—¡No, jefe! —Código 10 fue a buscar su ropa de inmediato.
Un rato después, el hombre estaba vestido con su característica camisa negra y pantalones negros y salió del hospital con gasas envueltas alrededor de su estómago y pecho.
El primer lugar al que fue después de salir del hospital fue a la casa de Matt.
Cuando llegó al recinto de la sencilla villa, no salió de su coche incluso cuando apareció Lolita.
Lolita permaneció con la cabeza baja mientras esperaba con el corazón en la garganta.
—¿Dónde está Matt? —preguntó.
—Yo– No tengo idea de dónde fue —respondió Lolita.
—¿Cuándo fue la última vez que lo viste? —insistió.
—Recibió una llamada importante la noche anterior a la fiesta, hace cuatro noches. Y desde entonces, no ha regresado a casa —explicó.
Justo cuando Maverick estaba a punto de cerrar su ventana, Lolita cayó de rodillas y comenzó a inclinarse ante Maverick mientras las lágrimas le corrían por las mejillas.