Una semana después...
Lux, Cai y Keane se encontraban en la entrada del Dominio de los Caídos junto con los miembros de la Hermandad del Dragón de la Tormenta.
Nero ya había sido informado de su misión de apoyar a Lux. El apuesto joven no mostraba signos de insatisfacción en la superficie, pero en el fondo, no le gustaba la idea de hacer equipo con Lux. Sin embargo, dado que esta era la orden de los superiores, no tuvo más opción que asentir con la cabeza y acordar obedecer sus órdenes sin fallar.
—No los he visto a los tres en mucho tiempo —dijo Einar mientras se acercaba a Lux con una sonrisa. En el pasado, el orgulloso Príncipe Bárbaro había luchado con el Medio Elfo, quien se había disfrazado de un adolescente humano rechoncho en el torneo.