[Teuila y la perspectiva de Sera]
Sera guiaba a Teuila a través del bosque cubierto de niebla ya que ella no podía ver. Mientras caminaban, las dos escucharon un chillido que atravesaba el aire a su alrededor. Se detuvieron y exploraron su entorno.
Los agudos oídos de la chica dragón captaron un ruido entre la niebla, y sus instintos inmediatamente se activaron. Sera gruñó mientras miraba la niebla que ocultaba el bosque y lo que había en él, haciendo que la amenaza inminente fuera aún más difícil de ver.
—Teuila, prepárate. No estamos solas —susurró ella, su voz cargada de una intensidad primordial.
Teuila, sintiendo la urgencia en el tono de Sera, agarró el puño de su arma, sus ojos recorriendo la niebla en busca del peligro no visto. El bosque se quedó en silencio, y la tensión en el aire era palpable. El gruñido de Sera resonaba a través de la niebla, advirtiendo a lo que acechaba cerca.