—¿No quieres seguir escuchando las historias? —le preguntó Yu Yuehan.
—Estaba en un error. —Nian Xiaomu se acobardó después de sólo un segundo.
—Mi madre tenía el tipo de sangre RH negativo, ella sufrió una hemorragia importante al momento de darme a luz y los doctores casi no la pudieron salvar. En vista de que el chance de sufrir hemólisis* era mucho mayor con un segundo hijo, mi padre le impidió a mi madre tener otro hijo después de mi nacimiento.
Yu Yuehan pareció haber pensado en algo gracioso y las comisuras de sus labios se curvaron hacia arriba.
—Si tuviera que decir esto con las palabras de la Abuela, mi padre era como un mastín tibetano muy vigilante: él se apresuraría al lado de mi madre de inmediato si detectaba algún signo de perturbación. Siempre estaba cerca de ella, preocupado de que algo pudiera sucederle. Ese también fue el momento cuando la Familia Yu comenzó a notar la existencia de las personas con tipos de sangre especiales.