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13.58% The Guardian [Spanish/Español] / Chapter 133: Tú tienes prioridad.

Capítulo 133: Tú tienes prioridad.

En la sala de la mansión en la Ciudad Atlántida, Aurora proyectó un anunció de la academia.

Quien estaba hablando era la persona que actuó como anfitrión del torneo y ahora estaba dando una sonrisa sabiendo que todos los estudiantes lo estaban viendo.

"¡Hemos terminado la primera semana! Para la próxima semana tendremos un combate entre los diez mejores combatientes de Rango A. El enfrentamiento de los cinco grupos y por supuesto, pasaremos por los cincuenta enfrentamientos de los estudiantes de Rango B." Dijo Frank usando una voz llena de emoción y sonriendo a la cámara, anunció. "¡Para el viernes de la otra semana tendremos a los ganadores!"

Esta semana sería agitada para los estudiantes y quienes atravesaran todas las dificultades, se convertirían en los ganadores.

"¡En la cuarta y última semana, se lucharán por los pocos puestos establecidos!" Añadió Frank y dando una sonrisa gigantesca, avisó. "Desde ahora pueden inscribirse para retar a cualquier participante de los puestos. ¡Esperamos su entusiasmo!"

Aurora que estaba viendo el anuncio online, quito la proyección y abrió su reloj holográfico para leer los nombres de quienes ocupaban los puestos para el torneo internacional.

"Diez puestos para los Rangos B y cinco puestos para los Rangos A y solo uno para un Rango S. Eso es bastante poco." Dijo Cithrel que estaba sentada a su lado.

Ese era el número de estudiantes que se requería para que participaran en el torneo internacional.

En la última semana de este mes, los seleccionados para los puestos tendrían duros y feroces combates contra todos los retadores.

Estaba distribuido por toda la semana y había algunas reglas en beneficio a aquel que tenía el puesto, tratando de priorizar el descanso y el equilibrio, no obstante, iba a ser agotador.

"Oh, Alice y Clémentine están como las personas que tienen un puesto." Dijo Cithrel y dando una mirada curiosa, comentó. "Pensé que estudiantes de segundo o tercer año, lo ocuparían."

Aurora asintió ante ese comentario.

Había excelentes estudiantes entre los años superiores quienes podrían ocupar ese puesto y si bien era posible, que personas como Clémentine o Alice pudieran conseguir el puesto a través de un desafío, sin duda los estudiantes superiores tenían una mayor reputación.

Sin embargo, pusieron a los estudiantes de primer año en esos puestos.

"¿Tal vez quieran que haya muchos retadores para ayudarlas a mejorar?" Dudó Aurora, suponiendo una posibilidad.

Que novatas de primer año ocuparan los puestos llevarían a que algunos estudiantes desearan desafiarla creyendo que ganarían y tales desafíos, empujaría a que ambas mejoraran.

Para Aurora era probable que los profesores interfirieran en esta decisión, queriendo buscar que los nuevos mejoraran.

La mayor razón era Edward –el encargado del torneo- conocía a Alice y sabía que ella no necesitaba estudiantes para 'mejorar'.

Aunque otra razón podía ser que tanto Clémentine como Alice, eran dos rangos A que se encontraban entre los diez rangos A del torneo individual.

Independientemente de cómo fuera, sería interesante ver si ellas serian desafiadas y era probable que lo fueran si su rendimiento era bajo en los torneos individuales.

En cuanto a los puestos de rango B, las vacantes estaban vacías sin que nadie la ocupara y era probable que la eligieran a los participantes por medio del torneo individual de rango B.

Tal vez queriendo que desde este momento no se hiciera una cola de retadoras en caso de que pusieran algunos, muy diferente a Clémentine y Alice, que como rangos A, no había tantos compañeros del mismo rango.

Al final, el único Rango S era Edward como un estudiante de tercer año de la academia.

"Creo que será interesante, quiero ver como intentan robar puestos entre sí o mantenerlo." Dijo Cithrel riéndose entretenida y expectante.

Para Aurora estas semanas iba a ser una odisea para los estudiantes y era probable que también fue complicado.

Aquel estudiante que fuera visto como débil, probablemente sería desafiado por todos, creyendo que podrían arrebatarle el puesto.

