De hecho, no importaba la edad de la mujer, la apariencia era lo más importante para ella.
Dado que Jordan había ayudado a Sylvie a rejuvenecer 10 años, no era exagerado decir que le había dado una nueva oportunidad. Ya estaba completamente del lado de Jordan y ya no estaba descontenta con él.
Durante los tres años que estuvo casado con Hailey, Jordan había servido obedientemente a su suegra, pero ella seguía sin gustarle. Si hubiera sabido que ella valoraba tanto la apariencia, habría conseguido alguna medicina de belleza de su familia para ella. Así no habría tenido que sufrir tanto esos tres años.
Detrás de Sylvie, Elle, que ya había cambiado su nombre por el de Jenny, se acercó y saludó a Jordan.
—Jordan, cuánto tiempo sin verte.
Jordan miró a Elle y asintió.
—Sí, hace tiempo que no nos vemos.