A a la mañana siguiente, un mensajero llegó para de estos decir que al final Víctor marcha a la mañana, por lo que Lucas se preparó, se despidió y se marchó con su tío Martin quién lo acompaña en el viaje. Todos quedaron muy conmovidos. Mary lo acompañó en su despedida.
Ya eran las doce del medio día. Los empleados se pusieron a mirar si está todo correcto en la casa. El jardín está repleto de flores de todos los tipos, sillas y mesas con carpas y llenas de comida y bebida. Hay estatuas y una pequeña fuente. Por dentro en la casa, la sala principal es donde podrán los invitados charlar, beber y comer y disfrutar de la noche, además de estar fuera disfrutando de las vistas. La sala principal está muy decorada al estilo barroco, muy iluminada, con bastantes cuadros reconocidos. También hay una sala de baile enorme en la casa que nadie ha utilizado desde hace años. La sala la han decorado con tonos clásicos pero barrocos a la vez, hay varios cuadros de pintura, algunos retratos familiares, algunas esculturas etc. Han contratado músicos clásicos, cuáles van a llegar a la tarde y ambas familias están muy ocupadas recogiendo sus vestidos y sus trajes muy elegantes. Esta noche va a ser muy grande, el baile comienza a las ocho.
El día es caluroso, por lo que será una noche agradable. En cuanto al vestido de la comprometida, es con vuelo, dorado claro a juego con sus rizos de oro, con elementos blancos y una máscara blanca bastante elegante y llamativa. Barton e Ethan por casualidad llevan el mismo traje y mascara y Mary con su vestido rojo sangre, algo que ya es típico en ella....
Tomándose un tiempo, Mary se encuentra en el jardín. Mirando y oliendo las flores, tocando y disfrutando de las vistas hermosas, del aire cálido y fresco, respirando aire puro. Cerca de los árboles escucha a alguien. Curiosa se fija, pero con consigue ver nada. Pasados dos segundos vuelve a escuchar algo.
_¿Hola? - dice ésta- Seas quién seas, que me hayas observado, sal ahora mismo.
De pronto una voz grave masculina sale de los adentros del bosque.
_Si lo quieres saber, ven mañana mismo a media noche aquí, en este mismo lugar - dice la voz en susurros - Mary se asuta y da un paso atrás.
_¿Qué, cómo...? ¿Quién eres...? No voy a...
_Mañana. Aquí. A medianoche, si quieres seguir viviendo - después de haber dicho eso, esa presencia masculina desapareció por completo, nonlo huele ni lo oye. ¿Quién es aquella persona detrás de los árboles? ¿Será quién me haya estado observando todo este rato? Se pregunta Mary. Intranquila se va del jardín.
En toda la tarde no pudo evitar pensar en aquella escena del jardín. Cómo y por qué. Qué le pasará si no acude a la cita. Aún así, siguió haciendo lo que los demás empleados hacían, ya son las ocho menos diez, faltan diez minutos para que lleguen los invitados y Mary aún colocando aperitivos por toda la casa, sobre todo en la sala de baile, que tiene dos pisos. Esta sala esta colocada bajo la casa, paredes doradas y un suelo pulido con unas escaleras enormes blancas de mármol. En el centro ya están colocados los músicos a un lado. El salón es redondo, en ambos pisos hay mesas llenas de aperitivos frescos y vino.
Una vez, terminado de hacer lo último, estuvo con algunas criadas y sus dos protectores charlando un rato. Ya a los primeros diez, quince minutos, llegaron invitados, a la media hora, casi la sala está llena. Siguen llegado invitados. Las dos familias se encuentran saludando. Ethan llevando una rosa blanca en un bolsillo que hace juego con su máscara y traje oscuro, esta charlando con su amigo, el cual lleva el mismo traje pero sin rosa y una mascara negra el mismo modelo. Parece que pelearon, ya que ni se dignan a mirarse. Alice se encuentra hablado con amigas suyas y el resto conversando entre ellos. La música ya está sonando. Con una hora de baile, la sala está completa. Solo falta Mary, quien en su cuarto, criadas y sus protegidos la ayudan a prepararse.
Una vez lista, sale de su cuarto.
_Hija, disfruta esta noche- dice Lourdes- Estaremos cerca. Ten cuidado.
_Gracias- la joven les da un beso a los dos y va hacia el salón de baile. Y ahí está, de pie junto a las escaleras pensando si es buena idea bajar o no.