiantes! Recuerden anotarse en este fin de semana si desean retar a un estudiante." Anunció Frank apareciendo en la proyección.
Todos los relojes holográficos vibraron y revelaron a los estudiantes que ocuparon los puestos de combate.
La mayor parte de ellos fueron ocupados por los estudiantes que ganaron el torneo, pero con la aplicación podían inscribirse para retar a uno de ellos.
El torneo internacional estaba cada día más cerca.
Espero que les haya gustado. Con esto hemos terminado la sección del 'torneo académico'... Para ser un torneo, no se sintió completamente como uno, al menos fue demasiado desorganizada. La primer razón fue por que lo hicieron estudiantes, la segunda es porque este es solo un aperitivo... No dire nada más que eso, pero les aseguro que próximos capítulos hasta el final del volumen 1 les encantara. Al menos espero que tanto como a mí que me encanto escribirlo.