Huang Shaotian ya estaba a punto matarlo a cuchilladas, pero Loulan Slash continuaba sin poder deshacerse del shock por ver a tantas personas observándolo. Durante el enfrentamiento, no pudo concentrarse a pesar de sus recordatorios constantes. Estos pensamientos no podían controlarse y no pudo evitar mantener a los espectadores en mente.
—¿Para qué está toda esta gente aquí? —. Finalmente, Loulan Slash pudo recuperarse un poco.
—Dios, ¿qué estás haciendo? —. Loulan Slash no pensó en ello por su cuenta y le preguntó directamente a Lord Grim.
—¿No estás ocupado? ¿Todavía tienes tiempo para platicar conmigo? —contestó Ye Xiu.
—¿Ah?
—Es una rara oportunidad. ¡No la desperdicies! —dijo Ye Xiu.
—¡Ah! ¿Los buscaste por nosotros? —se conmovió Loulan Slash.
—No…—. Ye Xiu explicó el malentendido —Huang Shaotian vino para buscarme. Los otros no estaban ocupados y vinieron para observar. Vi una rara oportunidad y dejé que ustedes la tuvieran.