"¡El Protocolo del Imperium Secundus! Sabes también como yo que fue concebido en una época que estamos contra las cuerdas, al borde del abismo, Kamier. Solo por capricho se dejó por mano del Canciller".
"Se muy bien Helios, pero ahora mismo necesitaremos en esta situación. La idea de Janus fue necesaria para esta situación única que estamos en este nuevo Universo. Marcus quería preservar a la Humanidad de cualquier forma, incluso lejos de la Vía Láctea si se daba la ocasión".
"Y ahora eres el Imperator Regis, una vez el Lord Regente y Lord Comandante de nuestra Gran Alianza. Si hay alguien digno entre nuestros hermanos eres tú para gobernar el nuevo Imperio de la Humanidad. Un verdadero segundo imperio de la humanidad".
"¡Una carga que me corresponde Helios! Pero Cadmon, Jayden, Tiberius, Marcus, Edgar, Horus o tú serían también gobernantes para liderar a la humanidad si yo no estuviese. El liderazgo recae en todas nuestras manos, unos más que otros como lo sabemos hermano".
Conversación entre el Señor de la Fortificación Helios Dorn y el Emperador de la Humanidad Kamier Akimara Draconus sobre el Protocolo SECUNDUS.
…..
Vía Láctea
Segmentum Solar
Sector Sol
Sistema Sol
Terra
Sanctum Imperialis
Año 585 M68
13 de Diciembre
Ha pasado poco más de un mes desde el primer contacto entre la Gran Alianza Terrana y el Colectivo Orion. En ese tiempo los grupos diplomáticos de ambos gobiernos fueron enviados a los respectivos mundos capitales para los cimientos de las futuras relaciones entre dos partes divididas de la humanidad, si la teoría del Canciller planteó a sus cuatro Pretorianos presentes en Terra fuese correcta.
Reasignados a un breve descanso del campo de batalla, los futuros ejecutores de la humanidad, por lo que pasaron reabasteciendo a las fuerzas de sus propios grupos respectivos que eran breves flotillas de naves de la Armada, el Mechanicum y Astartes por igual forma.
Los Filos Solares han cumplido bien su función, con las fuerzas del Covenant desperdigadas por el Segmentum Pegaso en un esfuerzo de contrarrestar sus ataques relámpagos a sus convoyes de sus suministros detras de lineas enemigas, provocando cercos de las actuales líneas de batalla de en los mundos fortalezas que están siendo reforzados con divisiones procedentes de toda la galaxia.
Eso pensó Kamier mientras caminaba por una sección del Sanctum Imperialis destinada a albergar a los Pretorianos, era bastante cómoda considerando el enorme espacio que ocupaba del tamaño de un continente entero de decenas de miles de kilómetros de largo desde su construcción en el 45° Milenio durante la revelación del Canciller a la humanidad.
Recientemente el Honor de Macragge arribo al Mundo Trono desde el Segmentum Atlantia, su hermano de armas Marcus Guilliman quería hablar acerca de algo con él en persona y vino con su buque personal para que también sea modernizado por los Artificers lunares en uno de los astilleros del anillo defensivo.
Habiendo descendido al Sanctum Imperialis con su escolta personal de guardias de Ultramar, Marcus se encerró en una de las salas de la sección dedicada a su tipo, siendo que no ha salido en más de tres días según hoyo por uno de los Templarios que estaban con él en Terra en este momento.
Siguiéndolo estaban cuatro de sus Templarios más experimentados, capitanes de la Guardia del Solsticio, y campeones por derecho propio en Harvest. Eliminado cada uno de ellos a innumerables olas de Xenos de la Teocracia del Covenant en el mundo agrícola de la Humanidad.
Camino por unos minutos más hasta llegar a la sala en concreto que su hermano debería estar, allí parados fueran estaban su guardia de honor y algunos Ultramarines también presentes.
Le dieron un saludo tradicional con el puño en el pecho, justamente sobre donde estaba el corazón. Dando una sonrisa como respuesta al gesto de los guerreros engullidos por la batalla, le dejaron pasar al verificar sus credenciales necesarias.
Adentro pudo notar al menos una docena de tabletas con algunos papeles físicos con notas escritas con sumo detalle, además del único Lord de Macragge sentado justamente en una de las sillas inverso en una tableta mientras parecía concentrado en escribir algo en ella, tanto que no noto cuando su hermano se le acercó para despejarlo de su concentración.
"Hermano" llamó Kamier y Marcus volteo su cabeza tan rápido que Kamier creyó que oyó el sonido del hueso endurecido de Adamantium partirse por tal movimiento brusco, pero seguro que fue su imaginación.
"Hermano" devolvió Marcus el saludo mientras dejo la tableta que estaba en la mesa negra de la sala.
"Veo que has estado bastante ocupado".
Kamier miro más a detalle lo que su hermano ha estado trabajando sin descansar mucho los últimos días. Tomó una de las tabletas, notando al leer que era un borrador acerca de un tipo de protocolo que parecía ser acerca de un plan de supervivencia.
Miró a su hermano con el ceño fruncido ante eso."Estás creando un protocolo de emergencia en caso de que las cosas se vayan a lo peor posible, ¿o me equivoco?".
"No lo haces. Las simulaciones de las IAs clase Titán dan como objetivo que dentro de quinientos años nuestra civilización estaba al borde la extinción o menos tiempo, la Teocracia del Covenant tiene varias veces el tamaño de nuestras flotas y ejércitos, y aunque poseen solo una galaxia, sus números son por lo menos cien veces a nuestra actual población, por suerte tenemos formas de evitarlo si seguimos con el plan que Helios y otros están trazando" respondió Marcus ya completamente despierto de su insomnio.
Una imagen de luz dura de su galaxia apareció y de la galaxia del Covenant aparece también. Líneas de rutas desliespaciales Covenant aparecieron entre las dos galaxias, rutas hackeadas de los datos de las naves Covenant por las IAs Terran.
Algo que la humanidad poseía en ventaja a las IAs Xenos que no eran tan avanzadas como las suyas. Gracias a la sabiduría del Canciller en el aprendizaje de tecnología Alteran recuperada acerca de la inteligencia artificial que ya la avanzada IA de la humanidad pasó más allá de lo que los científicos especularon normalmente en miles de años para las IAs humanas de los terranos.
"Se han desarrollado al menos veinte mil años más adelante que nosotros por la tecnología Forerunner en Andrómeda, y aunque estamos casi igualados en términos tecnológicos, la leve diferencia nos tomará algún tiempo alcanzar. Tiempo que lamentablemente no tenemos, el cerco actual solo será unos pocos años a lo mucho antes de que continúen de nueva cuenta su avance más profundo en nuestro territorio" recalcó Marcus mientras que las líneas de batalla actuales se mostraban en la Vía Láctea.
"Lo se muy bien eso Marcus, yo mismo he hecho mis propios cálculos en privado. Concuerdo contigo sobre que necesitaremos un medio para ganar esta guerra o al menos ganar el tiempo necesario para poder reconstruir nuestras fuerzas y contraatacar a las fuerzas enemigas en los Segmentos Pegaso y Atlantia" señaló Kamier al holograma de la Vía Láctea.
Marcus asintió de acuerdo con el punto de su hermano avaloniense." También creo eso, y creo que la ayuda de los nuevos humanos de Magallanes sería lo que necesitamos".
Ahora Kamier estaba casi encima de su hermano que no se inmuto ante la acción de su hermano.
"Son jóvenes que apenas han visto de lo que el Universo es capaz de ofrecer Marcus, no se les ha informado de la actual guerra en curso por orden del Canciller mismo. Y tu quieres involucrarlos en nuestro conflicto contra la Teocracia, eso sería en contra de lo que juramos defender en cuanto hicimos nuestro juramento en nuestra graduación".
