Kapitel 32: El velo.
Zeraki recordó aquella última fogata en Zorath, costaba mantener un brasero prendido en Alto del Hielo, en aquella fortaleza maldita, pero ya tenían acorralado al perverso Rey Zorth.
-¿Qué tal si salimos luego de esta batalla?- le pregunto Aledar, un orco un poco más joven que ella;-sería un lindo festejo de victoria-.
-piérdete Aledar- rio Zera dándole un empujón;- preferiría salir con kharzum antes que contigo, puerco-.
-me enojaría si no lo tuviera merecido- soltó varias carcajadas, y llevó sus dedos a la nariz para imitar un puerco.
Todos rieron por última vez. Aledar sería el primero en morir en aquel combate final. Y cuando estaban ya por debilitar levemente al Rey Zorth, este hizo apagar todo para Zeraki. Aterrada vio su alma salir de su cuerpo, como si un ángel lúgubre la llevara contra su voluntad a otro lado.
Pero de alguna forma aquel ángel fue abatido, su alma cayó libremente, hasta una especie de vórtice sombrío que la engulló, solo ahí volvió a sentir, estaba viva, sumergida en una laguna que emanaba un enorme poder, estaba en Xera.
Ahora moría nuevamente, estaba herida, las enormes manos de su querido Mork le habían ahogado hasta casi matarla, pero en tanto calló al suelo, el perverso y deformado Fenrar le clavo su espada vil en el corazón, lamento no poder ver a Redhand a los ojos otra vez, lo último que vio fue el rostro sombrío, a medio descubrir del maldito Fenrar.
No pensó que al morir la levantaría otro ángel, pero fue así, la cargo como si pesara una tonelada, apenas pudo llevarla a un portal celestial parecido a una vorágine de arcoíris, y su esencia pareció diluirse en tanto su alma fue arrastrada a un enorme pilar que engullía y expulsaba a lugares diferentes una cantidad pavorosa de almas a cada segundo.
Cuando volvió a sentir se vio caída en un mundo fresco y colorido, varios seres que parecían hechos de prístino mármol la recibieron.
-bienvenida a Haras- le dijo una figura que de todos era el menos alto e imponente.
-¿Haras?, pero qué demonios, dónde está Redhand, él me necesita-.
-Este es Haras el hogar de los Veledars y tus actos en vida te ha traído aquí para ser uno de los nuestros-.
-No quiero, tengo cosas por hacer, déjenme ir-.
-Entiendo que estés confundida, pero ya te acostumbraras, tu alma es valiente y te depara una misión brillante en el Velo-.
-¿Confundida?, idiotas sin cerebro, yo debo estar en Xera-.
-Solo te resistes a la verdad, pero ya mejoraras, este lugar te expiara de tus pesares, serás uno de los Veledars-.
-¡Yo soy mi pasado!- Reclamó Zeraki con fuerza, quitando las manos del Veledar de encima;-No me quitaran eso, no me quitaran a Redhand -.
De pronto una figura imponente se dejó ver, era como un Veledar pero gigante y con una armadura destellante. Todos abrieron paso y dieron una reverencia.
-Te refieres a Redhand, al Soñador Oscuro Gar'Dal- dijo la Reina Blanca que fue como la llamaron el resto de criaturas.
-¿Gar'Dal? ¡Me refiero a Redhand! ¡Mi Redhand!- gritó la orca llorando, reclamándole al destino haber muerto cuando por fin estaba disfrutando la vida. ¿Pero aquella confusión? ¿Gar'Dal? Se refería al Rey Demonio, Redhand debía de vencer a ese monstruo, no ser él.
-Redhand es uno de los muchos nombres del Soñador Oscuro, entre ellos hay uno especialmente poderoso-.
No podía ser, Redhand era Gar'Dal, pero eso era locamente imposible, pero ella había muerto, y quien gobernase este lugar conocía bien a su Redhand y a ese Gar'Dal.
-Gar'Dal es un problema, interrumpe la muerte a voluntad, secuestra gente de muchos mundos para que le sirvan o por diversión, pero...- la Reina quiso elegir muy bien sus palabras;- Redhand es quien siempre se le opone, quien mantiene el equilibrio del caos y el orden, aunque se intercambian roles de tanto en tanto. Dime niña, ¿qué eres de Redhand Dark Dreams?-.
-nos amamos, eso te vasta-.
-Grandes crimines a cometido Gar'Dal en nombre del amor, la tendencia de ese ser por dominar los destinos de quienes ama, y odia, ha puesto en peligro realidades enteras- la Reina Blanca miró a sus siervos;-enséñenle a ella a aumentar su habilidad de pelea, o de lo que ella quiera, no estará mucho tiempo en el Velo, así que no debe seguir el camino del Veledar.
-Dice mi Reina, que el Soñador Oscuro le va a negar la muerte, que se llevara su alma-.
-Eso es incierto, pero todo cuanto rodea a los Soñadores Oscuros es entropía, convertir en Veledar alguien que se relaciona con Gar'Dal es peligroso para todo el Velo-.
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