Raze miró al subdirector y lo reconoció de inmediato. Hubo varios encontronazos con él mientras estaba en la academia que el Mago Oscuro tuvo con él.
Lo que no sabía era por qué estaba allí y cuál era su implicación con todo desde el principio.
—¿Sabe acerca del hecho de que matamos a Feebie? Si lo sabe, ¿no lo convierte eso en el enemigo? —pensó Raze.
La única razón por la que todavía estaba tranquilo en ese momento era porque la Grulla Carmesí tampoco estaba reaccionando. Parecía que después de todo lo que había sucedido, ya nadie quería pelear más.
—Vine aquí en búsqueda de ti —dijo Amir—. Cuando los otros estudiantes de la Banda Roja regresaron, me informaron que miembros del Clan del Mordisco Letal habían atentado contra sus vidas.
—Supuse que también apuntarían a la tuya, y con tu ausencia, parecía que tenía razón. Sabía que Feebie tenía un rencor directo contigo. ¿Te importaría decirme, la viste por casualidad? —preguntó Amir.