Marcus levantó su mano en señal de paz."No sugiero que los unamos al conflicto hermano, pero deberías saber tan bien como yo que las fuerzas del Covenant no discrimina de que poder sean originarios las personas. Sabemos que el Colectivo debería tener unos pocos mundos a lo mucho en el Segmentum Atlantia, tal vez cerca del Segmentum Pegaso a lo mejor. Y esos están bajo ataque del enemigo ahora mismo".
Puntos azules se recalcaron dentro de la Franja Oriental de la Vía Láctea, donde estaba el Sector de Ultramar o Regnum Ultramar como se le conocía por sus habitantes de trillones en sus cincuenta mil mundos bajo su bandera, con Macragge como su capital.
Un reino próspero que solo era superado por el Regnum Avalon en el Segmentum Solar con cuatrocientos veinte mil mundo bajo el mando directo de la familia Akimara Draconus. Cuyos dirigentes eran las actuales Matriarcas Mavis y Alfia, con su único heredero siendo el Pretoriano y próximo Lord, Kamier Akimara.
Kamier no ha visto a sus madres en quince años, los deberes de retrasar los avances enemigos en los sistemas del Segmentum Pegaso han sido laboriosos para lograr aquello los últimos ocho años desde que los Filos Solares fueron orquestados por el Gran Mariscal.
Por lo que no ha se ha visto físicamente con ellas, pero ha intercambiado uno que otro mensaje en estos duros años de guerra de guerrillas estelares mientras lideraba sus fuerzas en contra del Covenant en muchos mundos de diferentes poderes fundadores.
Suspirando, Kamier se apartó de su hermano, condujo los fotones de la luz presentes en la habitación y formó una representación de los sistemas que el Colectivo poseía en la Vía Láctea, cientos de años luz lejos del territorio terrano.
"¿Dime entonces cómo se unirán hermano, a nuestra causa? ¡Un ataque del Covenant sería la opción más plausible que veo, y supongo que tú también lo has visto juzgando por los planes que puedes formular con tener solo poco información disponible, un rasgo que pocos de nosotros poseemos!".
"Los dos sabemos que el Covenant podría rastrear su firma FTL o colocar rastreadores en una de sus naves, pero lo primero me parece más plausible que lo segundo. Sus sensores como los nuestros pueden detectar las firmas Warp que dejan las firmas de los motores primitivos de la deformación espacial" señaló esta vez Marcus mirando el mapa de los sistemas que su hermano hizo.
El motor Warp era el primer FTL que se crea en una civilización espacial, como los terranos han visto en muchos mundo jóvenes que han cuidado bajo su cuidado y protegido por el pedido del Canciller desde hace más de quince mil años.
"¿Cuanto antes de que el Covenant se encuentre con una de sus naves?" pregunto Kamier, ya sabiendo la respuesta en su mente luego de unos nanosegundos de cálculo rápido.
"Semanas en el mejor de los casos, días en el peor hermano. Pero una vez de que se haya avistado uno de sus buques, no dudaran en ir a aplastar a los mundos de esa humanidad" el tono sombrío de Marcus fue directo lo que Kamier temía más.
No quería que los jóvenes humanos sufrieran por el secretismo de los Terranos, pero ir en contra de las órdenes de su Excelencia no era una opción para él. Le inculcaron durante su entrenamiento la lealtad sobre todo a la Humanidad.
Así que aún había una opción si lograba conseguir lo que tenía en mente funcionase.
"Si me prestas tu ayuda Marcus, tal vez logremos salvar a unos cuantos jóvenes del enemigo" Kamier procedió a explicar a su hermanos su idea.
Marcus quedó estupefacto ante la idea de su hermano, pero vio que no quedaba mejor opción a la hora de prevenir fuertes desastres más allá de la mano del Covenant a la hora de evitar el acristalamiento de los mundos de aquella humanidad joven.
"Te ayudaré hermano. Siempre juntos como hicimos nuestra promesa. ¡Terra aeternum!".
"¡Terra aeternum!".
Con eso Kamier salió de la sala rumbo a una parte del Sanctum Imperialis donde estaría la persona que necesitaba su permiso para llevar a cabo su labor. Con los Templarios a cuestas, los capitanes del solsticio sabían que a su señor se le había ocurrido una idea que sería peligrosa pero de que lo seguirán a toda costa, incluso a las partes más profundas de la Disformidad si así fuese.
Como se demostraría en el futuro.
Pasando por un transportador, Kamier llegó a las salas militares del Sanctum, corrió rápidamente por los amplios pasillos de mármol blanco y dorado que daban un diseño a gusto para la vista del personal militar.
Llegando a la puerta del Gran Mariscal, Kamier pasó los procedimientos de seguridad en meros segundos y entró en la oficina de su Maestro que estaba tomando un poco de chocolate caliente.
Miró a uno de sus alumnos con la ceja alzada, en señal de lo que quisiera de su persona.
"Lamento molestar su tiempo libre maestro, pero quisiera pedirle un favor".
...
Buque insignia de la 29º Flota Expedicionaria del Colectivo
Órbita alta de Adumbria
20 de Enero
Eleonora estaba sentada en la silla del capitán mirando a través de su pantalla de mando los reportes diarios de los jefes de cada cubierta. Desde la vista al mundo capital terrano, ella y Asuna se habían reasignado a la colonia de Adumbria para poder prosperar de la capital planetaria, Skittrefall que poseía el mayor espacio puerto de todo el planeta.
Suspiro mientras pensaba en lo que el futuro deparaba al futuro cercano, el comercio y intercambio con los terranos seria de mucha ayuda para el progreso de las colonias del Colectivo en esta galaxia, con los suministros de su galaxia natal que tardaba semanas al cruzar el vacío intergaláctico para llegar hasta aquí.
"Reporte del escuadrón dorado señora, detectaron anomalías radiactivas justamente a cinco años luz de distancia" dijo uno de los tripulantes del puente a Eleonora.
"Codificarlos con la base de datos" ordenó Eleonora al sentir que sus sentidos e instintos estaban en máxima alerta por algo malo que estaba por ocurrir.
La IA compara los registros de la base de datos de las radiaciones conocidas por el Colectivo en su base de datos. Llegando a un resultado en meros segundos de búsqueda.
"La radiación coincide con la radiación de los agujeros negros y los portales deslispaciales usados por los Terranos" reporto la IA del Acorazado clase Hammond.
"Su próxima visita no será hasta dentro de cinco días" Eleonora revisará la lista de las próximas visitas programadas de los embajadores Terranos a los sistemas de los oriones. "No son los Terranos. ¡Alerta Roja en todas las naves! Quiero los escuadrones de cazas y bombarderos listos para salir cuanto antes. Cargar los Yamatos a máxima potencia para una ronda colectiva donde salgan los portales".
A la orden, la tripulación se puso manos a la obra, transmitiendo las órdenes por los canales de comunicación internos y externos, cargando los escudos al máximo y preparando el cañón Apocalypse para su disparo.
"Comandante, el Almirante pregunta el porqué llamó una alerta general sin su permiso" dijo Limlisha que estaba en su estación cerca a Eleonora.
"Dile que pronto nos atacaran y que se prepare para…" no pudo terminar de hablar cuando un grito resonó en el puente del Acorazado.
"¡Múltiples grietas Slipspace detectadas en el sector India-072! 11 Naves detectadas de patrón desconocido, seis están categorizados como Acorazados" gritó un oficial de sensores histérico y shockeado por tal flota de invasión.
"Fuego" ordenó la joven Viltaria.
