"¡Kurama-kun!" - exclamó Mabui al ver como un destello rojo aparecía frente a ellas, solo para que luego de unos segundos la silueta del pelirrojo apareciera.
"¡No hay tiempo para hablar!¡Ve donde Yugito!" - exclamó Samui. Ella había perdido la compostura luego de lo que había pasado y ahora no podía ocultar la preocupación que sentía.
"Ok, voy a dejar un clon para ayudarlas a tratar a Omoi y Atsui" - dijo Kurama mientras creaba un clon y empezaba a correr en dirección donde la Jinchuriki de hermana estaba peleando.
"Buena suerte..." - murmuró Mabui mientras se concentraba en el clon que estaba tratando a sus compañeros de viaje - "¿Cómo están?"
"Heridos, más de cuatro costillas rotas y sus Tenketsu recibieron un buen castigo por el sobre uso de chakra" - respondió clon Kurama mientras fruncía el ceño - "Nada que Tsunade-chan no pueda curar, aunque esto demorará un buen tiempo"
"Al menos ellos están fuera de peligro" - suspiró Samui mientras sacudía la cabeza para así volver a su personalidad normal - "Gracias"
"No tienes que darme las gracias" - respondió el clon del pelirrojo mientras negaba con la cabeza - "En fin, ahora que ellos están fuera de peligro, es su turno"
"No te preocupes por nosotras, solo estamos agotadas" - respondió Mabui mientras miraba a sus amigos - "Ellos fueron los que recibieron todos los ataques por nosotras"
"Por cierto, Karui está bien" - dijo Kurama mientras miraba a las chicas, solo para ver como sus expresiones cambiaban a una de traición porque recién ahora recordaban a su amiga caída.
"Me siento como la peor amiga del mundo por recién pensar en ella" - murmuró Samui mientras suspiraba con pesar.
"Ni me lo digas" - suspiró Mabui mientras las dos mujeres se lamentaban por la falta de atención a su amiga.
* * * * *
". . ." - Yugito mir�� a sus oponentes con frialdad mientras sentía como el fuego azul empezaba a cubrir cada vez más su cuerpo.
"Veo que decidiste dejar de moverte..." - dijo Kakuzu con neutralidad - "¿A caso ya no intentarás escapar?"
"Y dice que yo soy el idiota" - respondió Hidan con desdén - "Es obvio que ella está haciendo tiempo para que sus compañeros escapen, un acto noble que hace que su alma sea más valiosa para Jashin-sama... una lástima que no voy a poder tomarla porque ella morirá con el jutsu de extracción"
"¿Algo más que decir?" - preguntó Kakuzu mientras ignoraba las palabras de su compañero de equipo.
"Solo que deberían de casarse de una buena vez, o al menos dejar de actuar como pareja casada" - respondió Yugito con sarcasmo mientras hacía enfurecer a sus oponentes - "Aunque ahora me pregunto... ¿quién es el activo, y quién es el pasivo de su relación?"
"Ok, tenía pensado en dejar tu cuerpo intacto pero ahora voy a disfrutar arrancando tus extremidades" - dijo Hidan con frialdad.
"Supongo que tú eres el pasivo" - respondió la Jinchuriki.
"¡Resiste un poco más, Yugi-Nya!" - exclamó Matatabi desde su sello - "¡Kura-Nya está cerca!"
"¡Bien!¡Es la primera buena noticia que recibo!" - exclamó la chica rubia mientras las llamas que la rodeaban empezaban a vibrar de la emoción - "¿Cuanto tiempo más?"
"Dale poco más de un minuto" - dijo Matatabi con emoción mientras observaba con desdén al Dúo Inmortal.
"Ok, voy a dar todo entonces" - respondió Yugito con seriedad mientras sus ojos cambiaban de color con pupilas rasgadas - "¿Estás lista, Matatabi?"
"¡Por supuesto, Yugi-nya!" - exclamó la Bijuu - "¡Demostrémosles que no somos los ratones sino el gato!"
"¡Haaaaaaaaaaaa!" - Yugito empezó a liberar todo su chakra mientras las llamas cada vez se concentraban más en su cuerpo.
"Creo que no es mala idea el cortar las extremidades de esta pres" - dijo Kakuzu con el ceño fruncido - "Ahora que lo pienso... ¿las extremidades de un Jinchuriki tendrán un buen precio en el mercado negro?"
"Deja eso para después" - dijo Hidan con el ceño fruncido mientras apuntaba su guadaña contra la Jinchuriki - "Ella está haciendo su último esfuerzo y el Kyubi está cerca"
"Lo sé" - respondió el mercenario Inmortal.
"¡Sincronízate un poco más conmigo, Yugi-nya!" - gritó la Bakeneko - "¡Deja que las llamas ardan, Yugi-Nya!"
"¡Eso haré!" - Yugito rugió mientras las llamas azules estaban haciendo que la zona pareciera distorsionarse por el creciente calor - "¡Roar!"
Las llamas azules lentamente empezaron a expenderse, formando un enorme capullo alrededor de la chica que se rompió casi de inmediato, mostrando la apariencia de un enorme gato hecho de llamas azules con marcas negras, ojos de diferente color, siendo uno azul y el otro amarillo, y dos prominentes colas detrás suyo - "¡ROAR!"
"¿Por qué dejamos que se transformara?" - preguntó Hidan mientras miraba a su compañero.
"¿Y a quién le pregunto yo eso?" - respondió Kakuzu mientras fruncía el ceño porque era extraño que no detuvieran a la chica antes.
