Kimberly tembló al escuchar el estruendo del trueno. Su llanto cesó y lentamente miró el cielo soleado sobre su cabeza. Estaba despejado, entonces ¿dónde estaba la... lluvia?
Inmediatamente se levantó del campo al primer gota de lluvia. Antes de que pudiera dar un paso desde su lugar, una furiosa ráfaga de agua cayó sobre ella. Inhaló profundamente mientras permanecía enraizada en su lugar. Odia la lluvia, le recuerda aquella noche en que mataron a sus padres. Los recuerdos agonizantes, el dolor insoportable que siguió mientras veía a su madre siendo brutalmente violada mientras ella agitaba su mano para que Kim se fuera con sus hermanas antes de que las bestias las notaran.
La lengua de su padre fue arrancada y sus manos y piernas fueron cortadas mientras lo obligaban a ver cómo su esposa de mediana edad era violada por hombres corpulentos y malolientes.