—Yo tenía mis propios motivos cuando intenté acercarme a ti en ese momento. Me sentí culpable por ello, entonces hice todo para defenderte una vez que el incendio ocurrió. Al ver que tú estás bien y hasta vives una vida feliz, mi corazón está tranquilo.
—…
Nian Xiaomu no esperaba tal respuesta.
Mientras los niños de la Familia Xing estaban influenciados por la generación anterior, la mayoría de ellos eran indolentes.
La excepción era Xing Fang, quien se destacó académicamente y también era extremadamente aplicada.
Después de que ella se graduara en la universidad, siempre había trabajado para mantener a la familia.
Siempre pensó que estaba sufriendo un estrés inmenso debido a las dificultades financieras durante los últimos años. No obstante, no esperaba que tendría que experimentar éste estrés desde que era joven.
Una vez que Xing Fang habló, los rostros del tercer tío y la tía de la Familia Xing se oscurecieron.