No iba a negar que era divertido observar y Aurora estaba contenta de haberse negado a participar.

"Me podre a hacer el almuerzo. Alice despertará en unos minutos y ella siempre tiene hambre." Dijo Aurora en calma y cuando estuvo por levantarse, Cithrel la sostuvo de la mano.

Aurora se giró curiosa por saber si quería comer algo espacial y su expresión tembló cuando vio el rostro de Cithrel.

Cithrel bajo sutilmente su cabeza y la observó desde abajo con ojos azules que brillaban con sutilidad, pareciendo a un cachorrito adorable que estaba triste por una razón desconocida.

Y Aurora quedó impactada ante esa mirada, que era similar a la que Alice era capaz de hacer cuando quería comer algo especial.

"Escuche que esta semana te irás a Asia." Dijo Cithrel y observándola dando una pequeña sonrisa. "No quieres que te acompañe?"

Una voz débil y sutil, que junto a su expresión y su mirada resultaba encantadora y no solo daba lástima, sino que culpa.

La culpa de no haberle preguntado si deseaba ir con ellas a su viaje a Japón.

Aurora sin saber cómo reaccionar notó de reojo que Venali cuando estuvo por bajar subió al verlas, dando la impresión de que no quería arruinarle la actuación a su 'Señora'.

¿Estaba evitando perturbar la atmósfera?

"En realidad, esto es un asunto diferente a pedirte que me acompañes a áfrica. En Asia tengo una misión y en ese momento será difícil encargarme de tu seguridad." Dijo Aurora y al darse cuenta de que era inútil, se rio y murmuró. "O al menos dar una imagen de protegerte."

No era como si gracias a ella o a su hermana Cithrel estuviera a salvo y más cuando fue obvio que podía protegerse, pero su idea general seguía vigente.

Cithrel suspiró decepcionado al no obtener lo que deseaba y se rio divertida a su murmullo.

Urfin le pidió que asegurara la seguridad de Cithrel y en cierto sentido era más cuidar que ella no se metiera en problemas o evitar que otros buscaran problemas mientras que la ayudaba adaptarse a este mundo.

"Vamos… Me has llevado a la guarida de un grupo de pandilleros y me hiciste golpearlos a todos, esto no es demasiado." Dijo Cithrel con una mirada esperanzadora y ligeramente acusadora.

Estaba tomando el papel de víctima, tratando de usar lo que sucedió ese día para conseguir lo que deseaba y por sus brillantes ojos no deseaba rendirse.

Aurora pudo ver de inmediato a través de ella y se rio por el modo que lo hizo parecer.

Dio la impresión que ese día fue toda su culpa y no la misma Cithrel, quien en su afán de actuar como un caballero galante protegiendo a una damisela, quiso lucirse.

Mostrando que era un caballero bastante peligroso.

"Bien, me encargaré de pedir un lugar para ti y Venali, pero no sé si participaras en la misión oficialmente. No creo que haya demasiado presupuesto para contratarlas a ambas." Dijo Aurora enfatizando ese punto.

Comprendía que Cithrel estaba bromeando al tratar de culparla.

Akira le había mencionado, que podría llevar sus objetivos de protección y si bien una parte era por amabilidad, la mayor razón era obtener dos rangos S gratis.

Aunque el dinero y el pago no importaba, al igual que Aurora le pagó al grupo de Akira cuando fueron a África, su compañera le gustaba hacer lo mismo.

Y contratar al grupo mercenario y a los estudiantes oficialmente, significaba que podría no obtener tantas ganancias de la misión.

Por supuesto, aunque no les pagaba demasiado sin duda era imposible contratar a dos rangos S extra y si lo hacía, iba a terminar con pérdidas.

"Excelente. Creí que estabas enojada conmigo." Dijo Cithrel con una sonrisa animada y al ver que Aurora lo miraba por una respuesta, dio una sonrisa astuta y murmuró. "Pensé que estabas enojada y celosa por lo de Taqiyya."

La expresión de Aurora tembló.

La hizo sentir como si su razón para no haberla invitado se trataba de un acto de celos en vez de una preocupación presupuestaria por Akira.

Sin darle tiempo a que Aurora respondiera Cithrel continuo.

"No necesitas preocuparte…" Dijo Cithrel y levantándose para acercarse, dio una encantadora sonrisa y susurró. "Tú tienes prioridad."

