```
Tras la declaración de Gu Dai, un silencio se cernió sobre la casa de subastas. Todas las miradas se dirigieron hacia el palco de Gu Dai en shock.
Una vez que Wang Lan había anunciado su interés, el consenso entre los asistentes era que el cuadro era efectivamente suyo. Nadie quería provocar a la familia Song por una simple pintura. Pero, para asombro de todos, alguien había decidido desafiar este acuerdo tácito al competir con ella en la puja.
Expresiones atónitas se reflejaban no solo entre los espectadores, sino también en Wang Lan, que estaba directamente involucrada. Ella pensaba que ya tenía esta puja asegurada, pero la inesperada aparición de Gu Dai echó a perder sus planes.
La expresión de Wang Lan se oscureció notablemente. Recordando el incidente anterior, levantó desafiante su tarjeta de puja, declarando:
—¡1,1 millones!
Sin perder el ritmo, Gu Dai contraatacó:
—5 millones.
Provocada, Wang Lan replicó con:
—5,1 millones.