Kapitel 119: Capítulo 115. La Torre de Ofiuco

—Te ves tan enérgico... Señor —Lex no pudo evitar comentar por la mañana, mientras subían al tejado después de hacer el check-out.

Bassena, con brillantes ojos ámbar y una sonrisa fácil en su rostro, respondió con indiferencia:

—¿Cómo debería de verme, entonces? ¿Apático?.

—El hecho de que me respondas con esa expresión radiante es lo suficientemente extraño, Señor —murmuró Lex para sus adentros. Pero ya podía adivinar la causa de ese aumento de energía, así que no dijo nada mientras avanzaban hacia el helicóptero.

Se preguntaba si Bassena y Zein sabían sobre el furor que habían creado desde el corto paseo en barco de ayer. Las noticias de entretenimiento estaban llenas del fragmento de su 'cita en el yate', como lo llamaban los medios. Las imágenes de su interacción en el bote habían circulado tanto durante la noche que toda la federación ya podría haberlas visto.