Los dos dragones compartieron un beso, Archer sostenía a Sera por su trasero firme mientras se volvían aún más apasionados.
Después de besarla Sera echó la cabeza hacia atrás y sonrió de nuevo mientras hablaba—. Estoy tan feliz de que me rescataras ese día hace tantos años.
Cuando la escuchó hablar él sonrió mientras asentía—. Yo también, Seraphina —dijo él—, ¿quieres comer algo de comida zeniana?
Pero ella lo ignoró y atacó su cuello de nuevo. Archer rodó los ojos mientras lleva a la pelirroja que usaba sus dientes afilados para morderlo.
Mientras caminaba le habló sacudiendo la cabeza con una sonrisa—. Nunca vas a cambiar esta costumbre tuya.
Camino al balcón y notó el mal tiempo, el viento y la lluvia azotaban fuertemente.
Cuando Sera sintió la lluvia caer sobre ella, dejó de atacarlo y miró alrededor. Saltó y se estiró.
Archer notó que su camisón se estaba mojando por la lluvia, así que sacó una capa que tenía y la envolvió alrededor de ella.