Coordinado desde el Pacificador, una serie de rondas de plasma azules de gran intensidad fueron disparadas hacia las naves Covenant, teniendo las más grandes (el de 20km y el 30k km) como objetivos prioritarios designados por los sistemas de fijación de objetivos avanzados de los Múltiples Acorazados y Grandes Cruceros.
Estrellándose con la fuerza de megatones de potencias cada uno en los escudos de plasma duros de los once navíos del Covenant. Sumergiendola en un mar de plasma y radiación que interfiere en menor medida con los sensores Covenant de tipo subespaciales, pero no fue mucho problema para sus IAs lograr traspasar las interferencias y demostrar su supremacía absoluta sobre estos humanos.
Rayos de plasma super pesados fueron desatados desde el "acorazado" y sus escoltas de cruceros de batalla y el único pesado, hacia las naves humanas de otra galaxia. Atravesando navíos como si los escudos no estuviesen en primer lugar, en algunos casos en el reactor principal que explotó y daño los escudos de las naves cercanas.
Eleonora miró como al menos una veintena de naves desaparecieron del holograma de la flota sobre Adumbría. Apretó los dientes que rechinaban por la fricción provocada por tal movimiento.
Ordenó disparar sus cañones Gauss y plasma hacia las naves enemigas a media distancia. Mientras que las cápsulas de misiles eran preparadas para una andana completa de sus reservas de misiles Medusa de 500 megatones cada una fueron sacados de las reservas de municiones para desatar su furia sobre sus enemigos.
Saliendo alrededor de 12 misiles por nave capital, los misiles aceleraron al 3% de la velocidad de la luz. Cuando los sistemas de defensa de láseres de pulso fueron disparados en un tono violeta hacia los misiles entrantes hacia los buques de guerra Covenant.
Aunque muchos fueron eliminados unos pocos lograron pasar el fuego y chocar contra los los escudos de plasma duro enemigos. Envolviendo a los buques en tormentas atómicas que nublaron los sensores de los buques humanos.
Eleonora miró la representación de la videollamada de Asuna que se conectó mientras disparó otra ronda de cañones Yamato hacia uno de los buques de guerra de 17.820 metros de largo.
" ¡Debemos retirarnos de aquí, Eleonora! No podremos resistir por mucho más tiempo este tipo de combate" dijo Asuna cuando su nave se tambaleó cuando torpedos de plasma se estrellaron contra sus escudos, drenarlos por cada impacto.
"No podemos dejar a Adumbria sin protección ante este enemigo desconocido Asuna. Si lo hacemos dejamos millones a la merced de sus manos o garras" dijo indignada Eleonora mientras que su propio buque se tambaleo y los escudos apenas pudo resistir cuando un propio rayo de plasma impactó fuertemente en sus protecciones energeticas.
"Sé cómo te sientes pero no podremos permanecer mucho más tiempo en este estado. Perdemos más naves a cada minuto por esos rayos mortales de los buques capitales enemigos, y nuestros Yamatos apenas sucumben sus escudos según nuestros sensores lo detectan" afirmó Asuna mientras que una explosión fuera de la ventana de su puente indicó la muerte de otro buque de guerra aliado.
Apretando sus manos en puños, Eleonora no quería dejar a la gente de abajo sin protección pero lo que decía su amiga era cierto. Perdían muchos buques de guerra con cada momento que pasaba, a pesar del inmenso bombardero que daban a su enemigo no lograron destruir un solo buque de guerra, solo dañaron medianamente dos de los más pequeños buques de guerra alienígenas con sus Yamatos.
"!¡Apuntad al buque de 20km con el doble cañón! Coordinar con los Grandes Cruceros para una andanada coordinada" ordenó Elonroa a Limalisha que transmitió la orden a sus escoltas.
El Clase Hammond poseía un cañón yamato secundario, que aunque no fuese tan fuerte como el cañón principal, podía dar una potencia de fuego adicional para poder penetrar los escudos enemigos, Eleonora espero que la misma táctica funcione contra los buques enemigos.
"Cañón Yamato principal cargado al 100%. Cañón secundario al 92%" dijo el oficial de armas.
"Disparar".
Un leve temblor sacudió debajo de los pies de Eleonora por el leve retroceso de usar los dos cañones simultáneamente. Dos rayas azules de plasma viajaron a decenas de kilómetros de distancia en meros segundos, seguidos de más rayas azules que los siguieron de los escoltas.
El Clase RCS fue bombardeado con múltiples disparos en su proa, sus escudos ondularon por unos momentos antes de que uno de los disparos de plasma súper caliente lo pudiese atravesar y la armadura nanolaminada del casco, dejando una abertura que expulsó unos cuantos cientos del crucero pesado al espacio exterior y dejándolos muertos al frio vacio.
Con esa pequeña victoria, Eleonroa ordenó que las fuerzas restantes de las flotas retrocedieran lejos de Adumbria para saltar al Hiperespacio. Dejando atrás a un mini cementerio de las naves conjuntas y escuadrones de cazas que no pudieron volver a sus naves nodrizas a tiempo y descendieron a la superficie para repostar y rearmarse para la próxima defensa planetaria.
El pequeño contingente de naves Covenant pasaron el fuego inofensivo de las docenas de satélites de defensa que dispararon sus cañones Gauss hacia los navíos alienígenas, siendo eliminados por los láseres de pulso sin mucha dificultad.
Atravesando sus escudos y armaduras como si fueran inexistentes en primer lugar. Con la órbita libre, incontables Phantoms y Spirits fueron lanzados desde los hangares de las once naves hacia la superficie del planeta.
La invasión del Covenant ha iniciado.
…..
Puesto de defensa B-17.
Ciudad del Norte
Las alarmas han sonado en toda la pequeña base remota, las comunicaciones perdidas con la flota en órbita sugieren que un ataque enemigo era inminente. Los soldados del 52º Regimiento de Soldados Invernales se apresuraron a establecer posiciones defensivas alrededor del perímetro, se instalaron cañones antiaéreos portátiles, así como emplazamientos antipersonal y antitanques.
El soldado Dray estaba corriendo por la plaza abierta de la base con su fría armadura de asalto y su largo rifle AP-28 en la mano. Podía escuchar el ruido de pasos corriendo en diferentes direcciones mientras un teniente clon gritaba: "Muévanse soldados, doble tiempo. ¡Muévelo!"
Sin embargo, no pasó mucho tiempo cuando Dray mira hacia el cielo, densamente cubierto de cielos grises tormentosos mientras las ventiscas soplaban a su alrededor, y ve una tenue luz de destello azul desde dentro de las nubes solo momentos después, cuando una enorme masa gaseosa de plasma cae como un meteorito hasta que se estrelló contra el centro de comunicaciones de la base. La inmensa explosión destruyó por completo la estructura, tirando a Dray de espaldas y reduciéndose a nada más que un montón de escoria humeante sin supervivientes de los que se sabe.
El soldado, junto con varios otros que estaban lo suficientemente cerca como para ser derribados por la onda de choque, se pusieron de pie de manera constante y continuaron corriendo para ocupar sus posiciones mientras Dray continuaba observando los cielos, con la esperanza de encontrar la fuente del disparo, y cuando empezó a ver más luces se preparó para lo peor. De las nubes apareció un buque de guerra de diecisiete mil ochocientos veinte metros de largo con largas, elegantes y suaves luces azules que emitían desde el lado ventral, y de diseño casi orgánico, el buque no se parecía a nada que los soldados hubieran visto jamás. Fue entonces cuando se dieron cuenta de que ya no estaban tratando con los rebeldes que estaba acostumbrado, esto era mucho peor.