La sonrisa atractiva y seductora llevó que Aurora se ruborizara.

No iba a admitir que Cithrel era seductora, así que por tal razón controló su expresión y la timidez ante ese coqueteo descarado.

"Lo siento, pero no me gustan las personas que juegan con los sentimientos de dos personas." Dijo Aurora agitando la cabeza con decepción.

Coqueteaba con Taqiyya y descaradamente lo hizo con ella… Aurora enfatizó ese punto, tratando de parecer lo más decepcionada posible.

Llevando a que Cithrel se riera divertida al escucharla.

"No te preocupes. Mi relación con ella no es de ese modo y no creo que la relación sea del modo que tú piensas." Respondió Cithrel ambiguamente guiñándole el ojo.

Aurora agitó la cabeza con una sonrisa y alejo su curiosidad.

No deseaba darle una oportunidad al caballero para que coqueteara con ella.

******

Andrés movió sus dedos por el teclado de la computadora mientras con su habilidad trabajaba con la IA de su reloj holográfico.

Su cuerpo y su habilidad estaban realizando trabajos similares al mismo tiempo.

Con su habilidad apoyaba a su IA que al mismo tiempo lo apoyaba a él, para aumentar la eficiencia de su trabajo.

En la pantalla de la computadora las distintas imágenes pasaban rápidamente mientras buscaba a una persona en particular por todos los datos a la cual la red de información tenía acceso.

Al final, logró encontrar su objetivo y buscó toda la información posible desde su nacimiento hasta su última actividad.

Se buscaba todo rastro de información por la red virtual, se comprobaba su historial, sus búsquedas habituales, sus redes sociales o cualquier información sobre su objetivo.

No necesitaba piratear absolutamente nada gracias a que sus compañeros se habían encargado de realizar esa tarea y él, solo tenía que organizar la información.

Esa era el trabajo de novato y él con la ayuda de su inteligencia artificial y su rápido manejo de la red de información, consiguió toda la información que buscaba.

Luego la organizó y la envió a la persona a cargo de la tarea de recopilación de información.

Al terminar Andrés suspiró agotado frotándose su cabeza.

Había completado este tipo de tareas con Liam, así que no era tan pesado.

A veces incluso había ayudado a Liam para infiltrarse a dispositivos de sus objetivos y el único problema de este trabajo, era la cantidad.

Como un 'novato' que prácticamente estaba a 'prueba', los superiores le dieron suficiente trabajo para toda la semana pagándole una comisión decente.

Sin embargo, a causa de la invitación de Akira, Andrés tuvo que apartar todo su trabajo de esta semana y terminarlo hoy.

Todo para mañana viajar a Asia junto a los demás.

Era cierto que no deseaba realizar trabajo de campo en donde literalmente cada vez que perdía un dron perdía una parte de su fortuna, pero no se negó a ayudar a Akira.

En primer lugar, Akira y su grupo los había ayudado mucho durante su tiempo en áfrica y Andrés pensaba que estaba bien ayudarla de vuelta.

Y lo más importante era que Akira pagaba bastante bien por su trabajo y principalmente no solo era simplemente ayudarla, sino que esta era una posibilidad de seguir desarrollándose.

En ese sentido, Andrés entendía que Akira los estaba dando una posibilidad para mejorar a la vez que ella completaba una misión, que probablemente podría hacer por su cuenta.

Este era un modo de apoyar y para no generar ninguna presión de devolución trató de hacer que pareciera como si ambos lados salieran ganando.

"Andrés buen trabajo. Luego te enviaré tu comisión."

La puerta de repente se abrió y un hombre habló desde la entrada.

Ese hombre era uno de sus compañeros y uno de sus superiores, Fausto un experto informático cuya destreza no provenía de sus habilidades o talentos, sino que de su propia capacidad.

Destreza pura.

"Gracias." Respondió Andrés y antes de que se fuera, preguntó. "¿La jefa está jugando?"

"Si, pero ten cuidado. Esta de mal humor." Advirtió Fausto y al ver a Andrés mirarlo con curiosidad se rio y reveló. "Algún idiota le ganó en línea y ahora está echando humo."

Riéndose divertido tras dejar la advertencia se retiró y Andrés respiró hondo.

