¡Madeline era realmente una fuente de problemas!
Marvin podía sentir que entre las fuerzas que reunía en las afueras de Ciudad Costa del Río, muchos hombres la admiraban. Algunos nobles de un territorio vasallo incluso se apresuraron a ayudar, trayendo consigo a muchos de sus caballeros familiares.
Pero estas personas ni siquiera recibieron una mirada de Madeline.
En cambio, ¡fue el desconocido Marvin quien en realidad recibió la invitación personal de la Señor de la Ciudad y pudo viajar así en su carruaje!
Esto definitivamente puso a la gente celosa.
Es seguro decir que Marvin quería evitar estar en el centro de atención. Pero él miró a estas personas y en su mayoría eran chicos buenos para nada. Ellos no plantearían un problema.
Quería conocer el plan de Madeline, por lo que no dudó y entró directamente al carruaje. Madeline chasqueó los dedos con una sonrisa en su rostro. El carro se cerró automáticamente y nadie sabía qué pasaría dentro.