Sin decir una palabra, los cañones antiaéreos desplegados apuntaron sus cañones hacia arriba y comenzaron a disparar rayos de energía de alta potencia hacia el inminente crucero de batalla clase CCS que flotaba sobre ellos, pero cada disparo disparo fue contrarrestado por el escudo de energía a bordo del crucero, absorbiendo sin esfuerzo. la minúscula cantidad de fuego emitido por los cañones AA. Dray vio que los cañones no tenían ningún efecto y rápidamente notó que barcos más pequeños salían disparados de los hangares de babor y estribor del barco, aproximadamente del tamaño de una cañonera Salvador, si no más, y comenzó su descenso hacia los terrenos de la base. Varios soldados rápidamente apuntaron a los fantasmas que descendían, pero sus rayos láser atravesaron el casco de nanolaminado sin ningún efecto o dejaron marcas chamuscadas contra la armadura sin daños visibles.
No importa la cantidad de fuego bláster que se lanzó contra el escuadrón de fantasmas, eso nunca les impidió dejar caer su carga útil de soldados en el campo a través de un pozo de gravedad iluminado que apareció desde el vientre del transporte. Una a una, las unidades terrestres hostiles fueron cayendo al suelo, primero vinieron los pequeños alienígenas rechonchos de piel gris que llevaban una armadura mínima y grandes tanques de respiración en sus espaldas, en segundo lugar vinieron un par de frágiles figuras parecidas a pájaros que empuñaban un guantelete blindado en sus brazos izquierdos, y por último Era un pequeño escuadrón de grandes alienígenas que estaban protegidos y llevaban un armamento más pesado de armas pequeñas en comparación con las especies menores que atacaron a los clones.
"¡Contacto! ¡Contacto!" un soldado ladró antes de ser golpeado en el pecho por un rayo verde de plasma sobrecalentado, que destruyó su armadura y su piel.
"¡Hazlos retroceder!" otro rugió mientras devolvía el fuego, matando a un par de pequeños alienígenas rechonchos antes de verse obligado a cubrirse.
Dray no pensó mucho en apuntar a una de las criaturas pájaros y disparar un rayo con su rifle, pero el alienígena reaccionó rápidamente y arrojó su guante blindado para desviar el rayo a tiempo. Luego, el soldado invernal se vio inmediatamente obligado a esconderse detrás de una pila de cajas que estaba detrás de él cuando una ráfaga de plasma y agujas rosadas pasó volando a su lado. Se tomó un momento para recordar, la idea de algo capaz de destruir fácilmente una flota del colectivo o al menos hacerla retroceder, y ahora atacarlos era un poco estresante, mientras miraba a su alrededor para ver al pequeño regimiento de hermanos luchar desafiantemente contra este atacante no provocado, algunos lograron bajas mientras que otros cayeron ante el fuego enemigo.
"¡Detenlos!" rugió el comandante del regimiento, indicado por marcas amarillas en su armadura, mientras ocupaba un lugar junto a Dray, quien permaneció agachado para evitar el fuego entrante.
El comandante disparó varias ráfagas rápidas de su carabina AP-25 antes de que un rayo perdido golpee el costado de la caja detrás de la cual se escondió y lo obligó a agacharse por un momento, fue entonces cuando vio a Dray y le preguntó: "¿Por qué no está en combate soldado ?" su voz era firme y algo decepcionada como la de un padre ante un niño pequeño que ha hecho mal.
Dray se disculpó. "Lo siento señor, simplemente no esperaba que sucediera algo como esto".
"Bueno, sal de ahí y sigue disparando. ¡Tenemos que resistirlos hasta que lleguen nuestros refuerzos!"
El soldado asintió a las órdenes del comandante y se apoyó en una rodilla para dispararle a uno de los rechonchos alienígenas que comenzaron a abrumar la posición del regimiento. Aprieta el gatillo y lanza un rayo hasta que choca con la cabeza de un gruñido, matándolo instantáneamente en un despliegue de chispas y sangre azul fluorescente, antes de cambiar su objetivo hacia uno de los alienígenas más grandes que empuñaba una espada azul de doble filo.
Apunta y dispara otro tiro, sin embargo, cuando el rayo chocó con el alienígena, el escudo de energía recibió el impacto con un destello de color azul brillante y enfureció a la criatura para comenzar a cargar contra él con un rugido escalofriante proveniente de sus mandíbulas cuádruples con bisagras. Dray comenzó a entrar en pánico y a disparar contra el guerrero que se aproximaba, los escudos del Sangheili continuaron haciendo caso omiso de las rondas entrantes hasta que finalmente se rompieron con la cuarta explosión, pero incluso entonces continuó cargando con rabia con cada paso que daba.
El comandante ve a la élite atacando a Dray y rápidamente empuja al soldado a un lado gritando "Muevete Dra-" antes de que la espada de energía atravesara su cuerpo, la hoja destripa al comandante del regimiento en mitades de su antiguo yo.
Cuando el soldado fue empujado a un lado por la fuerza en el suelo, vio cómo mataban a su oficial al mando justo cuando el alienígena soltó una carcajada estruendosa reclamando la muerte antes de girarse hacia él y prepararse para tomar otra, pero Dray sacó su pistola N-90 y comenzó colocando disparo tras disparo en el pecho del Sangheili y cada explosión ralentizó al alienígena hasta que tropezó y cayó muerto. El soldado quedó congelado más allá del pensamiento racional después de ver lo que había sido de su comandante antes de que un rayo de plasma golpeara el suelo junto a él y lo sacara de su shock. Rápidamente comienza a buscar su rifle solo para encontrarlo cortado por la mitad cuando el comandante lo salvó de la espada. Así que agarra la carabina del comandante y continúa luchando, ahora enojado por la pérdida y decidido a matar a todos los bastardos inhumanos que vio.
Rápidamente lanza dos rayos sobre un chacal desprevenido y coloca un tercero en el pecho de un gruñido antes de que las fuerzas Covenant notaran su posición y abrieran fuego enviando plasma y agujas en su dirección. Sin embargo, se mantiene firme y continúa disparando con precisión contra los hostiles que avanzan, matando a dos Unggoy más y a otro Kig-Yar, hasta que una aguja disparada con un rifle encontró su marca en su hombro derecho y lo derribó al suelo gritando de dolor. La adrenalina se hizo cargo, inundando el dolor insoportable, y lo impulsó a arrancarse el fragmento rosado de su brazo antes de reanudar la pelea.
Se dio cuenta de que otros soldados estaban empezando a seguir su ejemplo, luchando más duro que nunca para vengar a los caídos con rabia y hacer retroceder al Covenant con una nueva determinación de supervivencia. El Covenant se vio rápidamente obligado a retirarse justo cuando un escuadrón de vuelo de cazas estelares imperiales Dragón-84 que escoltaban un ala de bombarderos pesados desde una base aérea cercana se elevaba a través de los vientos abrasadores con sus motores rugiendo para atacar al crucero de batalla que se cernía sobre el puesto de investigación. Los cazas se abrieron con una ráfaga de fuego láser y torpedos de protones, el fuego láser fue vergonzosamente absorbido por los escudos mientras los torpedos atravesaron y causaron daños catastróficos en la sección media de estribor del crucero, destruyendo por completo los dos hangares que habitaban esa sección y que sin duda mataron muchos miembros de la tripulación a bordo.
Ver a los combatientes dar un golpe tan fuerte animó a los soldados a continuar luchando hasta que los invasores estaban ahora en plena retirada con naves de descenso fantasmas abalanzándose para recuperar a las tropas y brindarles apoyo aéreo con su conjunto de cañones de plasma y lanzadores de conmoción cerebral. Los Oriones, a pesar de las pérdidas que las cañoneras estaban infligiendo, continuaron presionando hasta que los últimos Covenant fueron finalmente expulsados de la base.
"¡Los tenemos huyendo!" Un soldado vitoreó como lo hicieron muchos otros.
