```
Shen Yuansong, aunque ya pasaba de los setenta, se movía rápida y ágilmente, con paso firme como el de un tigre.
Cualquiera que lo viera no podía evitar exclamar lo verdaderamente saludable que estaba.
La directora permanecía a su lado, sonriendo mientras le explicaba el excelente rendimiento de Yun Yiheng en la escuela.
—Si un estudiante realmente pudiera tener esta oportunidad de actuar en la Sala Dorada antes de graduarse, sería un honor para su escuela.
La expresión de Shen Yuansong se mantuvo indiferente.
No escuchaba ni una sola palabra de lo que decía la directora.
Su edad había pasado factura a su vista; la chica en el escenario estaba demasiado lejos para que él pudiera ver su rostro claramente. Sin embargo, había algo en su comportamiento que le resultaba familiar.
Era como si estuviera viendo a Yun Zhen hace más de cuarenta años.
Con ese pensamiento, no pudo evitar acelerar el paso.
Detrás del escenario.