"En fin, ya tenemos al objetivo en frente, solo tenemos que..." - dijo Hidan, solo para ser interrumpido por una enorme garra azul que lo mandó a volar.
"Ok, ella es rápida" - murmuró el mercenario inmortal mientras calculaba que solo le tomó 0.2 segundos en recorrer 100 metros con su velocidad base.
"¡ROAR!" - Yugito le respondió con un rugido mientras las llamas azules rodeaban la zona de batalla, como si estuvieran diciendo que solo uno de los lados saldría de este lugar con vida.
"¡Voy a sacrificarte, perra!" - exclamó el Sacerdote loco mientras volvía donde estaba la Bakeneko. Él tenía todo el cuerpo destrozado y su carne quemada por el ataque, aunque lentamente empezó a regenerarse, aunque eso no quitaba lo asqueroso de la escena - "Voy a disfrutar el desmembrarte, perra"
"Es una gata..." - respondió Kakuzu con sarcasmo.
"¡Se lo que es!" - exclamó Hidan con furia - "Terminemos con esto rápido. siento el escalofrío en mi espalda crecer cada vez más, eso solo significa una cosa, que Uzumaki Kurama está cerca"
"Cierto..." - murmuró Kakuzu mientras tomaba un poco de aire. Cuando uno vivía por tanto tiempo, uno desarrollaba un sexto sentido para momentos donde la muerte estaba cerca - "Jiongu..."
Una gran cantidad de hilos negros empezaron a salir debajo de la ropa de Kakuzu, destruyéndola completamente mientras estos empezaban a tomar la forma de 4 entidades diferentes que rodearon a su maestro.
"¡Roar!" - Yugito rugió nuevamente mientras observaba con frialdad a las cuatro entidades. Todas eran extrañas pero al mismo tiempo tenían una misma particularidad, todas tenían una máscara con formas y colores diferentes.
"Vengan..." - murmuró Kakuzu mientras las cuatro bestias volvían a su cuerpo, tomando la forma de una gran melena aunque la Bakaneko podía notar como los 'ojos' de las máscaras parecían estar observándola atentamente.
"¿Te vas a quedar mirando?" - preguntó el mercenario inmortal mientras miraba a su compañero.
"Sabes mu y bien que gracias a la bendición de Jashin-sama, yo perdí todas mis afinidades elementales" - respondió Hidan con el ceño fruncido.
"Cierto" - asintió Kakuzu - "Supongo que voy a usarte como escudo humano.
"¡Oye!" - dijo Hidan con molestia solo para sentir como la temperatura aumentaba - "¡Tch!"
"Suiton: Suiryudan no Jutsu" - exclamó Kakuzu mientras que de la máscara celeste salía un dragón de agua, solo para continuar con sus sellos de mano - "Doton: Doryudan no Jutsu"
"¡Roar!" - Yugito rápidamente dio un salto hacia el lado para esquivar el dragón de agua, solo para desparecer del lugar cuando vio el segundo dragón que venía hacia ella.
"Ok. ella ahora es más escurridiza" - dijo el mercenario inmortal mientras fruncía el ceño - "Katon: Zukokku (Liberación de Fuego: Trabajo Duro Inteligente)"
La máscara de tigre de Kakuzu rápidamente lanzó una bola de fuego que Yugito intentó absorber con sus llamas, solo para sentir como esta explotaba y la mandaba a volar.
"Imbécil" - dijo Kakuzu con desdén - "Ese Jutsu es prácticamente una gran concentración de explosivo concentrado..."
". . ." - Yugito lo miró en silencio mientras las llamas volvían a reunirse para dejar su cuerpo como si nada hubiera pasado, aunque los dos Nukenin podían notar como las llamas que formaban al enorme gato, estaban cada vez más apagadas, demostrando que la chica a duras penas estaba resistiendo la pelea que a pesar de haber sido corta, había hecho que ella gastara chakra sin control.
"¿Cuanto más puedes durar?" - preguntó Hidan mientras corría contra el Bakeneko con frialdad.
"Lo suficiente como para disfrutar ver sus rostros llenos de desesperación" - respondió la chica con una voz que parecía ser una mezcla entre la de Yugito y Matatabi. Ella rápidamente retrocedió mientras hacía Kage Bunshin para distraer a su atacante - "Solo unos segundos y todo terminará"
"Tienes razón en algo, esto pronto terminará" - respondió Kakuzu mientras lanzaba un nuevo jutsu de fuego explosivo contra la chica.
"Ya aprendí que esas llamas no pueden absorberse" - dijo Yugito con desdén mientras usaba el Shunshin para aparecer detrás de Kakuzu, solo para retroceder a gran velocidad al ver como las máscaras la miraron con frialdad.
"Movimiento inteligente..."- dijo Kakuzu mientras volteaba la mirada - "Uno segundos más y te habría bombardeado con todos mis jutsus..."
". . ." - Yugito se quedó en silencio mientras sentía como su cuerpo estaba cada vez más débil por el cansancio.
"Tengo que admitir que eres el Jinchuriki más problemático que hemos casado" - dijo Kakuzu con seriedad.
Yugito solo le respondió con una sonrisa mientras su cuerpo se encogía, mostrando su apariencia normal mientras caía al suelo agotada.
"¿Por fin te rindes?" - preguntó Hidan con desdén, solo para perder la sensación de su brazo derecho - "¿Eh ¡AAAAAAAAAAAARGH!"
"Veo que llegué a tiempo..." - resonó en el lugar la fría voz de Kurama - "Pero no se preocupen... ahora que llegué, les voy a dar toda mi atención... regocíjense porque su dolor apenas comienza"