Dray sonrió sabiendo que eran lo suficientemente fuertes como para defenderse de un enemigo tan decidido hasta que escuchó la risa sangrienta de una élite que yacía en el suelo frío detrás de él.
Él y otros dos se giraron para ver al Sangheili caído y se acercaron con un soldado preguntando "¿Qué es tan gracioso con la boca dividida?"
La élite estaba al borde de la muerte, había sufrido un disparo letal en el abdomen, mientras respiraba pesadamente mientras se reía entre dientes "Herherh" tosió escupiendo sangre púrpura antes de hablar "¿Crees que ganaste el día de los humanos?"
"Ciertamente te patearon la cola fuera de nuestra base".
"Esto... es sólo el comienzo. La voluntad de nuestros dioses es fuerte... no eres más que un insecto insignificante para nuestra fe... El Gran Viaje no espera a aquellos que son indignos. Pero nuestras acciones hoy nos han hecho dignos de la salvación", hablaba mientras luchaba por apuntar su mano hacia el cielo.
Los soldados siguieron la mirada del Sangheili y vieron el crucero, que estaba aplastando a los cazas como moscas, y una enorme acumulación de energía acumulándose en el centro del lado ventral del buque de guerra.
A medida que la carga avanzaba hasta niveles críticos, la élite comenzó a recitar un verso religioso:
"Nadie recorrerá nuestro camino
Ninguno merece su misterio
Tenemos el derecho de pasar
Ese derecho está grabado en la historia.
Un regalo otorgado por eones
Un futuro regalado por el pasado
Las señales están ahí para que todos las vean.
El Viaje nos espera solos"
La secuencia de carga del crucero se completó, Dray y muchos de los habitantes de la base intentaron huir de la base por cualquier medio disponible, pero al final no importó ya que el CCS desató un rayo de plasma puro hacia la base debajo del vidrio y matando todo lo que había dentro. Ha comenzado el acristalamiento de Adumbria.
….
Kamier miraba desde su silla de mando en su mothership personal como la imagen del planeta de Adumbria era colocada en la matriz celestial del puente de mando en el centro de la nave dorada.
Sabía que el Covenant podría rastrear las naves de sus nuevos compañeros humanos pero había esperado al menos que fuera más tiempo, al parecer las estimaciones que hicieron él y Marcus fueron precisas en cuanto a discernir el rumbo a seguir de los sucios Xenos genocidas que atormentaban a la humanidad.
Dirige una parte de las fuerzas de su Armada Dorada, Astartes y Armada en conjunto con las fuerzas de Marcus desde su propio Acorazado de la clase Tempest a pocos minutos del sistema del Colectivo en cuestión donde el Covenant ha iniciado su ataque.
Han lanzado señales de interferencia para evitar de que los sensores enemigos localicen más mundos de los oriones en esta galaxia.
"Hemos llegado tarde" dijo Kamier en voz alta.
"Lo se" dijo Marcus mirando la representación del mundo siendo vidriado por los navíos Covenant lentamente, pero parecían convenientemente dejar el polo sur intacto al parecer y eliminaban la resistencia con metódica destreza usando sus tropas terrestres, curioso a los ojos de los dos Pretorianos.
"Gaia, aumenta la región del sur" ordenó Kamier y la IA obedeció sin más.
La matriz celestial mostró la región helada del sur del planeta, más específicamente una estructura que los sensores de taquiones han detectado por medio de las sondas que retroalimentan desde el sistema bajo el camuflaje activo, algo que superan al Covenant con su tecnología basada en Alteran.
"Forerunner. ¡Claro que buscarán una instalación de nuestros antepasados aquí en este mundo lejano!" refunfuño Kamier para sí mismo.
"No creo que nuestros conocidos hayan sabido de ella en primer lugar, la tecnología Forerunner esté en el Tier 0 como los Necrones por algo, hermano. Ahora debemos proceder con suma cautela, podríamos avisar a Horus para que nos apoyara, está a sólo cuatro o seis sectores de distancia, podría estar aquí en dos horas si fuese necesario" sugirió Marcus al Draconus y líder de los Templarios.
"Concuerdo contigo Marcus-usando sus poderes psiónicos cambio la imagen de la matriz celestial para ver a las fuerza de Eleonora y Asuna reunidas en el vacío entres sistemas, adjunta había otras dos fuerzas del Colectivo recién llegadas a la galaxia para reforzar a las fuerzas ya presentes- parece que nuevos jugadores han llegado al tablero, deberemos avanzar si queremos conectarlos antes de que inicien su ataque al Covenant hermano".
"Estoy de acuerdo. Sería mejor iniciar con nuestra parte ahora mismo".
El pequeño grupo de naves Terranas entró en el desliespacio con rumbo hacia las fuerzas del colectivo antes de que iniciaran su contraataque para recuperar Adumbria de las manos del Covenant, más si eran los Sangheili quienes comandaban la pequeña y relativa fuerza menor según los estándares terranos y covenants para esta flotilla de naves de guerra avanzadas.
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"...y eliminarlos usando nuestros misiles nuclelares luego de que el tercer y cuarto bombardeos hayan drenado sus escudos en los buques capitales para poder eliminarlo de la orbita" dijo Alice terminando su plan de ataque a las tres compañeras militares presentes en la video conferencia en sus camaras privadas.
Eleonora, Asuna y Stella discutían la forma de poder recuperar al planeta de las manos del Covenant. Las llamadas de socorro cesaron apenas unas horas antes de que las fuerzas llegadas desde Magallanes arribaron al espacio real.
Con refuerzos desde su galaxia natal, ambas Oriones sabían que ahora poseían la capacidad de poder derribar a las once naves en órbita alta de la colonia para fin del dia, y salvar a quienes aún estuviesen vivos en la superficie, las tormentas electromagnéticas plasmáticas generadas por el acristalamiento dejaron cerro posibilidad poder recibir comunicaciones desde el planeta.
"Aun con el plan trazado, desconocemos aún muchas de las capacidades enemigas que pueden surgir de su tecnología Alice. Necesitamos información concisa de ellos para ver cómo adaptarnos rápidamente ante la sorpresa que surja en medio de la batalla, y les puede dar la superioridad a nuestras fuerzas" recaló Stella a su compañera Nebiros.
"Eso tiene razón Stella. Su tecnología parece similar en algunos aspectos a la tecnología Terrana que Asuna y yo hemos visto de primera mano. Si pudieramos contactarlos, tal vez ellos sepan acerca de estos alienígenas hostiles que nos atacaron sin razón alguna" sugirió Eleonora mirando una pantalla que mostraba la información recopilada de las naves enemigas por los sensores de sus naves.
"Sus delegados partieron a Magallanes hace una hora, y la reciente tormenta cósmica interfiere con nuestras comunicaciones de largo alcance, se nos hará imposible contactarlos sin más Elen. Deberemos afrontar solas este desafío" dijo sombríamente Asuna a sus amigas que entendieron la gravedad de la situación.
Pero antes que alguien dijera algo más acerca de los Terranos o el Covenant, cada IA de sus respectivas naves les informo de la llegada del grupo terrano que ha arribado a novecientos mil kilómetros de distancia de sus fuerzas combinadas y pedían una audiencia con sus líderes.
Aceptando el saludo, la pantalla cuádruple cambia a una sextuple para incluir a los rostros de los dos Pretorianos de la Gran Alianza que habían llegado a socorrerlas.
"Sir Kamier, debo decir que me sorprende verlo aquí" dijo sorprendida Eleonroa al ver a uno de los Pretorianos que conoció hace más de mes atrás cuando fue emboscada por la Alianza Luciana.
