Kapitel 386: Hongos Luz de Luna Mortales

El tigre blanco intentó pisar sobre él —Hay un estanque de lodo abajo. El espesor del hielo es limitado. Solo una bestia puede caminar a la vez. Si somos demasiados, el hielo se romperá fácilmente.

El Lobo Blanco Plateado Escarcha todavía estaba al frente, congelando los pantanos uno a uno.

El tigre blanco seguía detrás e instruía a las bestias lobo a cruzar la capa de hielo una tras otra.

Al ver esto, Xue Ling, que volaba por el cielo, no pudo evitar reír —Definitivamente saben cómo encontrar una solución.

Huanhuan estaba orgullosa —¡Bai Di y Shuang Yun son muy inteligentes!

Sin darse cuenta, las bestias lobo habían caminado hasta el centro del pantano.

El tigre blanco olió algo sospechoso.

Inmediatamente alzó la cabeza y rugió —Hay un enemigo. ¡Tengan cuidado!

Tan pronto como cayó su voz, más de 20 bestias serpiente salieron disparadas de la poza junto al pantano.