Tenía que conseguir que Serena le diera permiso y no le diera más tareas, así podía ir al viaje.

Andrés no tenía horario de trabajo específico y Serena fue agradable para evitar interrumpir sus estudios, aun así, siempre se le dejaba tareas para que se mantuviera ocupado.

Ya sea encargarse de alguna tarea simple, de organizar alguna información o realizar algunas comprobaciones por internet.

Necesitaba lograr que su jefa no le diera trabajo este fin de semana así se tomaba unas vacaciones y se centraba en ayudar a Akira en lo que necesitara.

Saliendo de su oficina Andrés caminó por el pasillo.

Serena no solo tenía el sótano que era una sala de juegos, sino que tenía diferentes habitaciones en el edificio en el que se encontraba.

Esas oficinas daban privacidad a los miembros de la red informática y también se podían usar para recibir a individuos importantes.

No eran demasiados miembros, pero era agradable tener algunas opciones de privacidad en vez de usar la sala de juegos.

Además, había una diferencia en capacidad de las computadoras de la oficina que estaban centradas en la búsqueda con las computadoras que estaban especializadas en los juegos.

Las redes de información no eran lugares simples en donde un grupo se reunía para realizar diferentes trabajos, eran áreas que debían tener grandes capacidades para permanecer ocultos y poder realizar su trabajo en paz.

Este edificio tenía esas seguridades y les brindaba la mayor ayuda a los trabajadores dándole el mejor equipo y brindándole la mejor seguridad posible.

También tenían diferentes comodidades, ya que un piso del edificio era completamente de ellos y podía encontrarse una sala, comedor y otras áreas de entretenimiento y descanso.

Hasta había diferentes apartamentos para vivir y habitaciones para descansar temporalmente.

Tal equipo demostraba porque esta red de información era una de las más importantes en la Ciudad Atlántida.

Andrés al bajar al sótano, se dirigió a la sala de juegos en donde los clientes que venían por primera vez eran dirigidos.

A los clientes que visitaban por primera vez se los engañaba y se le ocultaba la mayor parte de su capacidad.

La causa era que esta red de información trabajaba para clientes importantes muy específicos, siendo muy pocos trabajos menores y personales.

"Tch… Maldito bastardo. ¿Cómo se atreve a ganarme?"

Apenas entró a la sala de juego notó a su jefa maldiciendo mientras perdía.

"Oh, ¿Andrés terminaste? Ven y siéntate. Necesito ayuda." Ordenó Serena sin aceptar negativas.

El humor de su jefa era muy difícil de llevar y era una de las razones por la cual nadie quería acercarse a este lugar.

La otra razón, era que, si atrapaba a alguien, no lo soltaría hasta que esa persona la llevara a la victoria.

En cuanto si no lo lograba… Andrés como no deseaba estar en esa posición, obedeció y se sentó al lado de ella.

Como jugar era una forma de alejar el estrés y entretenerse, Andrés de vez en cuando jugaba los diferentes juegos que su jefa le gustaba.

Ambos comenzaron una partida y…

"Ja, al parecer ha vuelto mi racha." Murmuró Serena cuando ganaron la primera partida.

Por más problemático que fuera Serena, una vez que alguien la ayudaba a divertirse, era posible obtener unos puntos.

Ambos siguieron jugando por varios minutos y las victorias sucesivas continuaron, llevando a que Serena diera una gigantesca sonrisa.

Lo agradable era que su jefa no tenía un alto nivel de 'clasificatoria' en los juegos, y la mayoría de las veces terminaba jugando con jugadores de bajo nivel.

Eso ayudaba a que fuera fácil ayudarla, aunque algunas veces era igual que llevar una roca que no hacía nada.

Así que había que ser bastante bueno en la tarea.

"Por cierto, jefa, ¿este fin de semana puedo tomarme unas vacaciones?" Preguntó Andrés luego de una victoria y al ver que Serena lo miraba, aclaró. "Tengo otra misión y quería centrarme en esa tarea."

Serena le dio un vistazo y asintió con una sonrisa.

"Claro. Sacaré todo tu trabajo y lo pasaré para la semana que viene." Respondió Serena en calma.

Andrés asintió bastante contento y siguió jugando.

Nunca había viajado a Asia y tenía que admitir que estaba emocionado.


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