"Estaba en la cercanía cazando a una flotilla de naves enemigas que fue desplegada cuando notamos que habían atacado uno de vuestros mundos. El enemigo que os enfrentais se llama Covenant, una Teocracia que proviene de la galaxia de Andrómeda para invadir la Vía Láctea en una Cruzada Santa de Exterminio contra la Humanidad por sus supuestos dioses que nos ven como una blasfemia para la existencia del Universo mismo. Y al parecer ahora os han apuntando a vosotros por la misma razón" explicó Kamier para aclarar las dudas de las cuatro hermosas jóvenes tenían en sus mente.
Paquetes de datos conjuntos han sido enviados por Gaia a cada noble de Magallanes respectivamente para que comprendan mejor al enemigo que enfrentaban y la amenaza que suponía para todo su Colectivo si se enteraban de que eran de otra galaxia.
Viajar a Magallanes no les tomaría mucho problemas con sus Slipspaces Drives que eran casi similares en velocidad a los SSD Terranos por una ligera fracción de velocidad. En cambio, los motores Hyper Drives de los Oriones eran muchísimo más lentos que los SSD de ambas facciones de Razas Apex, por lo que no podrían ayudar a su galaxia natal si se daba tal eventualidad.
"Ya comprendo mejor las acciones del Covenant contra nosotros" dijo Eleonora al terminar de leer el paquetes de datos sobre la Hegemonía de Xenos que poseía los Terranos mediante años de recopilación de inteligencia de parte de la Inquisición y la Inteligencia Militar.
"¿Entonces qué hacemos para retomar a Adumbria? El plan de Alice es bueno, pero con su llegada creo que tenemos mejores probabilidades de victoria" cuestionó Eleonora seria y curiosa.
Kamier mandó una solicitud de información a Alice para que le pasara el plan que habían estado discutiendo la última hora y media. La chica lo pasó sin ningún problema, y en un segundo, Kamier y Marcus lo tenían frente a ellos sin más.
Comenzaron a hablar por el enlace neuronal en una conversación de nanosegundos de duración.
"Admito que no está mal para una mente ligeramente inferior a la de nuestras compatriotas humanas. Atacar a las zonas de los motores es una buena opción con sus misiles, los motores de repulsión de plasma del Covenant no son exactamente conocidos por estar bien protegidos, pero la andanada de los torpedos de plasma y los láseres de pulso serian un inconveniente para sus buques de guerra, solo sus buques capitales podrían soportar una andanada completa, y apenas" dijo Marcus.
"¡Concuerdo contigo hermano! Pero con nuestra ayuda no deberían tener ningún problema para poder enfrentar a los once navíos enemigos que ahora orbitan al mundo ocupado. Nuestros deflectores de materia oscura y escudos de luz dura son más avanzados que los escudos de energía de nuestros primos Oriones, y además que nuestras armas son mucho más avanzadas y poderosas para enfrentar al Covenant.
Sugiero que nuestros Astartes salten primero para confrontar a las naves Covenant más alejadas de la formación enemiga. Luego que salten las naves de la Armada y seguimos nosotros con nuestros buques insignias y la Armada Dorada para enfrentar a los buques capitales, y que nuestros primos nos apoyen con el fuego de francotirador con sus cañones Yamatos" sugirió Kamier.
Marcus asintió ante la idea de su hermano." Con los portaaviones y demás buques de escolta de tu mothership será posible darles una ayuda para lidiar con los buques enemigos que se les crucen con más facilidad con el fuego cruzado.
Pero primero deberemos ver transmitir nuestro plan a nuestras nuevas aliadas "temporales", el vencer a esta pequeña flota del Covenant no es nada comparado con las Flotas de Batalla y Grupos de Ejércitos que llegarán desde Andrómeda en unos días más para reforzar sus fuerzas locales. Su ayuda aunque sea limitada sería bienvenida para poder aliviar algo del peso de nuestras fuerzas en el frente de batalla".
"Eso dependerá del Canciller y del Senado hermano, así que por ahora necesitamos concentrarnos en la batalla que tenemos en nuestras manos".
Terminando la charla, Kamier transmitió el plan de ataque a las cuatro chicas. Quienes analizaron en unos minutos el plan concebido por las dos mentes transhumanas de los dos Pretorianos de Primera Generación de la Gran Alianza.
"... Admito que es un muy buen plan de hecho Sir Kamier. ¿Pero porque necesitaban nuestras ayuda, si ustedes mismos son capaces de poder liberar nuestro mundo sin más en la órbita?" dijo Alice a los dos Pretorianos.
"Tiene un buen punto señorita Alice, pero el tema que la población de Adumbria que según nuestros escaneos de largo alcance y Telescopios FTL detectan que aún hay varios satélites orbitando el planeta, así que supongo que ver a quienes confiaron su seguridad sería una subida del ánimo desesperanzador que debe haber por la ocupación del Covenant" aclaró Kamier en su modo político, con la sonrisa secreta de su hermano Marcus, viendo cómo manipula las emociones de sus compañeros humanos a favor de los terranos.
Alice asintió aceptando la explicación lógica de Kamier, pero había algo que aun no le terminaba de convencer del todo. Sus instintos le advertían que había algo detrás de todo este asunto pero lo dejó de lado, tenía una labor que cumplir sobre el juramento que hizo al unirse al Colectivo de Orion.
Tres asentamientos más vinieron de las demás comandantes de las fuerzas del Colectivo, seguirán el plan de sus aliados terranos para recuperar el mundo que juraron defender a toda costa.
Acercándose a las naves Terranas, los Oriones vieron como los portales desliespaciales eran abiertos y las naves Terranas entraron a ellos con las naves aliadas siguiendoles el paso por la estela que dejaron.
Una venta conjunta fue formada por el grupo Terran-Orion para llegar más fácilmente al sistema que estaba a unos pocos minutos de distancia en Slipspace Terran. Cosa que Marcus y Kamier tomaron nota mental para incluir en los planes de batalla futuros en las operaciones conjuntas que ambos gobiernos hicieran en sus fuerzas militares respectivas si todo salía bien según el plan trazado por los dos Pretorianos y que tenía la aprobación del Gran Mariscal para demostrar su autenticidad antes los ojos del Senado.
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Siete minutos fue lo que se demoraron en llegar a Adumbria, las fuerzas del Covenant estaban en una formación apretada con las naves capitales alrededor del Acorazado en el centro, y las naves más ligeras (corbetas) en el perímetro más exterior de la formación dada en órbita alta del planea.
Las Naves Astartes salieron primero a novecientos mil kilómetros de distancia, justamente en el rango máximo de las armas Covenant. No demoraron nada en disparar sus armas hacia los buques enemigos más cercanos que eran dos Corbetas pesadas.
Estudios ondularon cuando los repetidos impactos del armamento clon dieron de lleno con fuerza de megatones por cada golpe de sus armas respectivas, cuando la primera muerte de la batalla fue dada con la destrucción de una de las corbetas que tuvo sus escudos agotados en meros instantes por la gran potencia de fuego de dos a tres grupos de batalla clon de las dos Legiones.
Finalizando su vida útil por medio de al menos seis ojivas nucleares de gran poder destructivo que envolvieron al buque enemigo en vórtices atómicos que lo desgarraron de afuera hacia adentro, cocinando a la tripulación vivos a millones de grados celsius.
La segunda corbeta tuvo un final parecido cuando los Astartes enfocan todo su poder de fuego en ella, cedieron sus escudos de igual forma que la primera, y terminando con un solo misil que impactó en sus motores por un navío ligero de la XIII Legión de Astartes.
Con eso vino la represalia del enemigo, torpedos de plasma quemaron a través de los gruesos escudos multicapas de los buques Astartes en meros segundos, dando a su armadura de nanolaminado una hervidera comparable a la de una llamarada solar.
