No muy lejos de la casa de Scarlett, bajo un árbol sombrío, Logan estaba a punto de entregarle un paraguas a Scarlett. Se quedó en shock al presenciar lo que le había pasado a ella.
Corrió para ayudarla pero detuvo su paso cuando vio a Scarlett moverse rápidamente para someter al grandullón en un solo movimiento.
—¡¿Es experta en artes marciales?! —Logan murmuró con sorpresa. Esperó, trató de observarla y ayudaría si fuera necesario. Pero entonces, otro hombre apuntó un arma hacia ella. Estaba perplejo acerca de si ayudar o no.
Scarlett se burló por dentro del hombre de cabello negro. Dijo: —¡Maldita sea! Como asesinos, ustedes son muy ruidosos. —Su sonrisa ahora estaba llena de encanto maligno.
—¡Cállate! —El hombre de cabello negro espetó. Con una mano, trató de golpear a la maldita chica en la cabeza, pero antes de que se diera cuenta, el arma desapareció.