Yu Yuehan frunció el ceño y reflexionó profundamente por un momento antes de decir: —Escuché que Shangxin aceptó una asignación en el extranjero y se marchará al exterior para la sesión de fotos ¿Estás esperando que ella se vaya?
—…
El silencio de Tang Yuansi significaba que estaba de acuerdo.
Ahora que las cosas habían llegado a éste estado, no importaba si él todavía quería esforzarse o si simplemente se dio por vencido.
Él no se arrepentía de rechazarla porque sabía muy claramente que ambos no tenían un futuro juntos.
Sólo se arrepentía de no controlarse a sí mismo y de tomarla para él durante la noche que bebió demasiado.
Algunas cosas no daban lugar para echarse para atrás una vez que se habían comenzado.
A pesar de que él se había obligado a ignorarla, no podía evitar preguntar por ella, ya que tenía miedo de que ella sufriera en la industria del entretenimiento.