Sénior Bai distrayéndose era algo muy aterrador, ya que cada vez que él se distraía, había un 80% de probabilidades de que activara la habilidad de 'caer al suelo.
Esa habilidad de verdad era espeluznante. ¡Incluso si fuera liberada en un mundo mágico, estaba al nivel que le seguiría a los hechizos prohibidos!
Lo que era más aterrador era que no había forma de saber cuándo Sénior Bai se distraería, por todo lo que uno sabe, él podía estarse riendo y charlando contigo en un momento, pero en el siguiente, él de repente se distraería y se perdería en sus pensamientos.
Justo como ahora, él aún estaba riéndose cuando de repente entró en trance.
—Vamos a chocar, Sénior Bai, vamos a chocar, rápido, despierte y vuelva… ¡Ahhhh, ya no podemos esquivarla! —Song Shuhang quería llorar con tantas ganas.
Al mismo tiempo, él vio al objeto contra el que iban a chocar tan claro como el día.