—Anteriormente, Song Yue había pensado que con solo aparecer y que el jadeíta que había elegido quedara en primer lugar, debería poder hacer que los precios del jadeíta de Qiao Nian y Lu Zhu se quedaran atrás. Haría que Lu Zhu se arrepintiera de haberla expulsado por Qiao Nian.
—Sin embargo, Song Yue realmente no había esperado que Qiao Nian realmente supiera cómo apostar en piedras, y que la habilidad de Lu Zhu tampoco era mala.
—Solo había conseguido el tercer lugar con la ayuda del Gambling King.
—Sin embargo, el valor del jadeíta que había descubierto era mucho menor que el de Qiao Nian.
—Una mirada oscura cruzó por los ojos de Song Yue. Estaba indignada. ¿Por qué era Qiao Nian tan afortunada? En la próxima ronda, definitivamente la aplastaría.
—En tercer lugar estaba el jade verde imperial de Song Yue, que valía 865 millones.
—El cuarto lugar fue para el jade sangre de Qiao Yu, con un valor de 400 millones.