—Selina tenía muy claro que si realmente luchaba contra Kerry ahora, ella estaría en desventaja. No solo no sería capaz de ganar ventaja, sino que además seguramente sería la que recibiera una paliza si Sharon se adelantaba para ayudar.
—Hmph, no te pongas tan chula. David está a punto de llegar. Veamos cómo puedes competir conmigo entonces.
En ese momento, Sharon recibió un mensaje en su teléfono. John había enviado un mensaje:
—Señorita, el asunto ha sido resuelto.
—¿David es muy famoso en Nueva York? —Sharon no pudo evitar preguntar y envió otro mensaje.
—¿David? Nuestra familia hace negocios con ellos. Principalmente excavan algunas minas de jade y las envían a Asia y América Latina. No tienen mucho poder y todavía nos deben mucho dinero a nuestra familia. Si no fuera por la protección de Quayle, nuestra familia ya habría ido a tocar a su puerta para exigir el pago.
—Mmm, está bien. ¡Descansa temprano! También tú has trabajado mucho.