Quemando a los tripulantes y soldados clon por cientos con cada impacto recibido, solo que los escudos se ajustaron para resistir los impactos de los restantes cientos de torpedos que cayeron de las manos vengativas de los Maestros de Naves Sangheili decesos de vengar a sus compatriotas por tal muerte desvergonzada de los Herejes Clones Humanos.
Lanzas de Plasma de los navíos capitales destrozaron los navíos Astartes como sin nada, a pesar de su avanzada resistencia basada en los materiales nanolaminados del enemigo usaba para sus estructuras y demas cosas, aun eran muy vulnerables al fuego de energía como lo demostraron los cascos quemados de al menos unos pocos navíos clon.
Luego la fuerza principal aliada arribó al campo de batalla, las baterías de la nave nodriza de patrón Hércules como del acorazado Tempest rugieron a la vida con sus disparos acribillando a uno de los cruceros de batalla enemigos con cientos de disparos cada segundo.
Tal potencia de fuego solo podía ser resistida por el crucero de batalla por unos pocos minutos, tiempo que los demás buques terranos usaron para disparar sus macrocañones y cañones Nova hacia los navíos capitales enemigos restantes en el rango de disparo de sus armas.
Cosa que fue respondida con docenas de torpedos de plasma del Acorazado y el crucero pesado. Impactando con gran fuerza en los deflectores de materia oscura de las naves Terranas.
"¡El Deflector principal ha caído al 82% de fuerza! redirigiendo energía de los sistemas subespaciales para reforzarlo" gritó uno de los técnicos del puente de la Mothership, Vanguardia del Amanecer.
"Concentrar las baterías de fotones de estribor con fuego superpuesto de tres lanzas de plasma en el crucero de batalla, eliminarlo del cielo. Redirigir el 14° grupo de portaaviones y escoltas al crucero pesado, apoyar a los Oriones" ordenó Kamier mientras que chispas salían de la matriz celestial al resistir levemente el ataque del crucero de batalla del Covenant en los deflectores de materia oscura de la primera capa.
Miro como los cañones Yamato de los Acorazados aliados impactaron con fuerza con sus dobles cañones en el crucero pesado enemigo, que recibía al menos la atención de sesenta naves Orionas y de varios portaaviones que disparaban sus lanzas solares al buque de guerra xeno.
Dirijo magistralmente a parte de las fuerzas Astartes de su 18° Flota Draconus Abyss hacia dos de los cruceros de batalla enemigos, ordenandoles saturarlos de tanto fuego como fuese posible para dividir la atención del enemigo en diferentes direcciones y evitar que se concentran en una sola pelea a la vez.
Noto por la pantalla de luz intensa frenta a el, como el Honor de Macragge destripa el ala derecha del enemigo con su lanza de taquiones principal de un solo disparo, ordeno dispara el haz purificador para no quedarse atras.
El rayo de plasma anaranjado atravesó los debilitados escudos de plasma duro, perforando armadura y casco por igual, matando a miles de la tripulación mientras atravesaba verticalmente docenas de cubiertas del buque enemigo.
Respondiendo a eso con dos haces de plasma super pesados del buque enemigo que impactaron con gran fuerza en los deflectores terranos que soportaron con facilidad tal ataque enemigo.
Para terminar con el crucero de batalla, ambos buques insignias desataron un bombardero completo de todas sus armas principales en aquel navío extragaláctico. En menos de un minuto, los resto chisporroteantes fueron lo único que había quedado del orgulloso buque de guerra xeno.
Con eso terminado, el dúo de naves enfocó su atención al acorazado enemigo, aquel que ya eliminó algunos buques Astarte, Armada y Templarios por igual así como docenas de buques Oriones con sus haces de plasma super pesados.
"¡Enfocar todo el fuego posible en el buque principal, derribarlo!" la voz de Marcus se oyó por la red de batalla terrana
Obedeciendo la orden del Pretoriano de Macragge, todas las fuerzas terranas enfocaron el fuego que pudieron en aquel buque de guerra Covenant. El cual devolvió el fuego cuanto podía en su rango de ataque, pero con sus escoltas destruidas en su mayor parte o concentradas en peleas propias imposibles para que presten apoyo, se quedó solo ante los hambrientos colmillos de los Terranos y Oriones por igual.
Impacto tras impacto dreno la durabilidad del escudo enemigo de rápida forma según los sensores de los buques principales podían dar crédito de la credibilidad de sus ataques combinados, en meros instantes el escudo cedió, permitiendo que el casco enemigo fuese atacado con armas cinéticas y energéticas concentradas en su estructura de estilo marino.
Una lanza de taquiones tuvo la suerte de dañar los conductos de energía de un reactor secundario de punto cero patron San'Shyuum, dando una baja de salida de energía necesaria para mantener parte de la potencia de las armas y los motores por igual, decayendo la ofensiva y maniobrabilidad enemiga en un treinta a cuarenta y cinco por ciento según Gaia y demás IAs de la flota.
Cuando la victoria parecía cerca de las manos humanas, una grieta desliespacial es abierta más allá del mismo planeta, saliendo un portaaviones de asalto enemigo de cincuenta y tres kilómetros de largo.
Pero ambos Pretorianos se fijaron antes de dar la orden de reagrupación (cosa que fue dada por las IAs de ambos) del extenso daño que había recibido aquel poderoso buque de guerra enemigo. Y el responsable no se hizo esperar.
Numerosos portales desliespaciales son abiertos y navíos Astartes que llevaban la marca de la XVI Legión salieron en conjunto con buques de la Armada Terrana y el Acorazado de Clase Aquiles, Vengeful Spirit de treinta y cinco kilómetros de largo. Comandado por el mismo Warmaster de los Terranos, Horus Lupercali.
A la vista de refuerzos inesperados de parte de los Terranos, los Oriones celebraron al ver como el Acorazado fue destruido luego de una tanda de disparos de los Cañones Yamatos de sus Acorazados y las Lanzas de Taquiones Terranas.
"¡Así que esto era lo que ustedes dos estaban haciendo,eh hermanos!" recalcó Horus una vez la conexión fue establecida y ambas fuerzas se enfocaron en destruir al último buque de guerra enemigo en la órbita de Adumbria.
Su posición como Maestro de Guerra le daba autoridad sobre sus hermanos, pero Kamier era el líder de facto de todos ellos, Así que aunque fuese una falta a la jerarquía militar, Horus primero obedeció a su hermano en lo que ordenara, al menos que la orden fuese anulada por alguien de la Trinidad Terrana.
"Solo estábamos ayudando a los recién llegados a recuperar su mundo Horus. Y ahora solo queda lidiar con los Xenos en la superficie del planeta" explico simplemente Kamier mientras veía como los transportes de tropas de parte de sus naves Astartes descender hacia el planeta para recuperarlo.
Tendría que ordenar una nueva ronda de naves para reemplazar a las pérdidas en esta batalla. Pero con la industria de Avalon no sería ningún problema por mucho tiempo que se dijese.
"¡Además de que el ataque no lo provocamos nosotros hermano! Intentamos evitarlo… pero llegamos tarde como te puedes dar cuenta" el tono sombrío fue todo lo que Horus necesitaba oír de su hermano Marcus.
"Lo se hermano mío, mis Astartes se unirán a la lucha en la superficie del planeta. Mientras me gustaría saber exactamente que han estado haciendo vosotros dos a oscuras" pidió amablemente Horus a sus hermanos.
Y así los tres Pretorianos hablaban amenamente entres ellos tres, a la vez que las fuerzas terrestres terranas desembocaban en los sitios ocupados por los Xenos y liberaron a los residentes locales del yugo y muerte que les esperaba a manos de los lunáticos religiosos que eran de la Teocracia del Covenant.
