—¡Era un carácter fuerte que se atrevía a abofetear incluso al jefe de un hogar en la cara!
—Madre, ¿originalmente el brocado se llamaba Brocado Fuguang? —preguntó.
—Madre no esperaba que la tela que envió tu tío fuera Brocado Fuguang —respondió la Señora Li al ver la expresión alegre de su hija mientras acariciaba el brocado sintió que algo de su frustración se desvanecía.
—¿Es muy caro el Brocado Fuguang? —levantó la vista Daohua.
—Caro es un aspecto, lo principal es que es difícil de conseguir. Este tipo de tela suele suministrarse solo a funcionarios y nobleza; la gente común apenas puede entrar en contacto con ella —asintió la Señora Li.
—Mi tío es realmente bueno conmigo —se sintió un poco conmovida Daohua.
Ella no sabía cuánto esfuerzo había hecho su tío, a quien nunca había conocido, para obtener esos rollos de Brocado Fuguang. Afortunadamente, fueron recuperados, de lo contrario, realmente no habría podido corresponder al profundo afecto de su tío.