Capítulo 1: Prólogo
Los ángeles y los demonios nunca se llevaron bien. Pero la situación actual es preocupante. Los miembros del consejo se reúnen con el Gran Maestro Menenker a discutir un asunto de suma importancia.
- Lo siento mucho, ya han pasado varios milenios desde que llegué, ya no me siento capaz de seguir liderando este lugar - dijo con voz ronca el Maestro Menenker.
- ¿A que se refiere, señor Menenker? - preguntó uno de los 15 ángeles reunidos en la Gran Sala del Saber,(Roger, un joven ángel que destacó por su sentido de la justicia).
- Me refiero a que ya no soy capaz de poder seguir aguantando esta situación por mucho más tiempo, Roger, ya es hora de buscar al nuevo titán de los cielos - dijo el Gran Maestro Menenker
- Pero señor, este es el peor momento para retirarse, los demonios nos han declarado la guerra y necesitamos a alguien que nos lidere en las futuras batallas - dijo el general Keller sorprendido con las palabras del señor Menenker.
- Por eso estamos reunidos aquí hoy - dijo Menenker - Activaremos el protocolo E-44-A, para buscar el nuevo titán, por lo que necesitaré que vosotros atraséis todo lo posible el encuentro bélico con los demonios, busquemos la manera de que todo esto acabe bien, ¿alguna duda? -
- ¡No señor! El protocolo estará en marcha ahora mismo, pronto encontraremos al elegido - dijo Roger que a favor de todo esto acepto la propuesta del Maestro - ¿Alguno tiene algo que decir con respecto a esta decisión?
Se hizo un breve silencio en la sala. Nadie tenía nada que objetar, el Maestro Menenker es un hombre sabio así que confiaban en su plan.
- Entonces comencemos en este mismo instante... Podéis retiraros ya - dijo Menenker - Pero... Roger, quiero que te quedes un momento -
- ¿Ocurre algo señor? -
- Necesito a alguien que reciba e instruya al nuevo titán -
- ¿Acaso ya sabe quién será ese sujeto?
- Si, pero él sigue en el mundo de los vivos, pero, pronto llegará a nuestro reino.
- Entendido señor, pero, ¿puedo saber de quién se trata? -
- Lo siento, eso lo descubrirá muy pronto, solo quiero que me prometas que una vez que lo conozcas no te dejes engañar por su apariencia...
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