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"... Fuego en el flanco izquierdo. ¡Izquierdo maldición!. Artillería, eliminar esos tanques Wraith y Shadows del camino de la 10º Compañía. AT-TE disparar a los sectores 02, 03 y 05, Juggernauts fuego de cobertura, andanada de misiles completa" la voz del Mariscal Ezekyel resonó por la grabación holográfica presentada frente al Canciller, el último de los Precursores Reales y líder absoluto de la Humanidad.
" Fuego enemigo concentrado en Sector Alfa 09 a Foxtrot 17. Refuerzos de los Ultramarines en camino. Replegarse a la segunda línea defensiva mis lobos, dejen que nuestros primos obtengan un poco de sangre Xeno".
Más videos eran presentados al líder de la Gran Alianza Humana luego de que Adumbria fuese liberada por las Legiones XI, XIII y XVI en conjunto con fuerzas del Ejército Terrano y la Armada Dorada por igual, con el apoyo de los locales Oriones presentes.
Reportes de los Tres Pretorianos se les fueron presentados en persona por el Gran Mariscal luego que viniera desde Reach para hablar con él sobre el asunto concerniente del ataque de su enemigo a una colonia extragaláctica de sus primos humanos de Magallanes.
"¡Con este ataque el Colectivo ha tenido su primer contacto agresivo con el Covenant, más rápido de lo que hemos deducido mi amigo!. Kamier y Marcus fueron a ayudar pero no lograron salvar la colonia a tiempo de ser vidriada por el Covenant desde la órbita, aun con eso he ofrecido al gobierno local del Colectivo nuestra asistencia en forma de tecnología de terraformación avanzada para poder recuperar el ecosistema del planeta que ha comenzado a entrar en un invierno nuclear".
El Gran Mariscal habló con franqueza ante su viejo amigo, aquel que ha guiado en las sombras a la Humanidad desde el disparo de los anillos de Halo hasta la actualidad ahora como Canciller y líder de toda su raza en un nuevo camino para recuperar lo perdido.
Suspirando, el poder dorado envuelve la sala privada del Canciller. Mostrando las imágenes de fotones condensados de la Vía Láctea, Magallanes, Andromeda, Triangulum, Ida, Othalla, etc. Todo el Grupo Local mejor dicho.
"El Senado del Colectivo está en una sesión de emergencia según nos ha dicho nuestro embajador sobre qué rumbo tomar en el reciente ataque de uno de sus mundos y la amenaza que el Covenant representa para ellos".
"Deberemos esperar una carta de alianza formal dentro de unos días más, el punto será aceptarlo o no. No quiero que nuestros primos se engullen más en este camino que he elegido, las acciones tomadas han alterado la línea de tiempo, el camino hacia la victoria ya no es del todo seguro amigo mío. ¡Necesitaremos de nuestros Pretorianos más que nunca para repeler a nuestros enemigos !" Habló el Canciller mientras decía acerca de sus dones de clarividencia,
Sabía de la invasión del Covenant desde hace siglos, pero prevenirla solo causará más daño que bien, no importaba que hiciera para retrasarla, el tiempo siempre era cambiante, por lo que dejó que sucediese sin más .
Instó a sus viejos amigos a reclutar a los mejores jóvenes para ser entrenados por los Spartan retirados y empezar un verdadero sucesor del famoso Programa, no el lío que fue el Programa Astarte antes de ser cerrado y reconvertido en las Legiones de los Pretorianos para detener la marea enemiga en sangre, mucha sangre de hecho.
"Avisar a los Pretorianos que retomen sus campañas contra el Covenant en seis días, quiero nuevos reclutas del Ejército para defender los mundos fortalezas del Segmento Pegaso aún de pie, no podemos dejar que el enemigo se nos entrometa más profundamente en nuestro territorio" ordenó a su viejo amigo Precursor.
El Gran Mariscal asintió y salió para cumplir con la orden dada de parte de su Maestro de la Humanidad, Rey de las Edades, etc.
Imágenes de Kamier y los demás Pretorianos aparecieron enfrente del Canciller, mirando las imágenes con cariño de un abuelo a sus nietos. Esperaba ver como se destacaban todos ellos para poder tomar la elección de un nuevo dirigente que fuese su mano derecha.
"Veamos a qué nos espera ahora en la grieta" susurro para si mismo el líder de la humanidad, pero siendo oído por sus Custodios que estaban dentro de la oficina para protegerlo de cualquier peligro.
Hizo repasar viejos archivos de antiguos planes que había hecho en caso de una eventual catástrofe cataclísmica que afectará a tal punto a la humanidad que fuese necesario un sacrificio para poder sobrevivir.
Por lo que analizo por toda la noche esos viejos planes para ver que podría usar en caso de que la Guerra no fuese como previo con antelación de otras lineas temporales, no podia dejar de que la humanidad cayese antes de recuperar por lo que legitimidad era suyo, el Manto de Responsabilidad.
Sus pasos dados hasta ahora han estado bien, pero esta guerra demostraría si en verdad la humanidad merecía el título o no. En última instancia depende de él, pero siendo el Maestro de la Humanidad debía de probar si en verdad eran merecedores de tal título que representaba un significado profundo en la psique humana antigua, que al día de hoy seguía arraigado en el subconsciente.
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Una vez recuperado Adumbria de las manos de los viles Xenos, Kamier y el resto de los Terranos regresaron a sus respectivos puestos. La orden del Canciller fue recibida por los tres, por lo que tenían que acelerar el próximo lote de Astartes para las campañas de los próximos meses, cosa que no sería poca cosa.
En cuanto al Lord Draconus Abyss, este pidió a su mejor Templaria en cuanto a la ciencia se refería para comenzar un proyecto que seguro necesitaría para poder hacer frente a las flotas enemigas que llegarán pronto a la galaxia.
La Armada Dorada debía de aumentar su alcalde más allá del Sector de Avalon, le guste o no al Consejo de Ancianos de su familia, las naves eran suyas para mandar lo que quisiera, solo protegían el mundo que lo vio crecer por los recuerdos que ya habían quedado y por su familia que en verdad apreciaba desde el fondo de su corazón.
"Es posible mi señor-dijo Selendis desde Avalon a su maestro- pero llevará algo de tiempo poder reunir los recursos necesarios para tal proyecto que quiere hacer, pero podrá convencer a los Mundos Forjas Alfas de ayudarme en secreto con los materiales necesarios para dar inicio al proyecto en una semana a más tardar"
Kamier asintió, agradecido de que lo que quiera no estuviera tan lejos de poder completarse en un inicio."Necesitaremos doce en el primer lote Selendis, el enemigo no flaqueara ante nada para vernos muertos antes sus pies, debemos tomar la iniciativa cuanto antes si queremos ganar esta guerra".
"Comprendo a mi señor. Daré la orden de inmediato para que los Mega Astilleros sean movidos a un sistema deshabitado, y Gaia cubrirá todo de los registros de Avalon para evitar sospechas, estaremos listos para entregarlos cuanto antes sea posible".
"Hazlo así Selendis; El Proyecto Ark no puede detenerse por nada. La Armada Dorada es una de las hojas de la Humanidad y como tal destrozaremos a nuestros enemigos a la mitad" dijo Kamir con sus ojos brillando en poder psiónico puro.
"Como ordene mi señor. La Armada Dorada estará a la espera de su comando para desplegarse en caso de lo que requiera" afirmó la Alta Templaria mientras analizaba numerosos escenarios en su cabeza para el futuro.
El Covenant probaría una cucharada de su propia medicina muy pronto, demostraría que los humanos no se someterán a la muerte tan fácilmente.
Interludio II.