Tras ser electrocutado, Shaun se sintió mareado. Lo peor era que le resultaba muy difícil respirar. Sentía que iba a morir en cualquier momento.
La descarga eléctrica de la familia Rong era claramente diferente de las descargas eléctricas ordinarias.
Rong Huangde miró fijamente a Shaun.
—Tú, bastardo, solo sabes esconderte en la oscuridad. Muere de dolor. No eres digno de tomar el antídoto.
Shaun se apresuró a pedir ayuda a Jordan.
—Deidad Jordan, tienes el suero Mirakuru para protegerte. Estarás bien después de descansar un rato. ¿Puedes darme el antídoto?
Jordan dudó un momento con el antídoto en la mano. Aunque se sentía mal y débil por todas partes, todavía era capaz de soportarlo. Pero Jordan no podía estar seguro de que la píldora fuera realmente un antídoto.
Ahora que Rong Huangde sabía que Jordan era una Deidad, ¿le daría una droga para controlarlo?